POV :•Lia •42.
Trato de que su desnudez no me distraiga de lo que tengo en manos y de que él este paralizado sin hacer nada y mucho menos atreverse a acercarse .
— Dominick ...
— Yo ... yo puedo explicarlo .— musita llegando hacia mi que sin pretenderlo me alejo de él .
— Pues te escucho entonces ¿Por qué tienes todo esto? Pensé que entre nosotros no había secretos .— me sentía un poco hipócrita al decirlo porque yo justamente le estaba escondiendo lo de su hermana pero eso era muy diferente .
— Y no los hay , te lo juro pequeña, te iba hablar de esa parte de mi vida solo que no encontré el momento adecuado .— se justifica y lo miro sin comprender aún porque decidió ocultarme algo como esto .
— Bueno parece que me adelanté a la situación ¿No?— pregunto irónica .— ¿Eres algún tipo de sadomasoquista o...te gusta infringir dolor?.
— No, y lo sé , debí decirte pero no quería arruinar nada entre nosotros, no ahora, yo te prometo que no las uso ya , no desde que te conozco .— se acerca otra vez y tomo la toalla para lanzársela, enserio me estaba distrayendo .
Se la coloca y suspiro mirando hacia arriba .
— ¿Me quieres contar? .— pregunto y lo veo asentir algo avergonzado . Nos sentamos en la cama y él toca su cabello mojado echándolo hacia atrás .
— Yo ... no soy un sadomasoquista, pero sí me gusta azotar , me hace sentir bien pero no a un nivel el cual entienda que mi pareja pueda sentir dolor, las fustas son justamente para aquello, también me gustan los juego previos pero nada más, solo hacia este tipo de cosas con las mujeres que estaban dispuestas hacerlo sin contrato ni nada de por medio solo placer y se retiraban cuando quisieran .
— ¿Con cuántas mujeres hiciste esto...?— pregunto cautelosa sabiendo que tal vez no me guste la respuesta .
— No sé perdí la cuenta pero todas eran porque querían, disfrutaban el sexo en toda su plenitud al igual que yo .— como lo temía no me gustaba su respuesta, pero también entendía que era su pasado y debía respetarlo aunque la curiosidad por saber más me mataba lentamente.
— ¿Desde cuándo haces estas cosas?.
— Desde muy temprana edad, yo conocí este lado mediante a una mujer ella me enseñó esto o bueno ... me inculcó esa parte , en un tiempo pensé que el sexo no era bueno sino requería aquello pero me equivoqué porque mi vida cambió y mi perspectiva también .
— Y deduzco que esa mujer fue Amelia .— contesto con amargura .
— Sí .— no me sorprendió el hecho de que ella estuviera implicada en esto .
— ¿Alguna vez pensaste en usarlas conmigo?.— cuestiono, tal vez estaba siendo curiosa pero tenía que saber .
— Sí... lo pensé , bueno de hecho lo fantaseé, lo soñé pero nunca lo recreé , me di cuenta que no te quería para eso , pero no te voy a mentir , odiaba que me desafiaras y pues era un castigo el cual quería darte , pero como ya te había dicho no tengo intenciones de usarlas más, no las necesito .
— ¿No te provoco nada para que hagas eso conmigo?.— ya me estaba pasando un poco pero no evitaba hacerme sentir mal que él dejara sus gustos a un lado por tener los míos.
— No es eso, si me provocas hacerlo pero no lo hago porque me importa lo que pienses de mi, y porque cuando estoy contigo me siento pleno en el sexo de todas formas, tanto así que no necesito de ello porque tú me lo das todo, desde la primera noche contigo lo había comprobado . — esta vez me siento un poco más calmada .— no quiero que pienses que te miento o que lo hago a tu espaldas porque no es así amor .
— Lo sé y no debo porque estar enojada contigo .— digo y me mira confuso, me siento a horcajadas sobre él y lo tumbo en la cama .— son tus gustos Dominick cada quien tiene el suyo y yo no puedo juzgarte, estoy enamorada de ti eso no cambia nada .
— Pensé que no me querrías tener cerca o que te horrorizarías, pero nunca termino de entender que contigo las cosas no se pueden prevenir, salen espontáneas .— asiento .— Voy a echar todo a la basura .
— No lo hagas, son tuyas, por mi no te molestes ... aunque debo confesar que esto siempre lo vi en las películas nunca pensé conocer una persona que le gustara .— sonríe .
— Te amo .
—Yo también y que no se te olvide que te acepto por quien eres no te dejaré por algo como esto .— me levanto de su cuerpo y lo dejo colocarse su pijama para recostarse a mi lado y hacer la cucharita .
Pasaron algunos minutos y lo siento moverse incómodo como si quisiera decirme algo, lo dejo en su batalla interna y una hora después se anima hablar.
— Lia...— me llama por fin y me giro para estar frente a él que me mira raro .— ¿No estabas dormida? .
— Realmente no, estaba esperando a que dijeras algo, no puedo dormir ... — digo y él asiente despacio como si estuviera meditando algo.
— ¿Crees que ya es tiempo para tener hijos? .— pregunta de improvisto .
— ¿Cómo? .— cuestiono sorprendida .
De un momento a otro logro ver ese brillo en sus ojos que últimamente le pasa cada vez que esta cerca de algún niño o incluso de Anna .
— Que sí ya es tiempo para que tengamos a una mini tú correteando en la casa .
— ¿Tú quieres tener hijos ya?.— no evito cuestionar lo mismo igual de sorprendida . Coloca su mano en la mía y la lleva a sus labios para besarla .
— Sí quiero, de hecho tengo esa loca idea de que me des una niña .— sonrío y acaricio su rostro, sin duda de papá se verá tierno y muy sexy .
— Amaría ser la madre de tus hijos pero creo que en este momento y con la situación de tu madre es mejor esperar.— se posiciona encima de mi y besa mi frente .
— Los tendremos cuando tú quieras pero más vale que quieras pronto porque quiero algunos cinco o seis .
— ¿¡Qué!?.— me horrorizo.— ¿No crees que son demasiados?.
— No, estaremos para todos, sé que podemos con ello. Pero el primero quiero que sea niña.— me llena de besos el rostro mientras niego sin más remedio.
— Para que sea niña debo estar arriba ...o al menos eso dicen .— ríe.
— ¿Y si vamos practicando desde ahora?.— cuestiona mordiendo su labio, asiento y aprovecho esta acción para subirme sobre él .
(...)
Me levanto con un amino muy diferente después de haber tenido una noche grandiosa, bajo a desayunar y veo que Alda ha preparado comida para un regimiento .
Me siento en la isla y ella viene con una taza de café , hoy tenia el día libre y me quedaría con Dominick , solo que parece que él ya había empezado su día y es que claro con todos lo deberes que tenía encima , no digo yo estar despierto .
— Aquí está tu desayuno mi niña .
— Gracias Alda .— toma mi mano y me sonríe mientras se sienta frente a mí .
— Yo soñé con el momento en el que mi Dominick fuera feliz al lado de alguien y ese alguien eres tú . Se ve esa luz en sus ojos cuando te ve , ese brillo cada vez que está contigo , no lo había visto con nadie .— sonrío y antes de que pueda decir algo ella prosigue.— me dijo que te dejara dicho que está resolviendo algunos asuntos y que cuando venga quiere verte lista, te llevará a un lugar .— me guiña un ojo .
Desayuno rápido y llamo un momento a mi tía para saber como esta, se había ido a Sicilia sin explicarme claramente el porqué pero lo respeté y no le pregunté nada más , cuando llegara ya sabría porque se había ido casi huyendo y de paso la razón de haberse quedado allá por más tiempo .
Mi móvil vuelve a vibrar y lo tomo viendo que es un mensaje de Emiliano tenía que darle una lección a ese traicionero , mentiroso que había ayudado a Dominick la vez aquella y que desde ese tiempo no había mostrado su rostro , quedamos en vernos porque tenía algo urgente que decirme .
Me aseo y cambio rápidamente justo cuando escucho que llega, bajo rápido de las escaleras y lo veo al final esperándome con una sonrisa , salimos de su casa y vamos a su auto , en el camino completo se mantiene en silencio sin decirme a donde vamos pero tomando mi mano que estaba en mi pierna , veo que nos detenemos en el orfanato y lo miro confusa , se supone que hoy no podemos buscar a Anna, recién ayer lo hicimos y no podíamos buscarla hoy también .
Bajamos del auto y él me lleva dentro, hasta la oficina de la madre Frella .
— Dominick ¿Qué hacemos?.— pregunto y este cruza otra puerta frente a nosotros .
— Ya veras ...
— No podemos llevárnosla hoy también, la madre nos matará .— susurro .
— Tú tranquila .— entramos a la oficina y veo a mi picola sentada a un lado con unos abogados y demás junto a la madre Frella .
— ¿Qué pasa aquí ?.
— Bueno , si ya estamos todos podemos empezar .— nadie responde a mi pregunta y un hombre saca un papel el cual Dominick firma .
— Creo que ya todo está listo .— menciona uno de ellos a lo que el otro hombre a su lado asiente .
— Me alegra por fin oír aquello .— alaba la madre Frella .
— El trato está cerrado, señor D' Angelo de ahora en adelante tiene el derecho de tener por tres días de cada semana a Anna, ni mas ni menos, pedimos que el trato sea hecho como se acordó y así mantener la paz .— me quedo boquiabierta y lo miro sorprendida .
Los hombres salen de la oficina y me lanzo hacia el para abrazarlo .
— ¡Por Dios! ¿Eso quiere decir que podremos llevárnosla tres días sin tener que dejarla aquí? .— asiente .
— Anna es muy importante para nuestras vidas y creo que por ahora estará bien hasta que podamos tener la custodia legal sobre ella .
— Así es, si fuera por mi ya tendrían a esa pequeña revoltosita pero por ahora considero que es lo correcto .— habla la madre Frella .— a partir del viernes podrán llevársela .
Dos lagrimas salen de mis ojos y abrazo a Dominick otra vez, no sabe lo feliz que me hace que haya hecho esto y que Anna este más tiempo con nosotros me inunda el corazón de felicidad extrema, una que me hace sentir la mujer más feliz del planeta .
Después de haberla consentido un poco y de haberle dicho que pasaríamos unos días maravillosos cuando tuviéramos nuestra media custodia sobre ella , Dominick me llevó a la cita con Emiliano el cual me esperaba en un café .
Al verlo sonreí y me senté frente a él .
— Para seguir enojada conmigo pareces estar muy feliz .— comenta .
— Es que me han dado una muy buena noticia hoy , pero aún así no me olvido de lo que hiciste .— lo acuso y este sonríe .
— Eres una buena amiga Lia y consideré importante que estuvieras bien con tu troglodita de las tabernas .— reímos .
— Dime ya ¿Para qué querrías verme?.— al hacer esta pregunta se echa hacia adelante y me mira .
— Tengo algo para ti .— frunzo el entrecejo , me extiende una tableta y me acerco para tomarla algo confusa . Después de leer de lo que se trataba negué .
— No puedo aceptar esto Emiliano ...
— Lo sé, pero quería mostrártelo .
— Sé de sobra que te irá de maravilla, eres excelente en lo que haces ...
— Gracias Lia, créeme , me hubiera gustado recibir una afirmativa pero tendré que irme a trabajar solito .— niego y me levanto para abrazarlo .
— Lo harás bien .— asiente .
Nos sumergimos en una conversación amena y luego de unas horas salí del café , me sorprendí al verlo esperarme allí así que me acerqué a él con una sonrisa .
— ¿Qué quería Emiliano?.— cuestiona .
— ¿Emiliano? ¿Ya no le dirás idota o cualquiera apelativo malo?.— niega .
— Resulta que ya no me desagrada tanto ...
— Ya vi .— el móvil de Dominick suena y este mira el nombre de Damiano reflejado en la pantalla a lo que frunce el entrecejo .— ¿Qué pasa?.
— Es Damiano ... está algo raro últimamente .— trago grueso y miro hacia otro lado .
— Damiano siempre ha sido raro ¿No?.— el ríe obligándome a mí a sacar una sonrisa forzosa .
— Tienes razón ... pero aún lo siento extraño , como si me ocultara algo ....
— Es mejor no hacer especulaciones , creo que si hubiera algo ya lo sabrías .— su mirada dudosa se posó en mí y me obligué a no quitarla .
— Esta bien, por ahora no me preocuparé más, ahora vamos a arreglarle su nueva habitación a Anna .— sonríe y me toma de la mano .