C a p i t u l o 18 "Planes de boda"
Maratón 2/3
El regreso al trabajo fue más complicado de lo que esperaba. Los proyectos que habíamos pausado por las vacaciones han sido retomados nuevamente y es ahora o nunca que debemos concluirlos; a pesar de que enero suele ser de los meses más tranquilos dentro de la empresa, este sería la excepción pues había una boda que planear.
De regreso a mi oficina, repaso la conversación que he tenido con Lauren hace unos minutos. La dueña de la empresa se encuentra completamente entusiasmada por la idea de que desde el primer mes del año ya tengamos algo agendado en nuestro calendario y aún más, el hecho de que se trate de la boda de Harry la emociona más.
En muchas ocasiones ha llegado a encontrarse con el que es mi mejor amigo, por lo que el chico ya es bien conocido por todos los de la compañía.
Miro el reloj durante los próximos minutos esperando a que den las 12:00 del mediodía. Aun no decido si me encuentro nerviosa por el hecho de que planearé su boda o es el entusiasmo de verlo aunque sea unas cuantas horas.
Unos toques en mi puerta me anuncian que la pareja ha llegado, de modo que con un suspiro me pongo de pie y me encamino rumbo a ésta tratando de mantener la mejor de las sonrisas.
— Buenas tardes — trato de mostrarme lo más profesional pero el abrazo entusiasta que me regala Paige lo hace imposible
— ¡Isabella, por fin! — habla demasiado fuerte y demasiado alegre, incluso, con demasiada confianza después de lo sucedido — ¡No tienes una idea de cuánto llevamos esperando este día! ¿no es así, Harry? — se gira para ver a su prometido que se encuentra detrás de ella
— Claro — se limita a responder de manera distraída — Hola, linda ¿cómo estás? — se dirige a mí y deposita un suave beso en mi mejilla
— Con demasiado trabajo — suspiro — Por favor, tomen asiento — los tres nos dirigimos hacia mi escritorio y cada uno toma asiento en su lugar correspondiente — ¿Quieren algo de beber? Será una reunión un poco larga así que lo mejor sería tomar algo
— Me gustaría una taza de té, si no hay problema. ¿Tú quieres algo amor?
— No, pero gracias, Isa — Harry se remueve en su asiento — Disculpa — se aclara la garganta — ¿Aproximadamente cuanto llevará la reunión? Necesito avisar en el trabajo que puede que me demore un poco
— No sabría decir exactamente, pero puede que dos horas
— De acuerdo, avisaré a Niall — responde y cuando toma su celular aprovecho para salir un momento y preparar la bebida de Paige
Unos minutos después, vuelvo a entrar y noto como la pareja discute algo en voz baja, sin embargo, cuando perciben mi presencia guardan silencio.
— Muchas gracias, Isa — la chica rubia me regala una sonrisa tensa cuando tiene la taza entre sus manos
— Si les parece, podemos comenzar de una vez — regreso a mi lugar y me ocupo en sacar mi agenda — En algún momento comentaron que les gustaría que la boda se celebrara en otoño. ¿Tienen una fecha fija?
— Nos gustaría que fuera el 30 de octubre, la fecha da en sábado por lo que es el mejor día — habla Paige
— Bien y ¿tienen pensado el lugar? o ¿al menos una idea de dónde les gustaría celebrar tanto la ceremonia, como la fiesta? — me centro en tomar nota de todo lo que me pueda servir
— Al aire libre — habla Harry
— ¡No! — se queja Paige y hace un puchero — Harry, ya habíamos hablado de eso, otoño es una época donde hay mucho aire y puede arruinar mi peinado o incluso el vestido...
— Podemos usar carpas como protección, por eso no hay problema — interrumpo a la chica
— ¿Lo ves linda? — habla Harry y toma la mano de Paige — Además, de la manera que sea, seguirás luciendo hermosa
— ¡Oh! Bueno, viéndolo así, me parece bien — la chica ríe un poco tímida
— ¿Alguna idea de que estilo de boda quieren?
— La verdad es que no — dice pensativa Paige
— Si me permiten, basándome en como son ustedes, en sus gustos y lo que transmiten como pareja, me atrevería a decir que podría ir bien algo vintage
— No me desagrada la idea — sonríe la rubia — ¿Tú qué opinas cariño? — pide la opinión de su prometido
— Realmente no tengo problema, la temática que sea me parece bien — hace una pausa manteniendo una sonrisa en su rostro — Incluso si fuera con algo de payasos, seguiría siendo el más feliz de saber que por fin eres mi esposa, no necesito más — mira con amor a la mujer a su lado
— ¡Oh Harry! — le responde enternecida y sin importar que yo me encuentre ahí, se funden en un beso
Ya es bastante insoportable tener el entusiasmo de Paige dentro de mi oficina como para soportar ahora esto.
— No quisiera interrumpirlos pero de verdad quiero dejar lo más claro en esta cita. Además, tengo una más después de ustedes — los interrumpo hablando con rapidez pero tratando de mantener la sonrisa rígida que me ha acompañado desde que ellos han llegado
— Cierto, lo siento — Harry se disculpa con un leve sonrojo en su rostro — Vintage está bien, me parece buena idea
— ¿Hay un aproximado de cuántos invitados asistirán a la boda?
— Tomando en cuenta la extensión de la familia de Paige y la mía, al igual que nuestros amigos, hemos coincidido con que cien es el mejor número
— Muy bien — murmuro por lo bajo escribiendo su respuesta — Voy a necesitar que para la siguiente cita me traigan una lista de cuantos adultos y cuantos niños serán. ¿Piensan contemplar a alguien que anime la fiesta con música?
— ¡Sí! Queremos algún pequeño grupo que pueda ambientar la fiesta — Paige hace una pausa — Isabella, como sabes, mi familia viene desde Francia ¿crees que puedas encargarte también de su hospedaje?
— Por supuesto y ahora que lo mencionas, también agradecería que en la misma lista de invitados me indiques a cuántos hay que contemplarles un asilo
La cita transcurre con tranquilidad y seguimos conversando acerca de algunos detalles como el presupuesto que hay para el evento.
Debo admitir que me entristece escuchar que gran parte de los ahorros de Harry se irán en esta boda. Sé de primera mano que lleva años juntando dinero para un viaje a Japón, sin embargo, parece que eso tendrá que esperar.
Paige me avisa que ella se hará cargo del pastel cuando tocamos el tema de la comida que les gustaría servir ese día.
Me encargo de aclararles de que por el momento es lo único que necesito saber, pues primero debemos concentrarnos en los detalles generales para después ocuparnos de pequeñeces como las flores, la iluminación, el servicio, la decoración, cubiertos, los sitios en las mesas, etc.
El resto de los minutos los dedicamos en encontrarnos con la entusiasta Lauren que reparte besos por todo el rostro de los prometidos y los llena de felicitaciones. Se les lee el contrato, se aclaran dudas y cuando veo la firma de ambos sobre el papel, sé que no hay marcha atrás.
— Isabella, de verdad te estamos muy agradecidos porque hagas esto por nosotros
— No es nada, Paige — los acompaño a la salida del edificio — Prometo que tendrán la mejor boda, no los defraudaremos — hablo para ambos
— Sabemos que no sería así Isabella, conocemos tu trabajo — Harry me regala una tierna sonrisa y extiende su mano para tomar la mía
— Y agradezco su confianza — le devuelvo la sonrisa — Entonces nos vemos aquí dentro de tres semanas. Por el momento me dedicaré a ir buscando los lugares, en cuanto encuentre algunos los llamaré y así podremos ir a revisarlos
— Nos parece muy bien, nos vemos Isa — Paige me vuelve a dar una abrazo y se lo acepto más forzosamente
— Hasta luego, linda. Pronto me daré una vuelta por tu departamento — dice Harry
— De acuerdo, ahí te veré — me apresuro a darme la media vuelta y subir una vez más a mi oficina
Tengo unas cuantas horas libres antes de que se presente mi siguiente cita, así que llamo a Gemma para saber si se encuentra en la ciudad, al tener su afirmación, decidimos encontrarnos para comer y acordamos vernos en un restaurant del centro.
Termino de ordenar un poco las ideas escritas que surgieron de la cita anterior y veinte minutos después, tomo las llaves de mi auto y salgo de la empresa para conducir en dirección a Gemma.
La suerte está de nuestro lado, pues ambas llegamos al mismo tiempo y después de los abrazos y saludos, entramos al establecimiento.
— Dime por favor que decidiste cancelar tus planes de encargarte de ese circo que será la boda de Harry — es lo primero que dice mi mejor amiga cuando nos situamos en una mesa
— Lamento informarte que no — río por lo bajo — Justo vengo de estar con ellos
— Al menos confírmame que estropearás la fiesta
— No Gemma, no lo haré — la regaño divertida — Prometí darles la mejor celebración de su vida y así será
— ¿No te sientes mal haciendo todo esto, Isa? — pregunta ahora poniéndose seria
— Duele, no te voy a mentir, pero no está en mis manos hacer algo
— En realidad si te lo propones...
— No — la interrumpo — Además estoy con Sam, no tengo tiempo para pensar en algo más como el compromiso de Harry
— ¡Es verdad! ¡Te odio! — alza la voz y me arroja una servilleta — ¿Por qué no conozco aún a tu guapo novio?
— Porque no se ha dado la oportunidad, Gemma — río — Pero te prometo que en cuanto pueda lo llevaré a tu casa
— Tenemos que organizar una cena, Michael y yo estaremos felices de tenerlos en casa
— Lo hablaré con Sam, estoy segura de que aceptará
— ¿Qué tan conveniente es que invite a Harry? — dice pensativa unos minutos después — Solo para que le restriegues en la cara como besas a Sam
— No creo que me haga caso, estaría demasiado entretenido con Paige...
— ¿Quién ha dicho que invitaría a Paige? — me interrumpe con una sonrisa maliciosa
— De verdad te cae mal la chica
— Contigo no puedo fingir, me estresa. Además, tu viste como se puso en casa de mi madre — rueda los ojos — No puedo creer que después de eso le hayas perdonado toda la mierda que dijo
— Lo sé — suspiro — Es solo que no quiero causar más inconvenientes con Harry, tú sabes que en este último tiempo las cosas han estado un poco sensibles entre nosotros — murmuro
— ¿Ya no ha cometido alguna estupidez mi hermano?
— Afortunadamente no — exclamo aliviada — Aun así Gemma, deberías darle una oportunidad a Paige, al final del día es tu cuñada y en menos de un año formalmente será parte de tu familia. ¿Por qué no haces con ella y Harry lo que quieres conmigo y Sam?
— ¿Cenar con ellos?
— Exacto. La mayoría de las veces que has convivido con ella ha sido con más gente a su alrededor, no sé, tal vez necesitan un poco de privacidad
— No puedo creer que estés proponiéndome esto — suspira y habla unos minutos después — Pero supongo que tienes razón, para la suerte de mi hermano, Paige estará con él para toda la vida, lo que quiere decir que tendré que lidiar con su presencia
— Buena chica — la felicito
— Vete a la mierda — me gruñe y no puedo evitar soltar una enorme carcajada. Observo como toma su teléfono y teclea un poco antes de dejar el objeto sobre la mesa con pesadez — Lo he hecho ¿feliz?
— ¿Le enviaste un mensaje a Harry?
— Sí, le pregunte cuando podían ir a la casa... — su celular vibra y la toma — Dice que hoy mismo estaría perfecto
— Muy bien, seguro tu hermano te adorara por hacer esto
— Recuerda que lo haces por él, Gemma, recuerda que es sólo por él — dice para sí misma
— No te arrepentirás Gemma, si todos adoran a Paige es por algo — doy un trago a mi bebida — Ya sabes lo que dicen, si no puedes contra ellos...
— Úneteles — termina la oración por mí
***
"Te odio ¿me leíste? Esto está yendo de la mierda. En cinco minutos te marcaré por teléfono y más te vale responder, Isabella. Gemma"
Miro extrañada el mensaje y suspiro rogando para que Gemma no haya estrellado un vaso en la cabeza rubia de su cuñada.
Termino de cepillar mi cabello húmedo y espero pacientemente por la llamada de mi mejor amiga y cuando mi celular suena, me apresuro a responder antes de que me insulte por teléfono.
— ¿Sí? — pregunto cautelosa
— Muy bien, se nos han acabado los temas de conversación y llevamos más de veinte minutos sumidos en un silencio de lo más incómodo — se queja — Ya le pregunté por su pastelería...
— Repostería — la corrijo
— ¿Qué?
— Es que en realidad ella no solo hace pasteles, también hace donas, cupcakes, waffles...
— ¡Isabella! — se queja — Ese no es el punto
— Lo siento — intento ocultar mi risa — A ver, pensemos. ¿Has preguntado por su familia? Francia es un buen tema de conversación, o que tal hablar sobre si ya planearon su luna de miel
— Me quedó con el tema de Francia — afirma — Te dejo, tengo que seguir soportando esto. Mantente atenta de tu celular por cualquier cosa
— Así lo haré
Sin embargo, durante las siguientes dos horas no vuelvo a tener señales de Gemma, así que con el peso del sueño sobre mis hombros, me voy a la cama para dormir.
.....
Muy tarde, pero aquí está otra parte del maratón. Lamento la hora pero me surgieron unos inconvenientes.
Espero este capítulo les guste :)
Te agradecería si me ayudas con tu voto y tú comentario
TPWK