*Complejo de Los Vengadores*
Mientras el conflicto seguía en la torre, en el complejo se hayaba la mitad del equipo, Clint había regresado con su familia un tiempo al igual que Scott, y Sam había vuelto a realizar misiones por lo que estaba fuera de la ciudad. La mayoría estaba inactivo.
Los únicos presentes eran Wanda, Visión y Natasha. Esta última se encontraba algunas noches buscando pistas del paradero de Banner, tenía esperanza de saber en dónde había terminado.
Wanda y Visión se encontraban tranquilamente viendo Sitcoms en la TV, las favoritas de la chica, pasaban mucho tiempo juntos. Su relación iba cada día mejor ahora que estaban juntos.
De repente una alarma irrumpió la tranquilidad del lugar, los tres héroes rápidamente se dirigieron a ver que sucedía.
-Viernes ¿Que sucede?- dijo Nat quien llegó primero.
-Agente Romanoff, solicito el apoyo del equipo en la torre de inmediato. El señor Stark ha perdido el control de sus acciones y atacó al Capitán Rogers, la vida de ambos esta en riesgo, detener y destruir la armadura es imperativo.-
Seguido de esto Viernes mostró un vídeo de seguridad en vivo donde se veía como la armadura atacaba a Steve quien apenas podía defenderse. Estaba a punto de perder ante Tony.
-No puede ser...¡¿Porque lo hace?!- dijo Wanda aterrorizada.
-No tengo idea de porqué ocurrió pero estoy segura de que Tony no le haría todo eso a Steve...tenemos que ayudarlos.-
-Iré por el Quinjet...- dijo Vis.
-¿Cómo lo detendremos Nat? Es más poderoso que nunca.-
-Ya pensaremos en algo Wanda, no quisiera tener que lastimarlo más de lo que está, no demasiado al menos.-
-Salvemoslos entonces, antes de que sea tarde...-
*Torre de Los Vengadores*
Steve estaba acorralado, Tony era demasiado fuerte en comparación de él, además de la tremenda paliza que este le había propinado, se encontraba muy lejos de poder ganar. Sabia que tenía que arrancarle la armadura a Tony, pero no quería dañarlo, ya no más.
-Eres más resistente de lo que creía Rogers. Tendré que ser más duro.- dijo el malvado Iron Man tomando por el cuello a Steve.
-Golpeas como una niña...mi Tony lo hace mejor...- dijo Steve escupiendo el casco de Superior Iron Man provocandolo.
-No me das una pelea digna...y te atrevas a provocar mi ira aun más...eres un imbécil Rogers, como dije, pagarás por tus actos con tu vida...-
El hombre de hierro arrojó el mal herido cuerpo de Steve al borde de la cornisa...pensaba arrojarlo al vacío, acabar con el de una vez por todas.
Imponente se acercaba a un indefenso Steve para dar el último golpe, pero rápidamente fue interrumpido por los tres Vengadores quienes habían llegado.
-Ustedes...-
-De acuerdo Tony, no se que sucedió para que te pusieras asi pero debes parar con esto, ahora.- sentenció la Viuda Negra.
-Viernes dijo que destruir la armadura detendría al señor Stark. Debió ocurrir un error catastrófico en su sistema central, y es por eso que no tendría control de si.- replicó Visión.
Wanda se acercó a Steve para ayudarlo, quien apenas estaba consciente.
-Steve...tranquilo vas a estar bien, ya estamos aquí.-
-Wanda...le falle...volví a lastimarlo...- decía el soldado con apenas aliento.
-No te esfuerces Steve, resiste un poco más. Nos encargaremos de esto.-
-Es el traje...deben destruirlo...así liberaran a Tony...deben quitárselo...tu puedes hacerlo Wanda, tienes el poder...-
-Lo hare, solo resiste, te lo pido Steve...-
-No lo dañes...el es inocente...no lo...dañes...- suplicó Steve antes de caer inconsciente.
-Pero claro, son sus miedos, tiene razón, es la traje, debemos quitárselo y liberar la mente de Tony.-
-Bien...Vengadores ya saben que hacer...- dijo Nat.
-¿Quitarme el traje? Los invito a que lo intenten.- expresó burlesco el malvado Iron Man.
Los tres héroes se enfrascarón en la batalla contra Superior Iron Man, su fuerza era formidable, podía con los tres sin problema.
Natasha usaba todo su arsenal y habilidades, pero poco daño hacían a la armadura. Visión trataba de desprender el traje del cuerpo del genio con sus poderes, mientras Wanda intentaba controlar el traje y sin dañar a Tony.
Ningún intento rendía frutos.
Golpes, rayos y explosiones de energía azotaban el lugar. El trío trataba de no dañar la integridad de Tony al pelear con la armadura, cosa que los mantenía en desventaja al contenerse.
-Intentan no dañarme, jamás ganarán conteniendose, por suerte para mi, yo no tendre piedad.
-Tiene razón...es un sin sentido. Debemos incapacitarlo de algún modo no letal.- dijo Visión.
-Cuando tenga el 100% de la conciencia de Tony Stark, estaré completo y cuanto acabe con la vida del Capitán América, seguiré con cualquiera que se interponga en mi camino a la superioridad.-
-Cuando recuperemos a Tony, recuerdenme golpearlo por crear super robots asesinos.- replicó Nat al ver el parecido de Superior Iron Man con Ultrón.
-Tengo una idea, ustedes distraiganlo.- dijo el androide desapareciendo entre los muros.
-Hey cara de metal...intenta detener esto.-
La Viuda Negra arrojó granadas aturdidoras mientras Wanda golpeaba el traje con su poder haciéndolo retroceder.
-Nat...Funciona...-
-Lo tenemos...¡Es ahora o nunca Visión!.-
El sintezoide salió de entre el suelo y tomó a Iron Man por al espalda inmovilizado sus extremidades, con su super densidad el traje no podía salir de allí sin abandonar el cuerpo de Stark, algo que no estaba dispuesto a hacer.
-Esto le dolera un poco Señor.- el androide intentaba entrar al sistema central del traje con sus mente, pero la barrera que este tenía era impenetrable.
-Es imposible...no puedo atravesar su firewall...-
-No podras entrar en mi sistema Visión, fui diseñado para resistir a cualquiera de tus ataques. Pero te devuelvo el gesto.-
Era una trampa, la armadura arrojó un pulso electromagnético dentro del cuerpo de Visión poniendo los sistemas del sintezoide inactivos, dejándolo inconsciente y fuera de combate.
-¡Visión!- gritó Wanda al ver a su amado caer.
-Ya me cansé, solo me hacen perder mi tiempo. Acabare con ustedes.-
Un poderoso rayo de energía salió disparado del pecho del traje en dirección a Nat y Wanda.
La menor rápidamente creó una barrera de energía el rededor de ambas, pero el poder del rayo era más fuerte, pronto la barrera cedió y el ataque arrojó a ámbas chicas por los aires noqueando a Nat y dejando a Wanda apenas librada.
-Romanoff y tu novio artificial eran fáciles de contrarrestar, mis habilidades me permiten ver cada fortaleza y debilidad de cada uno. Incluida tu Maximoff.-
-No te dejaré lastimar a Steve...libera a Tony o yo te...-
-¿Que? ¿Me harás bolar en mil pedazos como a Rumlow en Lagos? Matarías dos pájaros de un tiro, salvas a tu amigo Rogers y matas al hombre que asesino a tus padres.-
-No te atrevas a mencionarlos...-
-¿Porque no? Gracias a su trágica muerte, pudiste tener ese poder, y gracias a ti es que estamos aquí.-
-¿De qué hablas?.- cuestionó la chica.
-Por tus estupideces es que se crearon los acuerdos, asesinaste a gente inocente por salvar a un cobarde que no valía nada. Tus errores crearon este caos. En parte eres la culpable.-
-No...no...yo salve a Steve...no era mi intencion lastimar a nadie. Jamás.-
-Pero lo hiciste...lastimaste a muchos, salvaste a ese maldito y me hundiste a mi por el...¿No lo vez Maximoff? Siempre seras la gran villana de la historia, pase lo que pase.-
-No...yo no soy mala...solo quiero protegerlos...yo no quería hacerte esto...yo solo quería hacer el bien.-
-Ni siquiera pudiste salvar a tu hermano, ¿Enserio crees que puedes salvarnos a nosotros? Para ser demasiado poderosa eres tan ingenua como una niñita asustada.-
-¡Déjame...déjame en paz!.-
-Tu deteriorada mente siempre será tu mayor debilidad niña...-
-¡No! ¡Ya basta! ¡Yo no quería...!-
-Eres mala Wanda Maximoff. La desgracia siempre será tu maldición...-
-Basta...basta...- suplicaba la chica.
-No salvarás a nadie hoy...-
-Ya basta...dije ¡BASTA!.-
Un grito de furia desató una enorme explosión escarlata que sacudió todo el lugar...la joven había alcanzado su límite.
El malvado Iron Man quedó perplejo, no esperaba esto por parte la chica.
Unos furiosos ojos rojos miraron la armadura y sin titubear sometió al hombre de hierro con sus manos haciéndolo caer de rodillas, dejándolo incapacitado totalmente.
Nat y Visión recuperaron la conciencia después de la súbita explosión.
-¿Wanda?- preguntó Visión a su amada al verla así, jamás la había visto tan furiosa, no parecía ella.
-Creo que la hizo enojar...- expresó Nat asombrada.
-Natasha, Visión; Lleven a Steve al complejo, necesita tratamiento urgente, y llamen a Helen Sho. Yo me encargaré de esto.- sentenció autoritaria.
Ambos Vengadores se miraron confundidos y con temor...pero sin más aceptaron llevándose a Steve en el Quinjet dejando a Wanda sola con Superior Iron Man.
-Se lo que quieres...ambos tenemos ese sentimiento de rabia, vivimos con el aunque pretendemos que no...acaba con quien te arruinó la vida Wanda, conviértete en la villana de una vez por todas...-
-No. Hace tiempo pensaba en vengarme de Tony. Pero luego entendí que el no tuvo la culpa de lo que me sucedio, el es un buen hombre, tal vez tuve la culpa de esto guerra, pero ayudaré a reparar los daños.-
-¿Y como harás eso niña ingenua, estoy incrustado a la mente de Stark, si me matas a mi, lo matas a él...-
-¿Eso crees?.- dijo la castaña introduciéndose en la conciencia básica de Superior Iron Man, arrancando así cada rastro de él de la mente de Tony, liberándo al verdadero Tony Stark.
-¡No...no...es posible, no puedes hacer esto...¡¿Que eres?!...aaaaahhhhh!-
-Te metiste con las personas equivocadas, parásito maldito.-
La joven engulló la armadura con sus poderes y moviendo sus manos comenzó a arrancarla del cuerpo de Tony pedazo a pedazo, de una vez por todas.
Finalmente aquella armadura que había sido construida con los miedos, el resentimiento y la venganza de Tony le había sido arrancada de su ser.
Un fuerte resplandor brillo por todo el lugar desintegrando el traje por completo al fin.
Wanda regresó en sí luego de ese ataque de furia, tampoco estaba segura de que había sucedido, se sentía extraña. Inmediatamente corrió a ayudar a Tony quien se hayaba tendido en el suelo completamente en shook.
-¡Tony! ¡Tony! Háblame, ¿Eres tú?.-
El genio no lograba articular palabra alguna, su cuerpo temblaba, su mirada desorientada volteaba en todas direcciones viendo el desastre que había causado, su cabeza dolía como nunca. La experiencia lo había aturdido demasiado.
-¡Hey! Ya pasó, todo acabó...estás aquí...-
El mayor hizo contacto visual con Wanda, y sin más la abrazo como si no hubiera un mañana. Necesitaba eso. Lágrimas rodaron por los ojos de Tony, no podía asimilar aún todo lo que sus ojos tuvieron que presenciar sin que pudiera hacer apenas nada.
-...Pero que he hecho...- susurró en el regazo de Maximoff.
-No eras tu Tony...no eras tú.-
Superior Iron Man se había ido, dejando consecuencias, pero más que nada, rompiendo el corazón de ambos héroes.
*Una semana después*
Una semana había pasado desde aquella fatídica noche, las secuelas que había dejado aquel momento fueron demasiadas, más para el castaño. Tony permaneció en la torre...o lo que quedó después de la pelea. A pesar de que Wanda le pidió venir con ella al complejo, este se negó, aún estaba en shock, no quería hacer más daño, no tenía cara para enfrentar lo que de algun modo creyó que el hizo.
Steve se encontraba con el equipo recuperándose, aunque no mortales, las heridas de la paliza que le propició Stark habían sido algo serias, pero el super soldado resistía, nunca de rendía ante nada.
El resto del equipo lo acompañaba y se mantenían a la espera de que Tony apareciera, pues no respondía a ningún intento de comunicarse.
Amanecía un día lluvioso y gris en Nueva York. El genio despertó con una enorme jaqueca, apenas podría dormir, y aunado a sus pesadillas, que una vez más regresaron, se sumo aquella donde intentó matar al amor de su vida. ¿Qué más podría salir mal?
Tomó un trago y contemplo la ciudad a través de su ventana, pensando, le atormentaba que ahora el arruinó las cosas con Steve. Por más esfuerzos, el destino se empeñaba a mantenerlos separados. Pero aún más lo atormentaba el hecho de que lo que hizo alguna vez lo sintió y quiso hacerlo por su propia mano, pero ahora que lo veía desde otra perspectiva, se arrepentía de haber tenido tanto odio dentro de sí. No podía creer que ese rencor lo dominó. Por un momento se desconoció.
-Viernes...¿Como esta él?- preguntó por Steve como había hecho los días anteriores.
-Él Capitán Rogers permanece estable, presenta grandes mejorías, sus heridas sanan a gran velocidad gracias al suero. Si continúa a ese ritmo de mejora lo más probable es que dentro de una semana más haya sanado del todo.
-Bien, gracias Viernes.-
-Para servirle. Señor, ¿No considera que ya es buen momento para afrontar la situación?.-
-Si te soy sincero, no lo se. No sé cómo verlo después de esto.-
-Temo que solo alarga la espera por algo que es inevitable.-
-Tal vez...tal vez.-
Luego de pensarlo por un rato, y de varios intentos por hacerlo, finalmente el genio se decidió a ir a ver a su amado. A fin de cuentas tendría que enfrentar las cosas, por más avergonzado y arrepentido que estuviera.
Tomó uno de sus lujosos autos y se dirigió al complejo, estaba nervioso, sabía que al llegar lo iban a juzgar, estarían molestos con el. Y con justa razón. Pero más nervioso estaba de tener que ver a Steve.
*Complejo de Los Vengadores*
Después del largo camino Tony llegó al lugar, temeroso entró esperando cualquier cosa, Natasha lo recibió en la entrada. Un nudo en el estómago de Stark se hizo presente, odiaba estar nervioso.
-Pensé que nunca vendrías...-
-No podía hacerlo...no se en que momento se salio todo de control.-
-¿Si sabes que no eras tú, verdad? Era esa copia siniestra de Ultrón. No tu.-
-Me siento avergonzado de haberles hecho lo que les hice.-
-Tranquilo, lo entiendo, no es conmigo con quien debes disculparte.-
-Lo sé...es que es difícil.-
-Estuvo preguntando por ti todos los días, quiere verte, todos queríamos de hecho.-
Ambos héroes entraron al complejo, Sam se acercó al castaño.
-Adelante, dime te lo dije Wilson.- dijo esperando a ser juzgado.
-Me contaron lo que pasó. Lo siento Stark.- expresó Sam. -No te vamos a juzgar, no eras tú, fuiste usado por esa cosa. Tu y Steve son nuestros amigos, los apoyamos por igual Tony.-
-Te lo agradezco, de verdad.-
Wanda y Visión se acercaron al genio, este inmediatamente bajo la mirada, se sentía terrible por haberle dicho a Wanda todas esas cosas horribles.
-Señor Stark. Que gusto.-
-Lo siento amigo...-
-No se preocupe señor.-
-Wanda...-
-Que bueno que volviste.-
-Yo, no soy el mejor pidiendo disculpas como puedes ver, lo que dije, esas cosas...lo lamento, de verdad no quise. Sin tu ayuda no habría podido regresar...gracias Maximoff.-
-Lo sé. No eras tu el que habló esa noche...-
-¿Donde esta él?
-En tu habitación descansando, insistió en quedarse allí.-
El genio se dirigió hacia allí, su corazón palpitaba más y más fuerte con cada paso que lo acercaba. Finalmente llegó, allí estaba parado frente a la puerta, con temor giro la perilla y entró. Su corazón se magulló y un nudo en su garganta se formó al ver a su amado soldado postrado en una cama, cubierto de golpes y heridas por sanar. Parecía que estaba dormido así que cuidadosamente se sentó al lado de el.
Pasó minutos en silencio contemplandolo, lo amaba tanto, se sentía tan estúpido por haber dudado de su amor, las emociones nublarón su juicio, Steve lo amaba de verdad y aún así fue tan tonto como para poner en duda eso. Pero había sido tan herido que su miedo lo hizo pensar eso en ese momento. El sentimiento de culpabilidad volvía.
Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por un leve suspiro. El rubio despertaba, este miró a su costado aún adormilado y cual fue su sorpresa al ver a Stark junto a él.
-...Tony...- dijo suavemente queriendo levantarse y abrazarlo pero cualquier intento de moverse solo lo lastimaba.
-Steve, no hagas esfuerzo, aún estás lastimado.-
-Tony...lo lamento yo...-
-No lo digas Steve, yo soy quien lo lamenta.-
-No debí ocultarte nada.-
-Y yo debí confiar más en ti. Ella habló conmigo hace tres, para disculparse, está muy apenada con los ambos. No sabía lo que pasaba.-
-Yo te orillé a esto, de no ser por mi no habrías pasado por lo que pasó.-
-Escucha, nada de esto es tu culpa, solo hacías lo correcto, y yo solo vi lo malo en eso, fui un idiota.-
-No digas eso...-
-¡Casi te mató Steve! Si Wanda no me hubiera detenido tu...probablemente no estarías aquí.- dijo con dolor.
-No eras tu Tony, tu nunca me harías daño.-
-Pero fueron mis demonios, el resultado de mi rencor, el fruto de mis miedos. No tienes idea de lo horrible que fue ver como mi cuerpo te golpeaba sin cesar, sin poder detenerme. Escuchar como salían palabras de mi que yo no podía decir. Fue como ser poseído por un monstruo.-
-No eres un monstruo y lo sabes, estabas aterrado.-
-¿Sabes lo que más duele? Que todo eso alguna vez fue parte mi, en algún punto quise hacerte eso, esos demonios aún vivían en mi y ni siquiera me di cuenta.- su voz no pudo evitar quebrarse.
-Era mi trabajo protegerte, hacerte sentir bien, debí hacer más.-
-No dejo de pensar en que pasaría si alguna vez regresan esos miedos y no hay nadie que me detenga, me aterra la idea de perderte y que sea yo el culpable. Steve lamento mucho haberte hecho esto, me equivoque. Aún no estoy listo para esto.-
-Espera...¿A qué te refieres?- el rubio pensaba lo peor.
-...Me refiero a que necesito tiempo. Tiempo para ver que hay de mal en mi y ver como arreglarlo.-
-Podemos hacerlo Tony...juntos saldremos adelante.-
-Necesito hacerlo solo, me ayudaste a cambiar, tu amor lo hizo, y te amo por eso. Pero tengo que enfrentarme a mis propios demonios por mi cuenta. No puedo arriesgarte así de nuevo, no me lo perdonaría. Lo hare solo.-
-Tony...¿Estás terminando lo nuestro?...- preguntó con un profundo nudo en la garganta.
-No, Steve...fuimos demasiado rápido pensando que todo había sanado, eres el amor de mi vida, me di cuenta de eso. Pero no eres tú el que falló, fui yo, yo soy el que no esta bien del todo. Y si no estoy bien conmigo mismo, ¿Qué clase de amor te puedo ofrecer?.-
-No hagas esto...te lo pido. Sin ti no soy nada...- dijo con lágrimas en sus ojos.
-Y yo no puedo vivir si te pierdo, por eso necesito tiempo para sanar, ser mejor. Lo pensé y ya decidí. Por favor no lo hagas más difícil Steve.-
-...Tony...por favor...-
-Te amo, y eso jamas va a cambiar, eres mi fortaleza y mi debilidad, pero sobre todo eres lo que le da sentido a mi mundo. Y debo ser el mejor para no destruirlo.-
El castaño se acercó a su amado Capitán y depositó un beso suave en su mejilla como un adiós, al menos por ahora.
El mayor lo detuvo tomando su mano.
-Te esperaré el tiempo que sea necesario...- le dijo con un gran dolor en su corazón.
-Lo sé, y aquí estaré para ti cuando me necesites, como tú conmigo. Te amo Steve. Hasta pronto.-
Ambos se despidieron con un gran dolor en su corazón, pero ambos sabiendo que en el fondo era por el bien de los dos. Steve había dado todo por hacer que Tony volviera a ser el mismo y fuera feliz, y lo logró. Ahora era turno de Stark de sanar sus heridas más profundas y ser mejor para Steve.
Finalmente Tony se fue del complejo sin mirar atrás. No podía negar que le dolía en el alma dejar así a Steve, pero era necesario para poder seguir.
*Torre de Los Vengadores*
Stark llegó a su hogar, la fría noche había caído, el genio se hayaba preparando sus cosas para partir, necesitaba un lugar tranquilo y solitario para aclarar su situación. La vieja casa del lago, que antes fue de sus padres, le serviría, fuera de la ciudad, lejos de todo.
-Jefe, las reparaciones tardarán al rededor de tres semanas, el señor Happy dirigirá se encargará de todo, no tiene de que preocuparse.-
-Gracias Viernes, debe quedar como nueva, no tengo idea si Steve vuelva aquí, pero es su hogar también.-
-Una cosa más, el director Fury esta en su despacho, me informa que requiere hablar con usted, es de carácter urgente.-
-Ya se había tardado...voy enseguida.-
El castaño se dirigió rumbo a su despacho donde Fury lo esperaba con noticias inquietantes.
-Me preguntaba donde estabas Nick, ya haz de saber lo que pasó...-
-Hola Stark, me enteré si, y lamento lo que pasó entre ustedes, de verdad, te lo digo como tu amigo, no como tú jefe.-
-Pues gracias, a veces las cosas no pasan como deberían.-
-¿Estarás bien?.- cuestionó preocupado de que Stark recayera en sus problemas.
-Lo estaré, soy Tony Stark no lo olvides.-
-Por supuesto que lo eres...-
-¿Eso era lo tan urgente que tenias que decirme Nick?.-
-No. La verdad es que vine porque, necesito que veas algo. Tenemos un problema, uno grande, y no se si estamos preparados para algo así.-
-Te escucho...- dijo con preocupación.
Una amenaza emergía de entre las sombras, un enemigo como ningún otro estaba cerca. Los Vengadores estaban por conocer a su más grande reto.
Continuará...