La lluvia cae por tiras en su piel.
Eran frías y estaba completamente empapado bajo su ropa, tal vez la fiebre estaba cerca de adueñarse de su cuerpo y bajar sus defensas, pues no importa cuanto trabaje en sí mismo siempre ha sido muy enfermizo; los músculos de sus piernas se tensaban mientras caminaba hacia casa y la chaqueta de Sergio está totalmente arruinada.
Era imposible para un futbolista caminar por las calles en un día lluvioso, mojado y con el sol escondido, sin ser visto de reojo por cada persona que se cruzará con él, Luka lo sabía bien y quería hacerse creer que no le importaba lo que la gente piensa, pero sus miradas queman y sus mentes pesan, así que de una manera lo hace, le importan.
Era incómodo, sentirse observado por cientos de ojos, no sabe qué estaba pensando al huir de tal manera en medio de la lluvia solo porque entró en pánico, duele, su pecho duele porque la herida sigue sangrando pero no quiere seguir revolcándose frente a la gente, así que se obliga a caminar aunque le duelan las piernas porque había llegado más lejos de lo que parecía.
El cabello se le pegaba a la piel y puede sentir la sensación del agua deslizándose en su cuerpo incomodando cada uno de sus sentidos ya alertas, no se atreve a mirar a ninguna de las personas que caminan con paraguas y pisando los charcos a su lado porque no quiere que lo reconozcan, lo miran, pero no parece que les importa y lo prefiere así.
Sabe que probablemente parezca un desastre bajo los faros de la ciudad y las luces de los autos cuando se detiene para poder cruzar, el viento provocado por el movimiento no cambia nada porque la lluvia lo deja arruinado aún cuando parece que está por terminar, pero le deja la piel de gallina y los ojos llorosos. No encuentra el momento de llegar a su hogar y tirarse en cualquier lugar que pueda esconderse, siente su piel comenzar a arder de poco a poco y los pedazos de su corazón tambalean en sus manos cuando se obliga a seguir caminando.
Se aparta el cabello pegado a su rostro y se detiene porque con cada paso que da caen pedazos suyos a los charcos pisados por la gente; los músculos de sus piernas tienen espasmos, jalones molestos que se mueven bajo la superficie de su piel y le incomodan al momento de avanzar; el celular en el bolsillo trasero zumbando constantemente anunciando la llegada de mensajes que debería responder, pero se siente aturdido como para hacerlo.
Y no sabe cómo las cosas aún pueden empeorar, pero lo hacen de alguna manera.
Tal vez su mente juega en su contra o tal vez su corazón no lo dejaba escuchar, porque palpitaba como el de un conejo huyendo de su presa, sin saber que él era el conejo. Todo va mal cuando se encuentra a gente que lo reconoce y llama su nombre, piensa qué tal vez eran fanáticos y esperaba no quisieran una foto, pero nadie le enseñó a diferenciar cuando algo va bien o va mal, por lo que no se detiene para averiguarlo.
Quizá debió correr o quizá debió detenerse, porque no escucha lo que le dicen por el ruido de los autos y los suburbios de la ciudad, tampoco lo deja el pitido en sus oídos que ha estado ahí desde que salió huyendo del dolor antes de ser tragado. Y la verdad es que las palabras se resbalan en fragmentos incoherentes de insultos y homofobia, pero a Luka no le importa porque son más altos que él y parecen molestos, el conejo está acorralado en la pared y lo único que quiere es intentar salvarse.
Pero puede que esté destinado a ser comido al final de su historia.
Todo es como el sonido arrugado del televisor y si las cosas iban mal ahora van peor, Luka no quiere lidiar con esto, está cansado, pero la vida no lo deja dormir y no sabe que hizo para merecer tan poco. La gente alrededor ahora está viendo más interesados que antes cuando era solo una figura deprimida en la calle cargando con su propio peso, quiere que alguien los calle y los detenga, quiere cubrirse los oídos y sentir al silencio ser lo único bueno en los últimos días, pero todos están entretenidos por un show no planeado en el que es el protagonista y graban con sus celulares como si fuese la imagen más entretenida.
Es una mierda, no ha hecho nada para que estén enojados con él porque ni siquiera los conoce, deseaba que Sergio estuviera cerca porque su novio era mucho más fuerte de lo que él alguna vez fue y era muy bueno en dar miedo a los que se meten con él o cualquier persona de las que aprecia.
Sergio... su chaqueta está arruinada, Dios.
Gotas caen de su cabello y ruedan por su cara cuando uno se acerca con el ceño fruncido y el rostro arrugado en una mueca, no sabe porque tiene la necesidad de cubrirse aunque no esté realmente presente en la situación, tal vez era un instinto que le decía que debería hacer un escudo en su cuerpo, hacerse un ovillo y evitar que lo dañen más de lo que ya está porque no cree soportarlo. Entonces siente un piquete y luego los ve correr.
Está desorientado porque perdió la coherencia de todo desde horas atrás cuando rogaba ser amado por la persona que le dio la vida, siente las gotas de la lluvia deslizarse por su brazo y caer al suelo, salvo que ya no está lloviendo y no hay ninguna gota.
Mira hacia abajo, sus brazos cubriendo entre las costillas y la pelvis como forma de hacer un escudo, sus músculos se habían movido en reflejo a algo que no conoce, pero entiende cuando ve las gotas rojas de su sangre caer en líneas atraídas por la gravedad hacia el suelo, debió sentir que el tiempo se detenía o iba más lento, pero en realidad solo avanzó con mayor velocidad entre gritos de gente que no hacía nada más que grabar.
Y lo único que Luka sentía era vergüenza.
Cómo el odio podía hacer tanto daño, aprieta su antebrazo con su mano temblando entre la taquicardia del momento, no se siente mareado y aunque el brazo le arde y se siente dormido, en realidad no siente dolor, irónico por la forma en que el pálido tono de su mano y el blanco de la chaqueta prestada se tornaba de un rojo muerto y opaco. Y si la chaqueta de Sergio ya estaba arruinada, ahora tendía un agujero en su mano y tendrá que robarle otra para sentirse mejor.
La calma en la que su cerebro y su cuerpo se movían era extraño al sentimiento de adrenalina que tenía por dentro, las luces todavía están cegando sus ojos y el agua cae de su cabello pegado a su piel, la gente solo son manchas difusas entre el bulto que formaron, no sabe si habrán llamado a emergencias pero espera que sí, porque no sabe si la herida es profunda, pero no cree que sea nada grave, y si pensaba eso solo para darse consuelo porque la sangre había llenado el pavimento, entonces nadie tendría porque reprocharle.
Tal vez se lo merecía. O quizá solamente toco el punto más bajo de su salud mental porque está realmente cansado de toda la gente y las amenazas de muerte en su correo, que decide buscar un culpable en sí mismo; sea lo que sea Luka no puede ver el cielo por las luces de la ciudad y le parece algo triste como el ser humano es capaz de destruir algo tan bello.
Y no se está desmayando ni nada por el estilo, la gente parece más asustada y nerviosa de lo que realmente deberían, en verdad, Luka no puede estar más consciente cuando la ambulancia llega y lo llevan al hospital, es cómico como el paramédico que presiona su brazo para evitar hemorragia parece ser un fan nervioso, quitando el hecho de que siente su mano entumecida.
Puede imaginar su rostro en las noticias y sus titulares, haciendo un mayor drama a la situación de lo que realmente es, se ríe en voz baja porque recuerda a Sergio decirle que sus vidas eran algún tipo de novela, era curioso, cómo podían amputarle el brazo y lo único que piensa es en el español; estaba seguro que estará teniendo un microinfarto en cuanto se entere que su día tranquilo termina manchado de sangre, desterrado por su madre y un agujero en el antebrazo. Y su equipo, deben estar teniendo una crisis conjunto porque no son buenos con las emergencias, no le sorprendería que entraran con un escándalo al hospital y derribando puertas.
La enfermera y el doctor mencionan como algún logro su actitud calmada, sin saber que está así porque su mente no procesa nada de las últimas horas. Le dicen que tiene «suerte» porque no se corto ninguna arteria o el músculo, sin embargo, la palabra «suerte» no parece conocida para él, porque suerte es lo último que ha tenido por lo que la palabra sabe gris en su boca.
Lo único que recibe son puntos y un par de horas en el hospital sin poder recibir visitas por su corta estadía, es extraño como no pasó por su mente escribirle a nadie aún con el celular vuelto loco en su bolsillo, hasta ese momento, así que una vez está solo en el aburrido lienzo blanco de la habitación revisa los cientos de mensajes que tenía por leer.
Piensa en su madre, en si se sentiría culpable si la herida era más allá de solo puntadas y lo último que le hubiera dicho era en forma de desprecio.
Mi amor, Sese ♥︎
por que no me coges el teléfono:(
Mi amor, Sese ♥︎
te fuiste temprano a la cama?
Mi amor, Sese ♥︎
estoy preocupado
Mi amor, Sese ♥︎
está todo bien lukita?
Mi amor, Sese ♥︎
LUKA???????
Mi amor, Sese ♥︎
Q NO TE HAYA PASADO NADA POR FACOR
Mi amor, Sese ♥︎
MIERDAMIERDAMIERDAMIERDA
Mi amor, Sese ♥︎
DIOSDIOSDIOSDIOSDIOS
Mi amor, Sese ♥︎
dios, si existes, sé que no hablamos mucho pero no me quites un pedazo de mi alma
Mi amor, Sese ♥︎
no te mueras amor
Mi amor, Sese ♥︎
luka si te mueres muero
Mi amor, Sese ♥︎
estoy en el hospital y no me dicen nada
Mi amor, Sese ♥︎
todos estamos aquí
Mi amor, Sese ♥︎
alguien va a llorar pero no te dire quien soy
Mi amor, Sese ♥︎
te amo por favor no te mueras
Mi amor, Sese ♥︎
ya me dijeron que estás bien
Mi amor, Sese ♥︎
nos diste un infarto lukita
Mi amor, Sese ♥︎
casi me muero yo 😭
Mi amor, Sese ♥︎
muertos tienen que acabar los que te lastimaron 😡
Mi amor, Sese ♥︎
no sé porqué no me dejan entrar a verte >:(
Mi amor, Sese ♥︎
voy a pelear con el guardia, esto es homofobia
Mi amor, Sese ♥︎
es broma, lo de la homofobia, no que me voy a pelear con el guardia
Mi amor, Sese ♥︎
tengo a gathz de apoyo
Mi amor, Sese ♥︎
nos echaron
Luka no puede evitar el sentimiento de culpa burbujear en su estómago, pero tampoco puede retener la risita que sale de sus labios por los cambios de humor de su novio, es un sonido agradable llenando la habitación porque se le escapa entre los dientes y pinta de amarillo el blanco enfermizo. No importa si tiene que recibir un disparo, nunca se arrepentirá de estar con Sergio.
Perdón por asustarte
✔️✔️
Estoy triste y me duele el brazo
✔️✔️
Me rompieron tu chaqueta :(
✔️✔️
Mira los mensajes enviados reflejados en sus ojos cansados y los lee con su mente dormida, cuando su pantalla es dominada por la imagen de una llamada entrante sonando entre el silencio, lo asusta haciéndolo saltar en su lugar y casi tirar el celular entre las sábanas, porque no esperaba una respuesta inmediata, sin embargo, responde y la mitad de la cara de Sergio aparece en la imagen, solo ve desde arriba de su nariz y parte del cielo nublado después de un día trágico, dejando obvio que estaba cualquier lugar menos en casa.
- "¡Luka, Dios mío! ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes? ¿Te duele? ¿Quién te hizo esto?¿A quién le importa la chaqueta? Amor, si quieres te regalo otras 10 más"- escuchó salir de su celular y tuvo que alejarlo un poco por la intensidad en la voz y la urgencia de esta. Jura que puede escuchar a Gareth decir «espera, ¿está Luka ahí?» del otro lado.
- "Yo... estoy bien, lamento asustarlos"-.
- "¿Qué fue lo qué pasó Lukita?"- escucha el acento de Cris preguntar y ve su cara empujar a la de Sergio para entrar en el plano, Marcelo también quiere unirse y luego son ellos tres, Gareth, Toni y Casemiro luchando para aparecer también.
Hace una pausa porque ni siquiera él sabe con certeza que fue lo qué pasó, su mirada es triste en el reflejo de su cámara y es incómodo encontrarse con sus propios ojos cansados, no quiere recordar porque tal vez es uno de esos momentos que su mente decidió borrar por su propio bien y tener una laguna mental no era nada nuevo para él porque creció rodeado de traumas que decidió eliminar para evitar que duelan.
Sergio parece notar esto y se enfoca en ser el único en la imagen, -"está bien, no es necesario que hablemos de eso"- le dice sonando tranquilo, con una voz que no usa con nadie más que con él y Luka agradece que sepa leerlo de pies a cabeza - "pero, mira por la ventana"-.
Frunce el ceño pero obedece y cuando mira a través de las ventanas claras en una noche oscura, es complicado de ver pero puede observar a su familia fuera saludándole con sonrisas borrosas entre la oscuridad de una noche sin luna, Marcelo mueve la mano y da saltitos para llamar más su atención, era tarde y tenían entrenamiento el día siguiente y aún así estaban ahí parados fuera de un hospital por él.
- "Esperaremos a que te sientas mejor para poder irnos a casa, Lukita"- le dice Sergio y su corazón se estremece porque realmente quiere sentirse mejor, desea sentirse mejor.
- "Vámonos a casa, cariño, así podemos acostarnos y me encargare de cuidarte, prometo que no dejaré que nada ni nadie más te lastime, te ayudare a reconstruir los pedazos que quedan"- Sergio habla como si fuese un secreto, algo solo para ellos dos, las palabras son un abrazo para su mente y como vendas para su corazón lastimado.
Puede que tenga que hablar con la policía antes de salir y pensar en las cosas más allá de la nebulosa difusa en su cerebro y el dolor en su brazo, pero sabe que fuera tiene a gente que está dispuesta a mover el mundo por él, que no lo ven como un bicho raro o un enfermo, nunca estará solo ni será dejado de lado porque lo aman y eso lo hace comenzar a desbordarse, volverse de cristal sin miedo a romperse, pero esta vez no llora y se entumece, esta vez las lagrimas salen y no queman su piel, llora y se permite sentir porque también es humano y contenerse solo lo empeora todo, llora y saca todo lo que se había acumulado en su pecho y le dió dolor de cabeza, llora porque su mano tiene puntadas para evitar que se desangre, llora porque los comentarios de la gente lo lastimaron, llora porque su madre no lo acepta, llora porque está cansado... llora porque el mundo es cruel, pero ellos lo aman.
Y quizá, sí que tiene suerte.
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No me gusta mucho este capítulo, siento que no está muy bien escrito, pero no me da el coco para más. Escuchen la canción del titulo, está bien bonis.
Cómo creen que voy a hacerle algo grave a Lukita tan cerca del final, no no, solo fue un susto. Que por cierto, si todo va bien «Perfecto» se acaba la otra semana, aunque el epílogo me voy a tardar más tiempo en escribirlo.
Como siempre, gracias por todo el apoyo, amo cuando dejan muchos comentarios porque me hace sentir qué tal vez no escribo tan mal. Nos vemos :)