Harry se despertó justo a las 7 am. Despertarse temprano era un hábito que estaba empezando a adoptar de Severus, aunque todavía se despertaba lentamente, sin despertarse completamente como lo hacía su compañero. Era consciente del aire frío, aunque él mismo estaba cómodamente abrigado en la cama. Recordó que el clima había comenzado a empeorar a medida que avanzaba la noche y, según el frío que se había asentado en la mazmorra, debe haber continuado en esa dirección toda la noche. Sin duda, Severus había lanzado un hechizo de calentamiento antes de que se durmieran, o tal vez se despertó antes con el frío. Harry se quedó inmóvil y escuchó, luego se movió un poco. No, estaba solo en la cama. ¿Estaba Severus en el baño? ¿O se había despertado y se había ido a sentar en el salón hasta que Harry despertara? Estaba completamente en silencio en sus habitaciones, al parecer. Harry estaba juntando pequeños fragmentos de información en su mente, pero aún no estaba lo suficientemente despierto para sacar conclusiones o salir de la cálida cama para comprobarlo. Pasaron varios minutos más antes de que a Harry se le ocurriera usar magia sin varita para encender un fuego en la chimenea de su habitación, para empezar a quitar el frío del aire antes de que sus necesidades corporales exigieran que se levantara de la cama y visitara el baño.
Harry todavía estaba esperando que su cerebro alcanzara la plena conciencia cuando escuchó un ruido afuera, en la sala de estar. Sonó como una puerta cerrándose, y poco después, la puerta del dormitorio se abrió y un Severus cansado y completamente vestido entró.
Notó el fuego y miró rápidamente a Harry, quien todavía estaba aturdido por el sueño.
–Lo siento si te desperté, pero parece que te estás despertando por tu cuenta. ¿Dormiste bien? –preguntó, sabiendo que había sido solo unas pocas horas antes de que se fueran a dormir.
–Ummm –Eso fue lo mejor que Harry pudo hacer; su cerebro no estaba completamente listo para la conversación.
Severus miró con añoranza a la cama, unas pocas horas más de sueño se sentirían tan bien. Pero años de experiencia le habían enseñado que era mucho mejor quedarse despierto una vez que llegaba la mañana en lugar de intentar dormir solo una o dos horas. Se sentiría peor. Asintió hacia Harry.
–Duerme un poco más entonces, y sal a la sala de estar cuando te despiertes. El Ministerio ha estado trabajando toda la noche para resolver esa batalla, y sospecho que la Ministra proporcionará una actualización en breve
Severus se acomodó en su silla junto al fuego, con una taza de café fuerte y el Diario El Profeta. Lo habían despertado hacía unas horas y le habían pedido que fuera a la propiedad muggle. Le leyo la mente a algunos muggles más para los aurores y ajustó los recuerdos de una docena más para respaldar la versión de este evento que esperaba que se hiciera pública hoy. Se sentía tan culpable. Estaba seguro de que el tío de Harry había sido asesinado y, sin embargo, todavía no se lo había dicho a Harry. El joven lo sabría muy pronto, porque estaría en el informe del Ministro, seguro. Pero Severus optó por dejar que Harry pasara la mañana, al menos, sin ser molestado por ese desarrollo. ¿Fue realmente para darle a Harry un poco más de tiempo sin darse cuenta, o porque Severus no quería tener que dar la noticia? Harry había dicho que ya no sentía nada por el hombre, de una forma u otra, pero ¿Cómo resistiría eso a un evento como este? Meditaba mientras leía.
Harry se quedó dormido brevemente después de escuchar la voz de Severus, la persistente comprensión de que había noticias de los acontecimientos que esperaban cuando despertó le impidió volver a dormirse por completo. Eventualmente, Harry cedió a la curiosidad y abandonó su cama.
Severus escuchó que la ducha se cerraba y asintió al elfo doméstico que merodeaba en la esquina para que trajera su desayuno. Llegó justo un momento antes que Harry, recién salido de su ducha de la mañana.
–Buenos días –ofreció, mientras se acomodaba en su lugar en el sofá, arqueando la espalda en un estiramiento. Aceptó una taza de té de Severus– Entonces, ¿Qué pasó anoche? ¿Cuándo te fuiste?
–Fui convocado para ayudar hace varias horas, y llegué aquí justo cuando estabas despertando. Mi papel es solo una parte de una historia mucho más grande. He ordenado el desayuno aquí, y cuando hayamos terminado, podemos ir al Anexo del Ministerio para su sesión informativa. Albus se unirá a nosotros, pero no quiere usurpar el papel de la Ministra aquí.
Harry arqueó una ceja mientras se unía a Severus para moverse hacia la mesa donde acababa de aparecer un buen desayuno, y llenó su plato con una selección de alimentos. Esta Ministra parecía muy abierta en su interés por la opinión del Director y no se ofendió, como lo había estado Fudge, cuando ofreció un pensamiento. ¿Quizás el profesor Dumbledore quería mantenerlo así?
– ¿Una reunión informativa? –preguntó, preguntándose si tenía razón.
–Esto permite que el director sea parte de la planificación de la ministra sin exponerla a críticas de que ella es simplemente una marioneta de Albus. Aparentemente, hay algunas quejas entre algunos miembros de la antigua red de Fudge de que ella no está a la altura de la tarea y confía demasiado en asesores externos, presumiblemente el director. La participación de los Guerreros de las Tierras Invernales hace que este sea un evento de interés específico para ti, y ni siquiera es necesario mencionar la participación de Albus.
Harry se encogió de hombros mientras comía su comida. Las tonterías que sucedieron en el Ministerio: no podía imaginar por qué alguien querría ser Ministro.
Hubo un flujo constante de estudiantes y familias deambulando por el vestíbulo frente al Gran Comedor durante toda la mañana; los elfos domésticos servían el desayuno a los madrugadores decididos a la hora habitual, pero dejaban comida disponible toda la mañana para los que dormían hasta tarde. Solo alguien que mirara atentamente se daría cuenta de que había muchos más aurores entre la multitud de lo habitual, yendo y viniendo del Anexo del Ministerio (y su conexión por red flu con el propio Ministerio en Londres) y el cuartel general de investigación establecido en un granero en desuso no lejos de la finca de Sir Harold. Nadie pensó dos veces en el Director paseando por el pasillo y encontrándose con Harry y Severus justo cuando llegaban a la puerta del Anexo.
Kingsley Shacklebolt levantó la vista de su escritorio cuando los tres entraron y se levantó para saludarlos.
–Buenos días a todos –dijo con una ligera inclinación de cabeza– La Ministra estará aquí en un momento. ¡Qué mañana, qué mañana! Qué noche, en realidad. Ha sido un trabajo de tiempo completo solo para mantenerse al día con los desarrollos. Tendremos un informe completo tan pronto como llegue la Ministra Bones.
Antes de que los tres pudieran tomar asiento alrededor de una mesa, llamas verdes se encendieron en el suelo y la Ministra de Magia entró, seguido segundos después por los aurores Stark y Entwhistle.
Se intercambiaron saludos antes de que la ministra señalara a todos los asientos para que pudiera comenzar su sesión informativa. Stark tomó la iniciativa allí, con la ayuda de su colega más joven.
–Bueno, señora, señores, pasamos la mayor parte de ayer y de anoche coordinando con la policía muggle local para entrevistar a todos los que pudimos encontrar en el área que estaban en la batalla, o como lo llaman ahora los muggles, el área de "entrenamiento". Los muggles comenzaron a tomar el campo entre Hogwarts y Hogsmeade ayer por la mañana temprano, pero la lucha comenzó alrededor del mediodía. Todos abandonaron el campo histeriados una hora más tarde. El tiempo empezaba a empeorar y la retirada fue muy desordenada. Como resultado, muchos de ellos regresaron a la gran propiedad muggle cuando estaba oscureciendo, por suerte para nosotros, porque solo unos pocos muggles pudieron abandonar el área antes de que pudiéramos entrevistarlos. También pudimos llevar a nuestros aurores al campo lo suficientemente rápido como para detectar algo de magia que se hizo allí, resulta que no todos los muggles eran realmente muggles. Detectamos las firmas de dos apariciones separadas, aunque en un caso lo llamaría un intento de aparición.
Entwhistle consultó un fajo de pergaminos.
–Según nuestras entrevistas y la información proporcionada por Madam Pomfrey y la enfermería de Hogwarts, parece que hubo un total de nueve muertes. Adney Riddle, conocido por nosotros como Adney Pucey, murió cuando su cabeza fue aplastada por una roca, un disparo errante de una de las catapultas muggles. Hubo cuatro muggles cuyos corazones se detuvieron durante la batalla y nuestros curanderos mágicos no pudieron revivirlos en la enfermería. Charles Frost, uno de los líderes del movimiento antimagia, conocido por nosotros como Cornelius Fudge, podría haber sido tragado por los Wyrms Negros. Recuperamos su varita en la escena y había algo de sangre y una muy leve firma de aparición en ese lugar, dadas las circunstancias, concluimos que su intento de aparición no fue del todo exitoso. Con toda probabilidad, se lo tragaron antes de que pudiera aparecerse, o se partió mientras se aparecía. Estaba en compañía de Vernon Dursley, un líder muggle del movimiento, también se cree tragado. Finalmente, llegamos a la conclusión de que los muggles Chester Willoughsby y Mark Digby fueron tragados de manera similar.
Harry sintió que su pecho se contraía. Estaba consciente de cada respiración que estaba tomando, y sintió que su respiración se aceleraba. Más muertos de los que dar cuenta, pero esto era diferente. El tío Vernon estaba muerto. Cornelius Fudge estaba muerto. Además de un Mortífago, que encontró el camino de regreso a Voldemort por su propia voluntad, después de que Harry había eliminado los medios por los cuales Voldemort podía obligar a obedecer. Por supuesto, los muggles seguían siendo víctimas, y Harry estaba dolido por sus muertes, como siempre. Se sentó con cara de piedra por un minuto antes de darse cuenta de que toda conversación había cesado a su alrededor. Cuando se movió para mirar a los demás, se sonrojó al darse cuenta de que todos lo miraban con expresión de preocupación.
–Estoy bien, lo siento por interrumpir la reunión informativa –comenzó Harry, con voz insegura y cerca de romperse– Es solo que, bueno, había tres personas que representaban una amenaza para mí personalmente, y me acabas de decir que dos de ellos se han ido. Solo eso.
Los dos aurores parecían bastante confundidos por esa declaración, pero se callaron ante la reacción del profesor Snape.
Harry sintió una mano en su hombro, apretando sutilmente para que fuera poco probable que los demás pudieran darse cuenta de que estaba siendo consolado. Se volvió y miró al hombre mayor, con la esperanza de sacar fuerzas para controlar sus emociones de alguien que había dominado esa habilidad. Sosteniendo la mirada de Severus, inhaló y exhaló, lentamente, hasta que se sintió más estable. Asintió a su compañero vinculado, y Severus retiró lentamente su mano.
–Gracias por ese informe, Auror Stark, Auror Entwhistle. ¿Estamos anunciando la participación de los Wyrms Negros? Pensé que no los íbamos a mencionar –Harry trató de hacer avanzar la sesión informativa, para desviar la atención de sus emociones.
–No, señor, la participación de los Wyrms Negros es conocida solo por las personas en esta sala. No vamos a poner eso en ningún informe escrito, pero queríamos darle a este grupo toda la información que teníamos –Stark todavía se estremecía al recordar su sesión informativa con la Ministra, al enterarse de que había dragones en el suelo aquí mismo en Hogwarts– Pasamos las horas antes del amanecer colocando a los heridos que habíamos llevado a la enfermería, ya los cuatro muggles que murieron de problemas cardíacos, más cerca de la propiedad muggle. Los que están vivos ahora tienen recuerdos apropiados, aunque muy vagos, de huir del campo, gracias al profesor Snape. Uno de nuestros aurores nacidos de muggles está con ellos, para asegurarse de que estén a salvo hasta que puedan ser rescatados. Los ubicamos en un granero en una propiedad cerca de la finca muggle, y si nadie los encuentra, él mismo los llevará a la finca.
Harry lanzó una mirada agradecida a Severus, contento de saber que contribuyó a esta resolución.
–Decidimos no entregar el cuerpo de Adney Pucey –continuó Stark– Ningún muggle lo va a extrañar, y nadie recordará lo que le pasó. Estaba con Hiram McNair y uno de los líderes del movimiento anti-magia cuando fue asesinado por la roca. Creemos que McNair simplemente se apareció. Había una firma definitiva de aparición cerca del cuerpo cuando lo recuperamos. El Sr. Mason, el muggle con el que estaban Pucey y McNair cuando comenzó la batalla, ahora tiene un vago recuerdo de ambos hombres huyendo cuando comenzó la batalla –Stark asintió hacia Severus, con una sonrisa calculadora en su rostro. Esa había sido idea de Snape.
Hubo asentimientos por todas partes ante esa noticia. Había muchas incógnitas en esta situación, pero en el caso de que el movimiento antimagia sobreviviera, y en el caso de que los Mortífagos vieran algo que ganar al infiltrarse en él, al menos McNair no sería bienvenido de nuevo.
– ¿Pero el Primer Ministro no vio a los Wyrms Negros en persona, desde el castillo? Pensó que eran una bandada de pájaros, ¿no es así? –Harry todavía estaba preocupado de que esta no fuera una historia tan segura como podrían haber esperado.
Severus habló en ese momento.
–Tomé un traslador al Ministerio de Magia muy temprano esta mañana y visité al Primer Ministro con la Ministra Bones –comenzó, con un gesto de asentimiento a la mujer– Esos recuerdos en particular ya no existen. Recuerda solo una batalla desorganizada que se convirtió en una retirada aterrorizada.
Madam Bones agregó:
–No queremos crear pánico entre los estudiantes y los padres con cualquier sugerencia de que la tierra aquí es inestable. Mantendremos la historia entre aquellos con magia de que una bandada de pájaros pareció aparecer en medio de los muggles y, volando al unísono, un fenómeno que los muggles llaman "murmullo", los asustó terriblemente y abandonaron el campo. Cualquiera que esté familiarizado con la tierra aquí sabe lo accidentado que es el terreno, y probablemente asumirá que volaron desde una de las gargantas y tomaron a los muggles por sorpresa.
La mente de Harry todavía estaba en los muertos. Nunca parecían dejarlo.
– ¿Y cómo van a explicar a los muertos de los que ya no queda nada? –preguntó al grupo.
Severus parecía como si hubiera tragado algo que sabía desagradable. ¡Maldito chico por su enfoque en los muertos! El hecho de que hubiera tan pocas muertes en un ataque como este, con el tipo de armamento involucrado, fue un resultado asombroso. ¿Por qué persistía Harry en su preocupación por los pocos combatientes, sus oponentes, por el bien de Merlín, que no sobrevivieron?
La Ministra respondió.
–Bueno, sí, Sr. Potter, eso requerirá un poco de esfuerzo. Tenemos, o más exactamente, el profesor Snape ha plantado recuerdos de una retirada muy desorganizada, y de varios participantes que dejaron a sus camaradas para seguir caminos y campos abiertos en una dirección diferente. Nuestros aurores han sugerido a la policía muggle que algunos de ellos vagaron demasiado cerca del borde de un desfiladero particularmente profundo, cuyo borde estaba oculto por la nieve. Nuestros aurores informaron que creen que cuatro hombres tropezaron por el borde y cayeron al fondo, caídas a las que no se pudo sobrevivir. Les informamos a los muggles que hay agua corriente en el fondo del desfiladero, por lo que es probable que los cuerpos no estén donde cayeron, pero estamos buscando.
Entwhistle continuó.
–Tenemos gente en el Ministerio en este momento, transfigurando trozos de carne en cadáveres que pasarán por los cuerpos maltratados y empapados de agua de los cuatro hombres desaparecidos, y agregarán suficiente magia para procesar los cuerpos a través del proceso forense muggle para obtener certificados de defunción. No es bonito, pero habrá "cuerpos" en ataúdes sellados disponibles para ser enterrados. Cornelius Fudge es un problema, como siempre, porque muchos muggles lo recuerdan como Charles Frost, de las manifestaciones y los informes de noticias. El profesor Snape creó un recuerdo en el Sr. Mason de que Frost había compartido que era soltero y no tenía familia cercana. Tenemos que crear registros muggles de Charles Frost porque, por supuesto, no existe un Charles Frost real. Le conseguiremos un certificado de defunción adecuado de los muggles y haremos que uno de nuestros aurores reclame el cuerpo haciéndose pasar por un pariente lejano, para cerrar el registro de papeleo muggle del hombre –Entwhistle no estaba tan informado como sus superiores sobre la situación personal de Harry, así que continuó– Dursley tiene una esposa y un hijo, y Sir Harold ha informado que acompañará a un policía local hoy a visitar a la esposa para informarle lo sucedido. Willoughsby era el borracho del pueblo en el pueblo no muy lejos de la propiedad de Sir Harold. No hay familia de la que hablar. Con toda probabilidad, acompañó a alguien que le ofreció un trago. Sir Harold se ha ofrecido a proporcionar un entierro adecuado para el cuerpo, ya que los muggles no esperan que nadie lo reclame. Mark Digby es de Nottingham y la policía muggle está buscando familia. Nuevamente, si nadie reclama el cuerpo, o si la familia no tiene los medios para enterrarlo, Sir Harold ayudará.
Harry se había quedado muy callado. Con una mirada de triste simpatía hacia Harry, Albus observó:
–Sir Harold parece ser un gran benefactor aquí.
Amelia asintió.
–No creo que enfrente ninguna responsabilidad civil o penal por nada de esto, pero se siente moralmente obligado a hacer algo. Era un "viejo tonto", el término usado por el Primer Ministro para describirlo, y tal vez él mismo lo sienta.
Después de que la Ministra y su personal se fueron, Harry finalmente habló con Severus.
–No sé si mi tía tiene dinero para enterrar a su esposo. Si hay necesidad, lo proporcionaré.
Severus negó con la cabeza con tristeza.
–Si alguna vez hubo alguien que no mereciera tu ayuda, Harry, ese hombre sería él.
–No se trata de lo que se merecía. Lo sé. Pero si puedo ayudar a mi tía, lo haré.
Petunia había pasado una Nochevieja tranquila. Dudley estaba pasando el fin de semana con un amigo de la escuela, y Marge, que se había ido unos días antes enojada por la partida anticipada de Vernon, no iba a venir para la víspera de Año Nuevo.
Vernon la había llamado más temprano ese día, bastante emocionado de que habría "un ataque" más tarde ese día. Tenía bastante confianza en la capacidad de la escuela para protegerse a sí misma y al pequeño pueblo contra Vernon y sus amigos, por lo que no estaba preocupada por eso. Tenía la esperanza de que él pudiera llegar a casa a primera hora de la tarde, si las tonterías en Escocia terminaban rápidamente y sir Harold ponía a disposición su helicóptero, pero luego vio los informes meteorológicos en las noticias del mediodía. Se habían formado tormentas en el norte que comenzaban a arrojar cantidades significativas de nieve al suelo y hacían imposible viajar. Con toda probabilidad, Vernon estaba atrapado por la nieve en la propiedad de Sir Harold, incluso los helicópteros estaban en tierra hasta que mejorara el clima. Cuando no recibió ninguna llamada de él al caer la noche, imaginó que el mal tiempo también había roto las líneas telefónicas.
Varios vecinos se estaban reuniendo en los Cavendish esa noche, por lo que cruzó la calle sola para unirse a la espera del nuevo año, asegurándose de que todos supieran que su Vernon estaba cubierto por la nieve en la finca de Sir Harold Beckwith en Escocia. Típico de las reuniones de Nochevieja de Little Whinging, estaba en casa y en la cama a las doce y media.
Estaba terminando los platos del desayuno cuando el timbre de la puerta indicó que tenía visitas. Una mirada a través de la ventana cuando llegó a la puerta le proporcionó la curiosa visión de un enorme vehículo de lujo, como el que había recogido a Vernon para uno de sus viajes a Escocia. ¿El de Sir Harold?
Petunia admitió a sus visitantes, un caballero de aspecto nervioso de la oficina del alguacil local, y un hombre que reconoció de la televisión como el mismísimo Sir Harold. Rechazaron su oferta de té y se sentaron torpemente en el salón.
–Señora Dursley –comenzó Sir Harold– me temo que tenemos muy malas noticias. Hubo una especie de accidente en Escocia. Nuestra gente salió al campo para uno de nuestros simulacros, y aparentemente una bandada de pájaros apareció de un barranco sin previo aviso, creando pánico. Era un caos cuando todos salieron corriendo del campo, Vernon estaba con un pequeño grupo que se aventuró demasiado cerca del borde de uno de los profundos desfiladeros, y los cuatro cayeron en él. Hay una corriente de agua corriendo en el fondo, por lo que enviamos un equipo con las primeras luces del día para buscar los cuerpos. Lamento sinceramente informarle que acabamos de recibir la confirmación de que el cuerpo de su esposo ha sido recuperado. He hecho arreglos para que los restos sean colocados en un ataúd sellado, ya que el daño de la caída fue muy extenso, usted y su familia deben atesorar sus recuerdos de Vernon mientras miraba antes de esta calamidad.
Petunia jadeó en estado de shock y se acurrucó en el sofá mientras se le formaban lágrimas en los ojos. El agente se retiró a la cocina para servirle una taza de té a la angustiada mujer, dejando que sir Harold siguiera tratando de calmarla. Se sentó incómodo, observándola tratar de controlar sus emociones. Cuando ella siguió pareciendo incapaz de hablar, él ofreció:
–Me puse en contacto con una de mis secretarias personales que vive en el área de Londres, y vendrá a ayudarla más tarde esta mañana. Ella podrá ayudar con los arreglos, contactar personas, legalidades. La señorita Catherine Smythe-Jones, joven muy capaz. Seguro que le será de gran ayuda.
Sir Harold miró alrededor del salón mientras continuaba esperando a que su anfitriona se recompusiera. Tenía muy poco contacto con personas fuera de su estrato social y no recordaba haber estado nunca en un hogar tan modesto. Se preguntó si la señora Dursley podría hacerse cargo de los gastos de organizar un funeral, se pondría en contacto con la señorita Smythe-Jones tan pronto como se fuera para autorizarla a pagar el costo del funeral con sus fondos
El agente le ofreció una taza de té bastante mal preparada, que Petunia aceptó aturdida y descubrió que no podía beber porque le temblaban las manos. Ella le permitió ponerla en la mesa de café para ella.
Los dos hombres estaban contemplando cómo salir de la casa de los Dursley cuando la salvación llegó en la forma de la señorita Smythe-Jones, una mujer elegante y extremadamente competente de casi 30 años que había trabajado para Sir Harold desde que dejó la universidad. Vivía en el lado sur de Londres y pudo llegar a Little Whinging más rápido de lo esperado. Calmó a la nueva viuda, la llevó al solárium con una taza de té recién hecha y se reunió brevemente con su empleador para recibir instrucciones. Luego comenzó el proceso de hacer llamadas telefónicas y arreglos.
Al final del día, la señorita Smythe-Jones al menos había dejado mensajes para todos los que necesitaban ser contactados y concertó citas para Petunia al día siguiente para organizar el funeral y reunirse con su abogado. El hijo, Dudley, estaba de camino a casa y la hermana Marge llegaría mañana por la tarde. Uno de los hombres de Sir Harold la había llamado para informarle que el papeleo se había completado y que el ataúd de Vernon sería enviado desde Escocia y debería llegar a la funeraria al día siguiente. La propia señorita Smythe-Jones tomó una habitación en el Hotel Whinging, en lugar de usar un establecimiento más elegante pero más distante, para poder guiar a Petunia a través de las actividades necesarias mañana. La pobre parecía bastante perdida y se aferró a ella de inmediato.
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Thurston Landon se sentó malhumorado detrás de su gran escritorio, en una oficina enorme, en las oficinas ejecutivas en expansión ubicadas sobre el enorme almacén de Landon Enterprises. Le habían pedido que asistiera a una reunión de los directores de la firma esta mañana. Los directores nunca se conocieron el día de Año Nuevo, así que fue una sorpresa.
–Él no había visto venir esto. Por supuesto que no, ¡la empresa acababa de tener el mejor año de su historia! ¡Y todo fue obra suya! Había visto la oportunidad con Lord Black y lo animó a representar a la empresa en las Tierras de Invierno, y eso le dio a Landon Enterprises un asiento de primera fila para los cambios notables que ocurrieron allí, y acceso inmediato a la súbita avalancha de productos repentinamente disponibles desde el norte. De acuerdo, no había conseguido un contrato como el único distribuidor de ingredientes de pociones de las Tierras de Invierno para el resto del mundo mágico, pero eso podría haber sido exagerado. Y su petición de ciudadanía había sido denegada, pero tampoco a nadie más que él supiera se le había concedido la ciudadanía.
¡Presidente Emérito! ¡Qué insulto! ¿Había planeado esto su maldito hijo a sus espaldas? ¿La decisión de Eustace de permanecer más cerca de casa el año pasado había sido realmente porque él y Margaret iban a formar una familia, o había querido acercarse a los otros que tenían intereses en Landon Enterprises, para planear un golpe? ¿Obligar al anciano a pastar, para que el arrogante joven cachorro pudiera tomar las riendas de la empresa?
Hirvió durante al menos una hora, furioso. Al cabo de un rato, y tras varios vasos de whisky, empezó a calmarse.
Todavía tenía su oficina, le gustó eso. Era la habitación más grande del edificio. Se había asegurado de eso cuando hizo construir la suite ejecutiva hace muchos años. Tal vez el título no estaba nada mal. Y, por supuesto, Eustace había dicho que consultaría con su padre, que tenía tanta experiencia, cuando asumió el cargo de presidente. Los arreglos financieros fueron completamente satisfactorios, aunque en verdad, Thurston tenía amplios recursos personales al margen del negocio. Podría haber mantenido su nivel de vida incluso si sus lazos con la empresa se hubieran cortado por completo.
La experiencia de ser apartado no fue agradable, y Thurston imaginó que pasaría mucho tiempo antes de que pudiera perdonar a su hijo y a sus dos hermanos menores. Los negocios eran su vida, lo habían sido durante años. Miró por la ventana durante un rato, observando cómo se acumulaban las nubes oscuras y una mezcla de nieve y lluvia empezaba a caer. Algunas ideas comenzaron a filtrarse en su mente, otras empresas que nunca fueron adecuadas para Landon Enterprises, por lo que no las había perseguido. Tal vez él miraría en eso.
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Harry había permitido que Severus lo llevara de regreso a sus habitaciones en el calabozo después de la reunión temprana con la Ministra. Solo cuando Severus estuvo seguro de que Harry estaba siendo sincero en su insistencia de que estaba bien y no molesto por las noticias sobre su tío, Severus estuvo dispuesto a liberarlo para que se uniera a sus amigos en la sala común de Gryffindor.
La sala estaba bastante llena, con una dotación completa de Weasleys, una variedad de visitantes de otras casas y familias extensas de estudiantes actuales que optaron por reunirse en la acogedora sala en lugar del Gran Comedor. Harry vio a Hermione de inmediato, pero antes de que pudiera acercarse a ella, fue interceptado por Neville y la faraona Nitrocris, quienes se veían muy serios. Harry recordó haber notado algo allí durante las vacaciones, y tenía la intención de preguntar, así que permitió que lo llevaran a un rincón de la sala común para hablar con ellos.
Neville fue directo al grano.
–Harry, Nitrocris y yo planeamos casarnos tan pronto como deje la escuela, a finales de este año.
Harry estaba un poco desconcertado, por decir lo menos.
–Eso es genial, chicos, genial. ¿Qué piensa tu abuela de esto, Neville? Y, Nitrocris, ¿hay algún problema con que te cases con alguien que no sea egipcio?
Nitrocris resopló.
–He introducido muchas reformas en Egipto desde la última vez que nos vimos, Harry Potter. Pero recientemente aprendí que muchos de mis sujetos están ignorando estas nuevas formas de hacer las cosas. Hay una percepción, al menos, de que no hablo en serio y que lo que estoy haciendo ahora es temporal. Pude aislar a mis tíos y sus familias, pero tienen aliados. Tal vez no personas aliadas a ellos personalmente, sino a la forma en que solían ser las cosas. En los últimos meses, se ha hablado mucho del hecho de que no estoy casado ni tengo hijos, y muchas de las reformas y programas que he introducido se están viniendo abajo porque esto es una distracción. He trabajado muy duro para hacer avanzar a mi país, y me duele mucho ver que el progreso se detiene, Harry Potter. Ahora, hay mucha presión para que me case con uno de mis primos más jóvenes, un niño de solo siete años. ¡Su padre intervendrá para gobernar, y yo estaría peor que donde estaba antes de que el demonio matara a mi tío mayor y a mi primo! Y no lo soportaré –Respiró hondo antes de agregar– De hecho, le pedí a Neville que tuviera un hijo conmigo. Me doy cuenta de que él tiene una vida aquí en Inglaterra, familia y amigos, y probablemente no quiere irse. El matrimonio fue idea suya.
Harry parecía atónito.
–Puedo ver por qué querrías que Egipto siguiera adelante. Pero, ¿es esto lo correcto para ti? ¿Estás siendo presionada para hacer algo que realmente no quieres hacer, solo para abordar este desafío? Quiero decir, es posible que tú y Neville quieran casarse algún día, pero tal vez ahora mismo no sea el momento adecuado. ¿Hay algo que podamos hacer para permitirte actuar según tu criterio?
–Su director me lo dijo hace un año. Seguir mi corazón y mi mente, elegir mi propio camino y no dejar que nadie ni nada más dicte mis acciones. Mi corazón y mi mente me dicen que mi futuro está con Neville Longbottom, no con uno de mis primos pequeños. Y ahora es un momento tan bueno como cualquier otro.
Todo esto parecía ser una historia de un solo lado ¿Qué posición tenía Neville al respecto? Dadas las circunstancias, no parecía haber ninguna forma educada de preguntar.
El mismo Neville parecía saber lo que Harry estaba pensando, y finalmente intervino.
–Le dije a Nitrocris que la amo y que me encantaría casarme con ella, tan pronto como deje la escuela en junio. Mi abuela no está encantada de que planee casarme tan pronto después de dejar la escuela, y está preocupada por cómo será mi vida, pero lo entiende. Ella dará su bendición.
Harry los miró a los dos. Había algo que lo fastidiaba, un pensamiento en el fondo de su mente que no salía adelante.
–Bueno, no soy de los que hablan en contra de casarse demasiado joven, ¿verdad? Parece estar funcionando bien para mí, y no veo ninguna razón por la que no funcione tan bien para ti. Neville, hiciste un gran trabajo ayudando a las Tierras de Invierno y sus granjas, y has sido genial en los invernaderos, estoy seguro de que contribuirás con grandes cosas en Egipto –La imagen de Neville viajando, y la arena, de repente volvió a su mente: ¡el destino de Neville!– Sabes, Neville, cuando aprendí por primera vez que podía ver caminos o destinos antes que las personas, a veces trataba de ver los caminos de las personas que conocía. Vi un camino delante de ti, y no pude entender lo que significaba. Te vi moverte a lo lejos, y estoy seguro de que vi arena. Supuse que significaba que viajarías. Tal vez tendrías un negocio de abastecimiento de ingredientes para pociones de lugares exóticos o algo así. No soy bueno para averiguar qué significan los caminos, así que abandoné ese ejercicio. Pero ahora veo una conexión entre tus planes con Nitrocris y lo que vi de tu destino.
Sorprendentemente, Neville reaccionó de alguna manera por lo que dijo Harry, él ya sabía en su corazón que esto era lo correcto para él. Sin embargo, Nitrocris estaba emocionado con la noticia. Sabía lo que era correcto para ella y se sintió aliviada al saber que también lo era para Neville.
– ¿Vendrás, Harry Potter, y el profesor Snape también, cuando nos casemos? –preguntó Nitrocris.
– ¡No me lo perdería! –Harry le aseguró, mientras golpeaba a Neville en el brazo con una sonrisa.
Mientras Harry les deseaba un Feliz Año Nuevo, Nitrocris tomó sus manos entre las de ella.
–Harry Potter, Neville me ha dicho lo que esperas que ocurra en el futuro. Habrá otra batalla –Harry estaba un poco sorprendido de que Neville compartiera esa información con alguien, pero cuando consideraba la relación entre Neville y Nitrocris, tal vez no debería sorprenderse. También estaba complacido de que ella aceptara este conocimiento previo sin todo tipo de giros sobre su fuente, que parecía ser la forma en que los magos británicos manejaban ese tipo de cosas. Lo que ella dijo a continuación realmente lo asombró– No luchas por ti, sino por todos nosotros. Soy tu aliada y vendré a Inglaterra para ayudarte cuando llegue el momento. Traeré a otros si lo deseas. La magia egipcia es protectora. Tenemos afinidad con los minerales, las piedras y podemos mantenerlos fuertes. Entiendo tu amor por este castillo y estoy comprometida a protegerlo, como tú. Envíame un mensaje cuando llegue el momento y estaré aquí.
Harry finalmente pudo llegar a Hermione, que estaba sentada en una silla al margen de la multitud Weasley. Compartió la noticia de la muerte de su tío. Las noticias de Neville eran para que Neville las compartiera cuando sintiera que era el momento de hacerlo.
Como era de esperar, Hermione entendió e inmediatamente dio voz a lo que Harry estaba bastante seguro de que otros estaban pensando.
–Antes dijiste que no sentías nada por él, Harry. Me imagino que te sientes un poco triste por tu tía, y tal vez por tu primo, pero no pareces molesto. ¿Estás realmente bien? –ella trató de confirmar. Aceptó el asentimiento de Harry en respuesta y simplemente apretó su mano. Los dos dirigieron su atención al pequeño Harry, gorgoteando alegremente desde una posición elevada al final de la rodilla de su padre.
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Voldemort había encargado a cada uno de sus mortífagos tareas muy específicas. Su gran plan había sido recibido con mucho entusiasmo, pero sabía que este grupo necesitaba instrucciones claras si algo iba a suceder.
Todavía no era el momento de hacer nada que revelara sus planes a los demás, pero ahora había una oportunidad de aprovechar lo que habían hecho los tontos muggles. Él ya tenía a sus Mortífagos en el campo fuera de Hogsmeade lanzando encantamientos de desilusión en las máquinas de asedio, en manos de magos entrenados y criaturas mágicas, esas armas podrían infligir daño. Y en el momento adecuado, lo harían. Asumió por ahora que los magos y las autoridades muggles pensarían que los muggles simplemente recuperaron sus máquinas y las alejaron, y no notarían ni se preocuparían por las aparentes desapariciones. Ciertamente, en su época, ningún estudiante se adentraba en esos campos, y supuso que seguiría siendo así, por lo que confiaba en que esto no se descubriría por accidente.
También hizo que los Mortífagos buscaran un área adecuada en algún lugar de los páramos, para que todos los alineados con él se reunieran, cuando fuera el momento adecuado. Las brujas y los magos podrían aparecerse en Hogwarts instantáneamente a distancia, pero en realidad eran solo una parte del ejército mágico que había podido reunir, y no todas las criaturas eran capaces de ese tipo de transporte. Necesitaba un lugar desde el cual otros pudieran viajar por cualquier medio que usaran, y llegar a Hogwarts en no más de un día. Le había dado a ese equipo algunas instrucciones y áreas bastante específicas en las que buscar, y él personalmente inspeccionaría la tierra recomendada antes de que comenzaran los preparativos reales.
La batalla que resolvería este asunto, de una vez por todas, sería épica y recordada durante milenios. Voldemort no estaba preocupado por el resultado, sabía que prevalecería. Su preocupación ahora era que se organizara para lograr el máximo impacto y se recordara por todas las cosas correctas. Justo cuando llegaba el invierno, pensó. Después de la amenaza de grandes tormentas de nieve, pero antes de que un deshielo lo empapara todo.
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Holi este capítulo fue algo rápido de traducir y por ello esta aquí hoy :3
Como vieron, Petunia ya se entero, Sir Harold es realmente moralmente correcto en este caso, Neville se nos casa, no se ustedes pero me encanto lo que le dijo Nicrotris a Harry sobre ser su aliada, se me aguaron los ojitos.
Bueno, nos leemos pronto :3