Un Fénix de Aire |¦Sirius Bla...

By ntcHerms

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Una joven Fénix se pierde en el camino del amor totalmente ciega ante su familia, amigos y el mundo en genera... More

Cast.
Act I
Prólogo.
🌪️One🌪️
🌪️Two🌪️
🌪️Three🌪️
🌪️Four🌪️
🌪️Five🌪️
🌪️Six🌪️
🌪️Seven🌪️
🌪️Eight🌪️
🌪️Nine🌪️
🌪️Ten🌪️
Act II
🌪️Eleven🌪️
🌪️Twelve🌪️
🌪️Thirteen🌪️
🌪️Fourteen🌪️
🌪️Fifteen🌪️
🌪️Sixteen🌪️
🌪️Seventeen🌪️
🌪️Eighteen🌪️
🌪️Nineteen🌪️
🌪️Twenty🌪️
🌪️Twenty One🌪️
ACT III
🌪️Twenty Two🌪️
🌪️Twenty Three🌪️
🌪️Twenty four🌪️
🌪️Twenty Six🌪️
🌪️Twenty Seven🌪️
Epílogo.

🌪️twenty-five🌪️

988 103 10
By ntcHerms



❝Boda Parte 2❞























•─: ∙:°:◦:∙•∙:◦:°:∙ :─•

























Alessandra Di Lessio jamás imaginó que lo más difícil por hacer en su vida fuera caminar por aquel pasillo sin sentir nervios y caer.

Su padre y hermano la entregaron a James que sonreía ampliamente para continuar con su camino hasta donde Sirius esperaba con sus ojos llenos de lágrimas y una enorme sonrisa.

-No dejes que me caiga James- Pidió Alessa en un susurro.

-Antes muerto linda-

Alessa suspiró de tranquilidad al llegar al altar sin ningún problema. Sirius le sonrió como nunca antes lo había hecho y le ofreció su mano a lo cual ella la tomó sin dudarlo.

-Te entrego lo más valioso que tengo en mi vida Canuto, ella siempre a sido nuestra princesa, el corazón de cada uno  de nosotros y más te vale cuidarla porque aunque seas mi hermano, ella es mi mundo- Le dijo James con autoridad.

-No sólo el tuyo Corny- Le recordó el Black.

Alessa subió junto a él para quedar ambos frente al enviado del ministerio que los casaría.

-Estamos hoy reunidos porque todos hemos visto el gran amor que se expresa entre Sirius Black y Alessandra Di Lessio-

El enviado comenzó a hablar, pero ninguno de los novios escuchaba bien lo que decía debido a que se veían con una sonrisa el uno al otro tratando de decirse lo que sentían en aquel momento sin ninguna palabra.

Llegado el momento de los votos Sirius sacó un pergamino del tamaño de su cabeza y lo vio.

-Ni sus tareas eran tan largas - Se burló Remus en voz alta.

Todos vieron al hombre lobo y el sonrió pidiendo perdón.

-¿Lo dije o lo pensé?- Le preguntó a James.

-Ambas, igual que todos- Respondió Fede a su lado.

Sirius decidió ignorarlos y se aclaró la voz en una tos falsa para leer sus votos.

-Cuando entré a la escuela conocí a una grupo de chicos que iban en un compartimiento, entre ellos una hermosa niña rubia destacaba y en cuanto entré ahí ella dirigió sus enormes y preciosos ojos azul cielo hacia mi y mi mundo se detuvo en ese momento, olvidé como respirar, olvidé mi nombre, incluso olvidé hablar -

Algunos soltaron unas risas y otros, como Minnie, se preguntaban ¿Porqué recordó como hablar?

-Ella se presentó conmigo y luego se enojó por una apodo que dije, como sea ella me perdonó. Al llegar a la escuela fue quien me apoyó y me dijo que podía elegir mi destino sin importar mi apellido y así lo hice -

>>Sin importar cuántos años pasaban o cuánto yo cambiaba ahí estaba, Alessandra Di Lessio, a mi lado apoyándome y sin saberlo, también me enamoraba y enamora cada día.

Ella se convirtió en la luz que veía cada que la oscuridad llegaba a mi vida, en mis sueños más hermosos y en mi definición de perfección.

Y durante mucho tiempo me sentí tan poco para ella hasta que de nuevo me salvó y me hizo ver que siempre podía mejorar.

Así que en los últimos años lo hice y aún lo hago, trabajar día a día para algún día llegar a ser la mitad del hombre que ella merece en su vida<<

>>Jamás había conocido el amor, hasta que ella llegó y me lo mostró.

Jamás conocí el cariño o la devoción hasta que la vi a los ojos.

Y jamás sentiré por nadie lo que siento por ella ahora.

Te amo mi amor y realmente estoy muy agradecido contigo por hacerme una mejor persona a casa día <<

Alessa sonrió y secó una lagrima que corría por su mejilla.

Sacó un pergamino casi igual de largo que el de Sirius y este sonrió al verlo.

-Desde que nací mi padre me contaba historias del amor verdadero, del amor que sólo encuentras una vez en la vida, del amor que es indestructible- Comenzó

>>Ese amor con el cual todos sueñan y el que se supone yo estaba destinada a encontrar.

Al pasar los años dejé de creer en aquellas historias, pensando que jamás llegaría esa persona a mi vida y luego pasó lo impensable.

Un niño de cabellos cafés chocolate y ojos hermosos como nubes de tormentas entró en mi compartimiento y se quedó en shock por unos segundos antes de hablar.

En aquel momento supe que mi decisión de no creer en las historias de mi padre había sido errónea.

De alguna forma sentí como todo mi mundo se volvió una huracán con la llegada de Sirius Black. <<

Sirius sonrió como diciendo "Tengo ese efecto en las personas"

-Al paso de los años me fui enamorando de aquel niño que tan amable, cariñoso y atento era conmigo a pesar de que con los demás es un patán-

Sirius abrió la boca ofendido, luego vio un poco a su alrededor y todos asentían.

-Y después de mucho tiempo me di cuenta de que mi verdadero amor si existe y estuvo frente a mi todo el tiempo-

>>Me recriminé al saber que me había enamorado de mi mejor amigo, pero luego alguien- Alessa vio a Reggi que sonrió inocente- Me dijo una frase que cambió mi vida "¡Abre tus malditos ojos mujer!"

Gracias por eso Reggi- El aludido bajó la mirada avergonzado- Ese día me di cuenta que todos mis temores de arruinar nuestra amistad no eran más que inundandos, pues nunca tuvimos solo una amistad.

Siempre, desde el primer día que te vi, supe que serías el amor de mi vida Sirius Black y hoy agradezco al mundo por estar junto a ti.<<

Sirius sonrió y beso la frente de la rubia con cariño.

-Sirius Orión Black- Llamó el enviado y el ojigris lo vio atento- ¿Aceptas como tu esposa y compañera a Alessandra Clarissa Di Lessio? Para amarla, respetarla, protegerla, honrarla, cuidarla y luchar a su lado en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y...- El enviado leyó lo que Sirius le había puesto en el libro con una mueca - En la riqueza y más riqueza- Alessandra soltó una risa, típico- Hasta que la muerte los separe-

-Acepto-

-Alessandra Clarissa Di Lessio ¿Acepta usted como esposo y compañero a Sirius Orión Black? Para amarlo, respetarlo, protegerlo, cuidarlo, honrarlo y luchar a su lado en la salud y la enfermedad, en la riqueza y más riqueza hasta que la muerte lo separe-

-Acepto-

Sirius tomó la mano de Alessa con cuidado y se dijo a si mismo que ese no era un sueño, realmente estaba pasando.

-Por el poder conferido a mi por el ministerio británico de magia los declaro marido y mujer, ya puede be..-

El enviado no terminó la frase cuando Sirius ya estaba besando a su ahora esposa y ella a él con cariño.

-¡Por el señor y la señora Black!- Gritó Alaric desde la primera fila- ¡Hay que declarar Santa a Alessa si aguanta a Black más de un año!-

Los aplausos no se hicieron esperar y el primero en abrazarlos fue James quien estaba llorando.

-Mis bebés- Decía mientras lloraba.

-Quítate Cornamenta- Exigieron Remus y Fede.

Los dos abrazaron a los novios con cariño, pero rápidamente fueron corridos por Amy y Regulus, ellos por Lily y así sucesivamente.

Una vez todos los invitados los había abrazado, besado y alagado comenzaron a ser guiados por los elfos a la carpa mágica donde sería la fiesta.

Alastor Moody se acercó a su ahijada y la vio con una mueca de sonrisa.

-Mi niña, mi preciosa princesa- Le dijo con cariño a lo cual ella saltó a abrazarlo- Más te vale cuidar a mi tesoro Black o te voy a enseñar porque todos me tienen tanto miedo-

Sirius tragó seco sabiendo que lo más probable es que si lo hiciera.

Al final el auror se fue y dejó paso a la última en felicitarlos, la profesora McGonagall.

-Minnie ¿Estas llorando?- Preguntó Sirius.

-Cállate y dame un abrazo Black-

La profesora abrazó a sus dos niños como si fueran sus hijos y lloró como nunca lo había hecho.

-Minnie si tu lloras, yo voy a llorar- Recordó Alessa

-Cierto y no hay nada peor que el maquillaje de una novia corrido- Respondió la mayor- Es solo que para mí esto es un sueño, Sirius Black, casado-

-¡Minnie!- Le dijo este

-Vamos a la carpa- Pidió James llegando.

Los cuatro se dirigieron al lugar donde ya los esperaban aplaudiendo a los novios.

-Es hora de bailar señora Black- Pidió Sirius con una sonrisa.

-Esperemos que no me pise señor Black-

Los ahora esposos caminaron al centro de la pista de baile comenzaron a bailar con gracia y delicadeza, el aura de Alessandro, que siempre hacía ver a los demás menos agraciados en su presencia, envolvió a Sirius haciendo que ambos se vieran más magníficos de lo que ya son.

La música terminó y de nuevo los aplausos llegaron a ellos mientras sonreían.

-Sí me permites Sirius, un padre quiere bailar con su hija- Pidió Enzo llegando junto a ellos.

-Claro suegro-

Enzo lo piso al propio cuando pasaba junto a él y Sirius sonrió tratando de aguantar el dolor.

Euphemia se acercó a él y lo abrazó con cariño besando su mejilla.

-¿Bailas madre?- Preguntó el joven y ella sonrió.

-Con mi hijo, siempre-

A medida que la canción avanzaba los cambios de parejas eran más frecuentes. Después de Enzo fue Alastor Moody quién bailó con su ahijada, mientras que Euphemia le cedió su lugar a Anne Di Lessio.

Alastor se retiró después de un rato diciendo "Yo no bailo" y entró Fleamont Potter, mientras que Anne cambió con nada más y nada menos que Minerva.

-Minnie- Llamó Sirius mientras bailaban y ella lo vio- Jamás te agradecí-Siguió el joven con algo de vergüenza.

-¿Porqué Black?-

-Por ser la primera madre que conocí-

McGonagall sintió como sus ojos se llenaban de lágrimas y abrazó con cuidado al menor.

-Nunca me dieron la bendición de un hijo, Sirius, pero tú eres lo más cercano que tengo a uno- Confesó.

Sirius también lloraba, después de todo esa mujer le enseñó todo lo que sabe. El ojigris se aferró a ella mientras la abrazaba.

-Te amo muchísimo Minnie-

-También yo a ti-

James cambió con su padre y comenzó a bailar con Alessa mientras ambos daban piruetas y se lucían con su baile de mejores amigos como en todas las fiestas.

Marlene llamó la atención de McGonagall y Sirius con una tos falsa y se acercó a ellos.

-¿Puedo bailar con el, profesora?- Pidió con tranquilidad.

Minerva asintió y se retiro secando las lágrimas que aún bajaban mientras que Sirius sonrió y abrazó a la rubia frente a él.

-¿Listo para enseñarle a esos idiotas como bailan los mejores amigos?- Preguntó Marlene.

-Desde que nací Marly-

Sirius y Marlene comenzaron a hacer su extraño baile de mejores amigos mientras los demás los veían y reían.

De a poco cada merodeador bailó con Alessandra mientras que Amy, Lily, Alice y las demás bailaban con Sirius.

Alaric dejó que Alessandra bailará con Regulus después de tres piezas con él, disque porque ya estaba cansado, pero en realidad lloraba a mares.

-Te ves hermosa cuñada- Alagó Reg

-No estás nada mal cuñado-

-Te tengo un obsequio- Murmuró el menor a la rubia con una sonrisa.

-¿Y porqué lo dices tan bajito?- Preguntó ella en el mismo tono.

-Porque nadie debe de saberlo- Alessa se extrañó de aquello-Cuando yo te diga vas a venir conmigo ¿Entendido?-

-Más te vale que sea un auto nuevo Reg-

Después del baile comenzaron los discursos de quienes se ofrecían.

Primero fueron Enzo y Fleamont quienes hablaron del orgullo que le dan sus hijos y de lo felices que estaban.

Luego Anne y Euphemia hablaron juntas y pidieron muchos nietos a lo cual Enzo negó rotundamente amenazando a Sirius con la varita.

Los merodeadores contaron historias que juraron nunca mencionar de cómo se habían topado con escenas entre los dos recién casados y Sirius subió a bajarlos.

Regulus y Amy contaron cómo ellos eran los realmente responsables de esta unión y cuanto les había costado hacerlo.

Marlene, Alice y Lily mostraron las fotos que había tomado a escondidas con el paso de los años y la foto que Anne les había dado de cuando Sirius tocaba el piano y Alessa lo veía.

McGonagall habló sobre lo buena que es Alessandra y lo mucho que va a ayudar a Sirius.

A medida que la boda avanzaba, la noche llegaba y los tragos subían los discursos se ponían cada vez más interesantes.

Regulus se acercó a Alessandra en una parte del discurso de Moody donde enumeraba las maldiciones que le lanzaría a Sirius en caso de dañar a su princesa.

-Ven conmigo si quieres vivir- Bromeó Reg y le ofreció una mano a su cuñada.

Alessa sonrió y le dijo a Sirius que tenía que ponerse de acuerdo con Regulus para algo de James y se fue.

El menor de los Black la guió fuera de la carpa y tomó el final de su vestido para que así ella pudiera caminar tranquila.

Al llegar casi a dar la media vuelta a la enorme carpa y algo lejos de la entrada Regulus hizo que Alessa se sentará en una banca que estaba dispuesta en el jardín.

-Espera aquí, ya vuelvo- Le dijo y se internó en el bosque que estaba cerca de Castelbury.

Al pasar 5 minutos el chico Black volvió a salir, pero no estaba solo venía acompañado de...

-¡Sevy!- Saltó Alessandra contenta.

En aquel momento todo el enojo que llegó a sentir en su contra hace dos años se fue y lo único que quería era estar con quién fue uno de sus mejores amigos.

La rubia saltó a sus brazos con una sonrisa y él la recibió con añoranza y cariño envolviendo sus brazos alrededor de ella.

Regulus se dijo a si mismo que sobraba ahí y se retiró con tranquilidad mientras ellos aún se abrazaban.

-Sé que tal vez no quieras verme- Comenzó el ex-Slytherin

-¿Estas loco? No he hecho más que extrañarte en los últimos meses- Confesó la rubia volviendo a tomar asiento.

Snape la imitó y sonrió mientras tomaba sus manos en las suyas.

-No podía dejar de venir a tu boda, aún si es con el inútil de Black, sé que lo amas y el a ti, eso me hace feliz- Comenzó Severus.

-Este día no estaba completo sin ti aquí Sevy, te he extrañado muchísimo-

-Y yo a ti rubia, como no tienes idea-

Alessa sonrió cuando la música llegó a sus oídos desde la carpa, se levantó y le ofreció una mano a Snape.

-Ya bailé con todos mis hermanos y amigos, menos contigo-

Sev se levantó y tomó la mano que ella le ofrecía atrayéndola hacia él y abrazándola mientras bailaban con cuidado.

-Tengo que decirte algo- Le dijo Severus después de un rato bailando.

Alessandra posó con cuidado su mano en el antebrazo izquierdo de Snape mientras una lagrima corría por su mejilla al sentir la magia oscura que la marca desprendía.

-Ya lo sé Sevy- Contestó ella.

-Pero no sabes el porqué-

-¿Hay una razón para esto?- Preguntó ella con tristeza.

-Jamás haría esto por gusto Alessandra, lo sabes-

Ella se alejó de él viéndolo con enojo esperando a que siguiera.

-Dime tu maltida razón entonces- Pidió algo dolida, quería enserio creer que tenía una buena razón.

-No puedo decirla ahora, pero...-

-Siempre hay un pero contigo Sev-Comenzó de nuevo la rubia-Cuando heriste a Lily me dijiste que no lo hiciste con intención, pero que no lo sentías, cuando hiciste lo de James dijiste que tenías motivos, pero que no eran de mi incumbencia y ahora esto-

-Alessa te juro que todo tiene una buena explicación-

Severus hablaba con tono más de súplica que de disculpa, como si rogará con su mirada que le creyera.

-¿Cuál es?- Preguntó Alessandra de nuevo.

-No puedo decirla, no ahora-

-Claro que no-Soltó la chica-Nunca puedes, ni a mi, ni a Lily, ni a Alaric-

-¿Qué tiene que ver Alaric?- Preguntó Sev asustado.

-Tú sabes muy bien de lo que hablo Snape-

-¿Él te lo...?-

-No fue necesario, te conozco Sev- Ella se acercó y acarició su mejilla-Sé cuando estás feliz y enamorado y sólo estabas así con Alaric cerca y después de que él me dijera que su novio rompió su relación con palabras insultantes te volviste más frío que de costumbre-

Sev sonrió ante la inteligencia de su amiga, pero sabía que el enojo que ella estaba mostrando ahora no iba a acabar en nada bueno.

-No quiero que te atrapen Sev, no quiero tener que ir a ver a mi mejor amigo a Azkabán por el resto su vida- Suplicó ella con lágrimas en sus ojos.

-Eso no pasará, él me lo prometió-

-¿Él? ¿Él quién?-

Severus se dio cuenta que había dicho demasiado así que se volteó con dirección al bosque.

-¡Siempre es lo mismo contigo! ¡Quiero ayudarte Sev! ¡No seas un idiota y déjame cuidar de ti!- Rogó Alessa.

-Sí quieres saber algún día la verdad-Severus vio a Alessandra por unos momentos sintiendo como su corazón se rompía- Habla con Dumbledore, él tiene la culpa-

El pelinegro se fue después de eso dejando a la rubia con duda ante el anciano sentado en la mesa contigua a la suya.

La rubia volvió a su boda con una sonrisa, tal vez parte de la noche fue arruinada, pero el ver a su ahora esposo bailando y haciendo como pez junto a sus amigos le hizo ver que no todo en la vida es malo...

Y sin embargo se topó con la mirada de Regulus, ella se acercó a él y lo abrazó.

-Fue el mejor regalo, gracias Reggi-

-Escucho un pero- Murmuró Reg.

Alessa vio a su alrededor y se dijo a sí misma que no podía confiar en qué él viejo no escuche así que vio a Reg a los ojos.

"No confío en Dumbledore" confesó en su mente.

Regulus sonrió y le hizo una señal para que leyera su mente de nuevo.

"Bienvenida al club cuñada, ese viejo tiene algo entre manos. Hizo que Severus hiciera algo, lo sé, así como me está chantajeando para ser su espía con los mortífagos"

Alessandra abrió mucho los ojos y la boca y trató de disimular como si estuviera riendo.

"Vamos a averiguar todo entonces"

Regulus tomó el brazo de su cuñada y fingiendo que no pasó nada ambos se unieron al baile.












Nota:

Solo 3 capítulos más y termina, no estoy llorando, ustedes lloran.

¿Qué les pareció el capítulo de hoy?

¿Tienen teorías?

¿Creen que Alessandra fue muy ruda con Sev?

¡Se casaron al fin! ❤️❤️

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