❝Reg y Amy❞
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Reg caminaba nervioso por la sala de estar de casa Potter.
-Vas a gastar el piso- Le dijo Sirius que leía el periódico.
-O tus zapatos- Siguió James que leía otro periódico.
-O ambos- Terminó Fleamont.
-¿Y si me dice que no?-Soltó Regulus nervioso.
-Sí a Sirius le llegó el milagro seguro que a ti también- Animó Remus.
Regulus lo vio mal y luego siguió caminando con la cajita en su mano derecha.
-Vamos, todo va a salir bien Reggi- Le Animó Euphemia.
-O puede salir corriendo- Bromeó Alessa que traía una bandeja de postres.
James y Sirius saltaron sobre los portes, pero de inmediato estaban pegados contra la pared con una fuerte corriente de aire.
-Los hice para mi- Los regañó Alessa.
-Pero no te los vas a comer todos- Le recordó James.
-¿Quién dijo que no?-
La rubia comenzó a devorar los pastelillos que había preparado.
-De acuerdo, ya es hora- Anunció Reg viendo su reloj.
-Tú puedes hijo- Le dijo Fleamont abrazándolo.
-Todo va a salir bien mi niño-
Euphemia besó ambas mejillas de Regulus y lo abrazó también.
-Confío en ti cuñado- Le dijeron Remus y Alessandra.
-Tú puedes hermanito- Terminaron James y Sirius.
Regulus caminó a la chimenea a paso dudoso y respiró hondo, lo peor que podía pasar es que su novia salga corriendo.
-¡El fuerte Di Lessio!- Dijo en voz alta.
Pronto se encontró a si mismo en la casa Di Lessio, salió de la chimenea y un elfo lo limpió de inmediato.
-Buenos días amo Regulus- Saludó.
-Buenos días Air ¿Dónde está Amelia?-
-La amita está en su cuarto, señor-
-Gracias-
Regulus subió corriendo las escaleras, pero luego recordó que no se había anunciado, así que a mitad de las escaleras frenó sus pasos.
-¡REGULUS BLACK ESTA EN LA CASA!- Gritó para que todos lo supieran.
Rápidamente escuchó los pasos de alguien y sonrió, terminó de subir las escaleras y lo poco que alcanzó a ver antes de caer al piso fue una melena rubia.
Amelia le sonrió al haber caído sobre el.
-Hola Reggi- Saludó la chica.
-Hola preciosa-
Regulus se levantó cuando Amy por fin lo hizo y se acercó a ella besando su frente.
-¿Qué haces aquí? ¿Teníamos una cita?-
-No, sólo quería invitarte- Explicó el pelinegro.
-¿A dónde? -
-Solo ponte algo abrigado-
La Di Lessio dudó por unos segundos viendo extrañada a su novio.
-Estamos en verano- Recordó ella.
-Confía por una vez en mi Violett-
-¡No me digas así Arcturus!-
Amy corrió a su cuarto a cambiarse mientras Regulus la esperaba en el vestíbulo.
-¡Reg! ¡Me pareció escuchar tu grito!- Saludó Anne llegando junto a él.
-Hola señora A-
-¿Qué haces aquí?- Preguntó Fede llegando.
-¡Federico!- Regañó Anne.
Fede la vio inocente antes de besar su mejilla.
-Lo mismo me pregunto yo ¿Qué haces aquí chico no sé usar un condón?- Le respondió Amy bajando las escaleras.
-¡Amelia!- Regañó Anne.
-¿Qué? El debería estar en su casa, con su esposa embarazada- Recordó Amy inocentemente.
Regulus trataba de no reír, pero ni siquiera Anne se contenía.
-Se me olvidó algo- Explicó Fede.
-¿Los condones? Ya es un poco tarde- Le respondió Amy.
Anne estalló en risas junto a Regulus mientras Fede veía mal a Amy.
-Nunca te agradó Bianca- Aseguró el rubio.
-Y nunca lo hará- Contestó la chica y luego se volteó a ver a su madre- ¿Puedo salir con Reg?-
-¡No! /Sí- Respondieron Fede y Anne.
-¡No te metas Federico!- Dijeron Anne y Amelia.
Fede vio molesto a su madre y negó con la cabeza antes de irse.
-Puedes ir- Aceptó la señora Di Lessio.
Amy salió de la casa sin siquiera preguntar a dónde iban.
-Te ves nervioso Regulus- Comentó Anne cuando este iba a seguir a Amy.
-Ruegue porque diga que sí-
El pelinegro alcanzó a su novia que ya lo esperaba en la entrada.
-¿A dónde iremos y porque me puse mi ropa de invierno?- Preguntó Amy.
-Al bosque y porque yo te lo pedí-
-Según yo me veo más sexy con traje de baño, pero si insistes-
Regulus sonrió ante esto y siguieron caminando.
-¿Qué es eso? - Preguntó Amy.
Al borde del bosque cerca de la casa Di Lessio estaba una mochila lista, llena de cosas.
-Nos vamos a escapar- Explicó Reg.
Amy lo vio con los ojos y la boca abierta, luego a la mochila y de nuevo a Reg.
-¿Estás bromeando?-
-Nop, nos iremos a muchos lugares-
-Reg, mis padres me mataran-
-No lo creo, ya solucioné eso con mi amiga la rubia-
-¿Qué va a hacer Alessandra contra la ira de mis padres?-
-Retenerlos-
Reg tomó la mochila se la colocó en la espalda.
-¿Quieres huir o no?- Preguntó Reg ofreciendo su mano.
-¿Contigo? Hasta la luna-
Amy tomó la mano de su novio se adentraron en el bosque rápidamente.
Caminaron por unos minutos hasta que en medio de un claro encontraron la motocicleta voladora que Sirius se había comprado hace dos años.
-Ni loca me subo en eso- Dijo de inmediato la rubia.
-Tranquila mi vida, ya sé manejarla, hasta tuve que llevar a Lily a casa la semana pasada-
-¿La Lily Evans que nosotros conocemos?-
-Mjm- Respondió Reg guardando la mochila en el compartimiento de la moto.
-¿Hablas de la misma Lily Evans que se hizo la enferma para no tener que ir a clases de vuelo?-
-Sí mi amor, ella sabe que manejo mejor que el idiota de Sirius-
Amy asintió no muy convencida, tomó el casco que Regulus le ofreció y se lo puso.
-¿A dónde iremos?- Preguntó segundos antes de despegar.
-¡Rusia!- Respondió Reg antes de comenzar el vuelo.
-¡¿QUÉ?!-
Ya era tarde, la motocicleta estaba subiendo cada vez más y más alto hasta que estuvieron por encima de las nubes.
-¡¿Estas loco?! ¡Ir a Rusia nos tomará todo el día!-
-¡Sí, estoy loco, pero por ti! ¡Y nos tomará dos horas a máxima potencia!-
-¡¿Máxima qué?!-
Regulus aceleró rápidamente y Amy se aferró más a él.
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Al poco rato parecía que Amy había olvidado sus preocupaciones o que se le habían caído porque ahora solo cantaba junto a Reg canciones de un artista muggle que escuchaban.
Eran casi las 3 de la tarde cuando llegaron al fin a un bosque en Rusia. Reg aterrizó y bajó de la moto para luego ayudar a su novia.
-¿Qué hacemos aquí?- Preguntó Amy.
-Ya verás-
Reg le hizo una seña a Amelia para que viera detrás de ella.
La chica se volteó y encontró el paisaje más hermoso que había visto.
Un enorme y congelado lago estaba frente a ellos, iluminado por el sol de medio día justo al lado del claro donde estacionaron.
-En Londres es verano, sí, pero aquí siempre es invierno y tú...- Comenzó Reg.
-Yo amo el invierno- Terminó Amy por el.
La rubia se volteó y saltó sobre Regulus abrazándolo para luego besarlo.
-Me trajiste a mi paraíso personal- Le dijo.
-Así es-
Amy sonrió aún más cuando Regulus le mostró dos pares de patines para el hielo.
-¡SIII!- Festejó feliz antes de tomar lo patines.
-Adelántate mientras pongo el campamento-
-Esta bien, te amo-
Regulus sonrió al ver a su novia alejarse por el lago patinando haciendo volteretas como si nada.
-Que bueno que te guste porque me tomó dos semanas aprender el hechizo para alisar el hielo y hacerte una pista- Murmuró feliz.
El chico Black desempacó todo con la varita en cuestión de segundos y en dos minutos tenía un enorme campamento armado.
Tomó una esfera de cristal con un brillo azul que le había hecho Alessandra, esto serviría como hechizos de protección.
Nadie los vería, nadie los escucharía, nadie los encontraría y nadie los dañaría.
-¡Buh!- Le dijo a Amy cuando la alcanzó en el lago.
-¡Amor! ¡Me asustas!-
Reg sonrió y le ofreció a Amy su mano para patinar juntos.
-¿No es tan difícil al final cierto?- Preguntó la Di Lessio divertida.
-¡No te burles!-
Amy hacía tres años le había enseñado a Regulus a patinar porque el no sabía y después de cinco días cayendo de cara al hielo logró al fin... Sostenerse.
Pero ahora parecía todo un profesional pues se movía con mucha gracia.
-Creo que esos movimientos son gracias a las clases de ballet- Se burló Amy.
-¡Solo fui a clases de ballet por tres años!-
Amy no dejaba de reírse de él por lo cuál Reg, al verla cerca de la orilla, cargó contra ella y la tumbó en la nieve, pero el terminó cayendo con ella.
Ambos reían ruidosamente.
-Te amo- Soltó Reg de pronto.
-Y yo a ti Reggi-
-¿Quieres ir a comer?-
-Por favor-
Ambos se levantaron y fueron hasta el lugar del campamento, se quitaron los patines por obvias razones y de inmediato Reg cubrió los ojos de Amy con sus manos.
-¿Y ahora qué?-Preguntó ella.
-Otra sorpresa-Murmuró el chico que estaba cada vez más nervioso.
La guió detrás de la carpa donde había instalado una pequeña área de picnic invernal, como le gustaba llamarlo a Amy cuando lo hacían en Hogwarts.
-¡Picnic invernal!- Celebró ella al verlo- No puedo creer que me hicieras un picnic invernal- Le dijo al voltearse a ver a Regulus-Te besaría, pero la verdad tengo hambre-
-Yo también- Mintió Reg.
Ambos se sentaron a comer, o mejor dicho Amy comía y Reg sentía sus nervios tan altos que iba a vómitar.
Suspiró al final cuando Amy terminó de comer.
-Ven conmigo princesa- Pidió.
-¿A dónde?-
-Solo sígueme- Insistió el Black.
Reg ayudó a Amy a levantarse y sin soltar su mano la guió al borde del lago congelado donde podía apreciar el paisaje.
-Te amo- Repitió de nuevo.
-Y yo a ti y no es por ofender, pero lo haz dicho más veces hoy que en los dos años de noviazgo, corazón-
-Lo sé, solo que me gusta recordártelo-
Amy frunció el ceño, aquello no era típico de Regulus Black, solía ser cariñoso en privado y frío con los demás, pero nunca le había recordado tantas veces en un día su sentir.
-¿Alguna vez te conté la historia de cómo me enamoré de ti y luego fingí estar enamorado de tu hermana por dos años para que tu no supieras que te amaba?-
-No realmente, pero se escucha como un buen libro-
Reg sonrió y asintió, tomó asiento en la nieve y le hizo una señal a la chica para que se sentará en su regazo.
-Cuando tenía 11 años he iba en el tren camino a Hogwarts por primera vez, solo quería correr al compartimiento de Sirius y rogarle que me recibiera, estaba tan asustado- Comenzó el Black.
>>Pero entonces una hermosa niña, con cara de berrinche, cabe aclarar, entró en mi compartimiento, dejó sus cosas y ni siquiera me pidió permiso antes de sentarse<<
>>Ella solo dijo "Hola" y yo me quedé pasmado ¿Qué clase de modales son esos?
Pero cuando quise verla a los ojos y decirle que te fueras yo... Yo vi esos hermosos ojos azul cielo y me dije a mi mismo que sería parte de mi futuro sin importar lo que me costará<<
>>Así que en lugar de echar a esa niña yo logré decir mi nombre entre tartamudeos que me provocaba y ella me respondió con el suyo, nunca me había importado tan poco un apellido como ese día.
Me dije en mi cabeza que ser un traidor no era tan malo, si era un traidor por amarte a ti<<
Amy sonrió con sus mejillas sonrojadas, a penas y había logrado hablar aquel día, ella también quedó encantada.
-Luego quedaste conmigo en Slytherin y fui el niño más feliz del mundo, te convertiste no solo en mi amiga, sino también en mi mejor amiga, lo más importante de mi vida ahora eras tú y fue en segundo año que me di cuenta que te amaba más que a nada o nadie en este mundo-
>>Ese día comenzaron mis temores de perderte y cuando descubriste esa carta firmada para A. Di Lessio no tuve más remedio que mentir diciendo que era para tu hermana porque prefería ser solo tú amigo a dejar de serlo <<
>>Comencé a temer que Alessandra leyera mi mente y te dijera la verdad y por eso cada vez que se acercaba yo huía y tu pensabas que era porque estaba enamorado de ella, pero jamás te diste cuenta que...
Mis ojos, mi corazón y mi mente siempre fueron tuyos <<
>>Al final le tuve que decir la verdad a Alessandra cuando estábamos en la fiesta de Slughorn porque ella tarde o temprano lo iba a saber y sorprendentemente ella estaba en un predicamento igual al mío así que me ayudó <<
>>Pude al fin aceptar todo lo que sentía por ti, pero... Tú y Remus... Bien sí, lo admito quería matarlo.. <<
Amy comenzó a reír recordando aquella noche tan loca, si que había bebido.
-Pero luego ese día lo pude decir, la valentía me llegó y al fin lo confesé y tú me dijiste que todos estos años mis sentimientos siempre fueron correspondidos y me besaste... Justo en ese beso supe que no quería probar otros labios hasta el fin de mis días-
>>A medida que nuestra relación avanzaba más me enamoraba de ti y nunca creí que eso fuera posible, pero ahora veo que el dicho de Slytherin es cierto
"Toda serpiente tiene una debilidad" y tú siempre vas a ser la mía, Amelia, pero también eres mi mayor fortaleza.<<
Reg suspiró, sus manos sudaban, sus labios estaban secos y lo único en lo que podía pensar es en la chica que tenía enfrente.
Se levantó y ayudó a Amelia a que lo hiciera, se sentía cada vez más nervioso.
-Hoy te quiero decir no solo lo mucho que te amo Amy, sino lo que significas para mí y es que para mí lo eres todo. Eres mi sol, mi luna, mis estrellas, mi planeta y sobre todas las cosas eres la razón por la cual vivo-
>>Te convertiste en lo único en lo que pienso cada vez que un nuevo ataque de oscuridad llegaba, cuando estaba a punto de ser consumido por esa negrura una enorme luz aprecia y en ella siempre te vi a ti, tú me salvaste Amelia...<<
>>Y hoy quiero darte el mayor símbolo de amor que puedo ofrecerte.
Quiero pedirte tantas cosas en este momento, quiero rogarte que seas tú la persona con la cual despierte cada mañana, que seas tú la madre de mis hijos, la única en la que puedo confiar, quiero pedirte que formes parte de mi vida para siempre.
Amelia Violett Di Lessio ¿Te casarías conmigo? <<
Amy veía a Reg sin poder creer lo que decía, verlo arrodillado frente a ella con la sonrisa más grande que hubiera visto en él y con los ojos brillando le hizo darse cuenta de algo..
Jamás en su vida amaría a otra persona que no fuera Regulus Black.
-¡SII! ¡Claro que sí!-
Regulus le puso el precioso anillo en su dedo anular al tiempo que se levantaba para ser recibido por un beso de su ahora prometida.
-Siempre quise decir esto, ahora serás Amelia Black- Le dijo feliz el pelinegro.
-Amelia Black- Di Lessio-Corrigió la rubia.
-Ya quiero contarle esta historia a nuestros hijos- Siguió Reg.
-No tan rápido velocista ¿Dijiste hijos o S?-
-Claro, tres niños y cinco niñas-
-En tus sueños-
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Londres, El fuerte Di Lessio.
-¡YA PASARON DOCE HORAS!- Gritó Federico.
-Ya vendrán- Calmó Anne.
-¡¿Y SI LE PASÓ ALGO A MI NIÑA?!- Siguió Enzo asustado.
-No le pasó nada- Aseguró Alessa divertida.
Todos la vieron, ahí se dio cuenta de que metió la pata...
-¿Qué sabes tú Alessandra?-Preguntó Bianca.
-¿Qué te importa?- Le respondió la rubia y chocó los cinco con Lily y Marlene, quienes ahora no se llevaban con Bianca.
Hace cosa de tres semanas Lily, por accidente, empujó a Bianca cuando corría al comedor de la casa Di Lessio, ella aseguró que casi se cae y eso dañaría a su bebé.
Pero Lily se rió y dijo que no era cierto a lo cual Bianca la llamo "Una sangre sucia mentirosa" y de inmediato tuvo como enemigos a sus cuñadas, suegros, los señores Potter, los tres hermanos Potter, los hermanos Mckkinon y Remus Lupin, quienes saltaron en defensa de Lily.
-Alessa- Regañó Fede a su hermana.
-¿Qué no es reunión familiar?-Preguntó Bianca viendo a Marlene, Lily y los demás.
-Exacto ¿Entonces que haces aquí?- Respondió Alessa.
-Aquí todos somos familia- Recordó Euphemia.
-Bianca es el perro recogido- Se burló Alessandra.
La mayoría en la sala se comenzaron a reír, pero los más nerviosos se mantuvieron firmes con sus muecas de enojo.
-Alessandra, responde la pregunta de Bianca- Pidió Fede- ¿Sabes algo o no?-
-Sé muchas cosas hermano menor-
-¡¿Sabes o no dónde mierda esta mi hermanita?!- Preguntó enojado Fede.
Sirius y James se levantaron enojados y vieron a Federico.
-Háblale con respeto- Le dijo James tratando de contener su enojo.
-O nosotros nos vamos a encargar de que lo hagas- Terminó Sirius.
-¡Chicos!- Llamó Anne- No vamos a pelear entre familia por la metiche, digo Bianca-
Alessa, Marlene, Lily y Alice se reían fuertemente de lo dicho por la señora Di Lessio.
-¡Anne!- Regañó Euphemia - No les sigas el juego, la pelea es cosa de ellas y ahora mismo estamos preocupadas por los niños- Recordó.
-Bueno niños no son, ya tienen 17- Recordó James.
-¡Es mi bebé la que está pérdida!- Interrumpió Enzo perdiendo la paciencia- ¡Alessandra Clarissa Di Lessio! Dime ahora mismo lo que sabes-
Alessa suspiró, le tenía demasiado respeto y cariño a su padre como para burlarse.
-Escaparon- Confesó.
Anne y Euphemia bajaron las cabezas fingiendo sorpresa, cuando ellas ayudaron en todo.
Enzo sintió que su corazón se salía del pecho.
-¡LO MATARÉ!- Gritó Fede.
-Técnicamente no fue un escape- Interrumpió Sirius.
-¿De qué hablas?- Preguntó Enzo sintiendo su alma en el cuerpo de nuevo.
Alessa se levantó y se dijo a sí misma que no dejaría que Reg se aprovechará del cariño y debilidad que ella tenía hacía él como si fuera su hermanito de nuevo.
-Yo le di permiso a Regulus de escaparse con Amy- Explicó.
-Y yo le di permiso a Regulus- Explicó Euphemia.
-Y yo a Amy- Terminó Anne.
-¡¿QUÉ HICIERON QUÉ?! ¡ESTO ES UN ESCÁNDALO!- Comenzó Fede.
Alessa lo vio con enojo, se acercó a él con una mirada de furia y por primera vez se vio el quiebre entre los mellizos Di Lessio.
-¡AY TU CÁLLATE CHICO NO ME ACUERDO LO QUE ES UN CONDÓN!- Le gritó- ¡Estamos en esta situación- Alessa señaló a Bianca- Por tú maldita culpa! ¡No te atrevas a juzgar a mi hermana!-
Fede la vio con la boca abierta, nunca había discutido tanto con Alessandra como en los últimos días, pero de igual forma ella tenía razón, el causó el mayor escándalo y ahora se enojaba con Amy.
El rubio se sentó al lado de Bianca he hizo una señal de paz a su melliza que simplemente lo ignoró.
-¿Cómo es que aceptaste esto?- Preguntó Enzo.
El estaba ahora calmado, su hija jamás expondría a Amelia a un peligro y si ella y su esposa habían ayudado probablemente estarían asalvo.
-El me lo pidió, es algo especial para ellos- Explicó.
-Bien, pero quiero que me digas donde están- Pidió Enzo.
-Creo que todos deberiamos saber donde están- Habló Bianca.
Alessandra la vio con enojo al igual que Anne, Euphemia, Lily y Marlene.
-Ay no te metas, como dijiste es una reunión de familia ¡Largo!- Le exigió la Di Lessio.
-¡Soy la esposa de tu hermano!- Recordó Bianca.
-¡Y YO SOY LADY DI LESSIO Y ESTAS EN MI CASA!- Gritó Alessandra.
James corrió al lado de su mejor amiga, pero no la detuvo.
-¡Yo mando aquí! Que no se te olvide, y a mi NADIE me da órdenes- Terminó Alessandra.
Bianca se levantó enojada y vio a Fede, el bajó la cabeza.
-Vámonos- Pidió el rubio levantándose.
-Yo dije que se fuera ella, no tú- Le dijo Alessandra.
-Sí se va mi esposa, me voy yo- Respondió Fede.
Fede y Bianca salieron de la casa rápidamente con la última con una sonrisa de victoria en el rostro.
-¿Crees que me pasé?- Preguntó Alessa a James.
-No, ella se lo merece- Respondió antes Enzo- Pero no olvides que lleva a un Di Lessio en su vientre hija, ahora es una de nosotros-
-Ella nunca será parte de mi familia y mientras yo sea Lady Di Lessio no la quiero en más reuniones-
Alessa salió de la sala directamente a su habitación seguida por James que ni siquiera intentó calmarla.
-Esto es incómodo- Soltó Alaric entrando en la casa- Acabo de recibir la carta ¿Porqué no estamos festejando la valentía de Regulus?-
Todos lo vieron con mala cara.
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Futuro:
1995, casa Black.
Los primos Black estaban aprendiendo a cocinar recetas que fueron de Alessandra Black con Amelia, pero ahora solo esperaban a que la lasaña estuviera lista así que aprovecharon para hablar.
-Que lindo anillo tía Amy, nunca lo había notado- Le dijo Chloe a su tía.
-Gracias y nunca lo viste porque lo utilizaba en mi cuello- Explicó la castaña.
-¿Es de compromiso?- Preguntó Antares.
Amy vio su anillo con nostalgia y sonrió mientras sus sobrinos e hija la veían.
-Así es- Admitió luego de un rato.
-¿Puedo hacerte una pregunta?- Preguntó Franco.
-Ya la hiciste, pero puedes hacer otra- Contestó Amy saliendo de sus recuerdos.
-¿Cuál fue la mayor locura que hiciste por amor?-
Amy sonrió, volvió a ver su anillo de nuevo y vio que frente a ella, en medio de la cocina, estaba un cuadro pintando a mano por ella en el que salía Regulus Black.
-Escapé con mi novio por tres días, sin decirle a mis padres y con la bendición de Alessa- Confesó.
Los gemelos Black comenzaron a reír y aplaudir a modo de demostrar su admiración, mientras Antares la veía curiosa.
-¿Mi papá supo de ese novio?- Preguntó la rubia.
Amy comenzó a reír, vio de nuevo el cuadro y suspiró.
-Él era el novio- Contestó sonriendo.
Antares abrió mucho la boca en sorpresa, su propio padre haciendo tal cosa...
-Eso, así se hace tío Reg- Le dijo Franco al cuadro.
-Y en el primer día me pidió matrimonio, al segundo día fuimos a las playas de España, al tercer día fuimos a Italia porque el quería conocer mi cultura y luego regresamos - Contó Amy.
>>Papá estaba tranquilo, Alessandra le había explicado todo, pero Fede... Él estaba muy enojado, me gritó por una hora mientras yo me reía<<
Mientras Amy decía eso Chloe sacaba la lasaña del horno y la colocaba en la mesa con mucho orgullo, Antares sacó su propia lasaña del otro horno y puso en la mesita de café mientras Franco hacía lo mismo con la suya, pero la ponía en la mesa, como su hermana.
-Recuerdo eso- Dijo Sirius entrando.
El mayor de los Black caminó hasta su hija y la abrazó.
-Huele bien- Alagó.
-Hice lasaña ¿Quieres probar?- Ofreció Chloe.
Sirius asintió y su hija llevó a su boca un bocado de la lasaña que preparó.
Sirius sintió como a su memoria venían miles de recuerdos de él comiendo esta misma lasaña con James, luego con en su casa con su esposa y ahora en su casa con su hija.
-Utilizamos la receta de la tía Alessa- Explicó Antares.
-¿Te gusta?- Preguntó Chloe ilusionada.
-Me encanta, te quedó igual que a tú madre-
Amy sonrió, se acercó a Sirius y lo abrazó. Él le correspondió sonriendo.
-¿Ya les contaste que después de ese paseo nació Antares?- Bromeó Sirius.
-¡¿QUÉ?! ¡¿Fui un error?!- Preguntó la chica con un chillido.
-¡Lo sabía!- Saltaron los gemelos Black.
-¡Sirius no seas mentiroso!- Regañó Amy.
Nota:
No estoy llorando, tú estás llorando.
¿Les gustó esto de meter escenas del futuro?
¿Qué les pareció?
¿Tienen teorías?
¿Creen que Alessandra hizo bien al hablarle así a Bianca? 🤔
Los amo. ❤️