Alexia
Habían terminado las clases y Melissa llegó como desquiciada a contarme sobre la fiesta de Fabián a la que según ella era urgente asistiéramos por que sería en el salón más elegante de la ciudad, en la antigüedad supuestamente fue un palacio y ahora se utiliza como salón de fiestas, aun que es demasiado elevado el costo de la renta.
Acepte ir con Melissa a la fiesta por que Nicolás iría con Cris, estábamos en un local de renta de veintidós y disfraces por la temática de la fiesta.
—Alexia...¿Que opinas de este? — Melissa salió de vestidor mostrándome un vestido rojo, largo con detalles en negro se veía hermosa con el.
—Es perfecto...— hable emocionada y el dueño del local le acercó algunos antifaces negros de encaje, en lo que ella elegía su antifaz pase al mostrador, me probé un vestido que desde que lo vi en el maniquí llamó mucho mi atención color beige con detalles en dorado y encaje azul, lo ame en cuanto me lo vi puesto, salí del probador y ni siquiera pedí la opinión de Melissa, a mi me había encantado el vestido, el propietario me acercó unos antifaces en color oro y tome uno que tenía muchas piedras de fantasía.
Ya con los vestidos rentados y todo lo que necesitábamos nos dirigimos a casa a arreglarnos el cabello y darnos una manita de gato en el maquillaje, nos vestimos y bajamos, mi padre nos vio con la boca abierta mientras bajábamos las escaleras
—Wow, parecen unas princesas...— dijo guiñándonoslo un ojo— vamos que su carroza espera señoritas— salimos de casa y nos subimos al auto de mi padre 15 minutos después habíamos llegado al salón. —Alexia, me llamas cuando quieras que venga por ustedes— asentí y me despedí de él.
—No puedo creer que Nicolás prefiere a Cris antes que a ti— dijo Melissa mientras se ponía su antifaz.
—No importa Mel, igual cada uno necesitamos nuestro espacio— le sonreí y me coloque mi antifaz.
—¡Hermana!— gritó una chica y se acercó a nosotras, cuando estuvo lo suficientemente cerca la reconocí.
—Paola... ¿Que haces aquí?— dijo Melissa mientras la esquivaba.
—Vine a la fiesta, Fabián es uno de mis mejores amigos y me invitó , ¿Como me veo? — dio una vuelta, llevaba un vestido dorado con pedrería incrustada y un antifaz de metal dorado.
—Horrible...— le contestó Mel
—¡Gracias! Tu siempre tan linda— sonrió— me voy, tengo una cita, nos vemos — se alejo.
—¿Como la soportas? — pregunte
—No tengo idea, creo que me estoy acostumbrando a su presencia— caminamos hasta la entrada del salón.
—¿No se suponía que viviría con su padre?
—Si... se suponía que en cuanto volvieran de la luna de miel, pero sigue en mi casa.
Entramos al salón y de verdad todo se veía espectacular, si no fuera por el DJ que tocaba podría decir que en verdad te sentías como en una fiesta de un reino, parecía como si en cualquier momento se fuese a presentar cenicienta o algo así.
Buscamos una mesa para sentarnos, estaban adornadas con grandes centros de mesas y algunas botellas de tequila las cuales Melissa no espero y las abrió para servirse un trago.
Estuvimos platicando un buen rato solas hasta que un chico alto invito a bailar a Melissa y ella como siempre me abandonó en la mesa era típico de ella, mientras ella bailaba yo me dirigí al baño, entre en un cubículo y me dispuse a hacer mis necesidades cuando un grupo de chicas entraron al área de lavamanos y espejo.
— Estas pastillas, harán que se sientan como en las nubes, de verdad que estarán bailando toda la noche sin descanso y podrán tomar el alcohol que quieran sin sentirse borrachas se los aseguro— reconocí la voz de Paola, quien la viera que tan "Fifi" que aparenta ser y vende droga.
— Tienes alguna para... ya sabes... para que la chica con la que vengo caiga rendida a mis pies— escuche la voz de un chico entrando al baño, traté de ver quien era por la pequeña grieta del baño pero no logré distinguirlo ni logré reconocer su voz.
—Claro, solo que este tipo de producto es muy caro— hablo Paola.
— No importa el precio...dame algo que pueda camuflar en su bebida— dijo el chico y escuche como salieron todos del baño, me espere unos minutos y salí del cubículo, no podía creer lo que acababa de escuchar, lo que más me pesaba es que probablemente hoy alguna chica esté en peligro y no se de quien se trate.
Salí del baño y me dirigí a la mesa donde Melissa ya estaba esperándome comiendo unas botanas.
—¿Donde estabas? — me gritó por el ruido de la música.
—En el baño— me senté en una de las sillas y mire fijamente a Melissa y ella en seguida supo que pasaba algo, no sabía si contarle o no lo de su nueva hermana.
—¿Estas bien?
—Mel... estaba en el baño y...
—¡Hola!— se acercaron un par de chicos — Vamos a bailar— Melissa se levantó sin pensarlo y yo fui más por compromiso con el chico que tenía la mano estirada , me levante y fui a bailar con él un par de canciones me agradeció y volví a mi mesa, me serví un tequila con refresco y mas botana para pasar el rato en lo que Melissa aparecía de nuevo.
—Hey ¿Y tu galán?— un chico se sentó junto a mi, lo mire raro y él supo que no lo reconocí así que se quitó el antifaz.
—Max... lo siento con estas máscaras es difícil reconocer a las personas.
— Yo si te reconocí— me sonrió y se volvió a colocar el antifaz.— te vez hermosa.— no le respondí nada, era demasiado incómodo así que solo me quede en silencio.— ¿Quieres bailar? — se levantó y me extendió la mano.
—No creo que sea buena idea...
—Vamos anda, Nicolás no te verá es más no creo que te reconozca, tu también puedes divertirte como el, lo vi divirtiéndose con la hermanastra de Melissa...
—¿Con Paola?
—No sé su nombre, solo la conozco porque Mel me lo contó, vamos como los viejos tiempos, le negarás un baile a tu mejor amigo— Negué con la cabeza tome su mano y me levante para ir a la pista de baile.En ese instante comenzaron con la música romántica, la de parejitas.
— Max... ¿Y si bailamos cuando comience otro tipo de música?— traté de volver a la mesa pero el me tomó de la mano.
—Claro que no— me sonrió — bailar lento es más fácil, anda solo una canción, que sea mi bienvenida de Japón.
— Está bien— le sonreí, teníamos mucho sin verlo, aun que extrañamente me incomodaba demasiado su presencia ahora que regreso del intercambio, me tomó de la cintura y me acercó a su cuerpo quedando nuestras caras a muy poca distancia.
Comenzamos a bailar, yo trataba de evadir su mirada y alejarme de él.
—Cuando estaba en Japón... yo quería volver de inmediato, varias veces hablé con mis padres para ceder mi lugar a otro alumno.
— ¿Volver? Pero si estar allá es una gran oportunidad — le conteste.
— Yo solo esperaba regresar para... decirte que me gustas mucho desde hace años y que no deje de pensar ni un segundo en ti cuando estuve en otro continente.
—Max, lo siento...
—Se que ahora tienes novio— me interrumpió— pero espero que me des la oportunidad, conoces a Nicolás hace apenas un mes y a mi de años...
— Max, espera — deje de bailar y me separe de el— a lo que me refiero es que lo siento pero yo no siento lo mismo... nunca lo eh sentido, yo solo te veo como un amigo.
— Está bien...— dijo serio — lo siento, ya incomode la situación — rio un poco.
—No te preocupes... vamos a sentarnos— el asintió y caminó tras de mi hasta la mesa— iré por agua, creo que se llevaron todo— reí al ver a un par de chicos alejándose con las botellas y bebidas que había en la mesa.
— No te preocupes, yo voy.— Max se alejo de la mesa y yo tome asiento, podía ver a Mel aún bailando con el mismo chico, ella me miro y me sonrió haciéndome señas raras, creo que ya tiene ligue nuevo, ella nunca para.— aquí tienes, en un momento traerán aguas a las mesas, por ahora te traje un mojito — Max me entregó un vaso de cristal con la bebida — ¿Espero y te guste?
—Gracias— le sonreí y le di un trago.
Espero y este capítulo les guste!
Si ven algo mal escrito están en la libertad de corregirme.
Gracias por el apoyo a esta historia, era una idea que tenía demasiado tiempo en mi cabeza y gracias a ustedes la estoy plasmando!
Espero y hallan llegado hasta aquí ! La imagen no es el final jaja ahora la puse en un punto algo intermedio.
¿Tienen alguna conspiración de esta historia, alguna teoría? Me gustaría leerlas 😅