C a p i t u l o 3 "Brighton"
— ¿Tan temprano? — pregunto, gruñendo a mi mejor amigo
— Ya te dije que sí, deja de preguntar — escucho su voz al otro lado de la línea y sé que está rodando los ojos — Date prisa, estoy ahí en quince minutos — cuelga
Camino apresurada al baño de mi departamento y cepillo mis dientes para después correr a mi habitación y buscar algo para usar. El cielo indica que será un día en el que el sol podría ocultarse en cualquier momento. Decido dejar mi cabello suelto y antes de tomar mi bolso me pongo unos lentes negros. Justo en ese momento, Harry, me envía un mensaje avisando que ya se encontraba esperando.
Cuando bajo y salgo a la calle, lo encuentro recargado en su camioneta con sus ojos puestos en mi dirección. Luce tan guapo con ese pantalón café y una camisa azul.
— ¿Estás lista para pasar el día con tu mejor amigo? — es lo primero que dice en cuanto ve que me acerco a él
— No sé si deba preocuparme por el hecho de que sigues sin decirme que haremos, pero confío en ti — respondo depositando un beso en su mejilla y caminando hacia la puerta del copiloto
— Bueno tu solo espera y verás — dice con aquel tono nervioso que usa cuando las cosas no están a su alcance y abre la puerta para mí, después espera pacientemente a que suba y veo sus lentos movimientos hasta que él también está arriba
— No planeaste nada ¿verdad?
— ¡Lo siento Isa! — suspira y enciende el carro mientras me ve con cierta culpa y yo río — Anoche después de que te fuiste con Patrick nos quedamos bebiendo más y perdí la conciencia. Incluso tuve que quedarme a dormir en el departamento de Paige, por suerte tengo suficiente ropa ahí y pude encontrar esto — señala su atuendo
Muy bien Harry, un dato innecesario, muchas gracias.
— Entonces, señor "déjate llevar" ¿qué haremos hoy? — pregunto intentando ignorar lo último dicho
— No lo sé — gruñe por lo bajo tomando su cabeza con las manos — Además, la maldita resaca no me deja en paz
— Bien, entonces puede que lo mejor sea posponer la salida — susurro sintiéndome triste
— No Isabella, te lo prometí, además, de verdad deseo que estemos juntos hoy. Solo déjame tomar una pastilla y verás que todo mejora — dice rebuscando en el carro intentando encontrar la caja de aspirinas
Sin embargo, sorpresivamente se me ocurre lo que creo una muy buena idea, así que sin pensarlo dos veces le pido que se cambie a mi asiento para yo situarme frente al volante.
Harry no para de preguntarme hacia donde nos dirigimos, pero al no recibir respuesta de mi parte decide encender la radio y minutos después noto como se ha quedado dormido con los brazos cruzados y la boca entre abierta. Maldito anciano.
***
— Harry, hemos llegado — susurro cerca de su rostro pero él no reacciona — ¿Harry? — insisto, pero el bello durmiente no reacciona
Como si fuera cosa del destino y el clima estuviera de su lado, noto como el sol pega justamente sobre su rostro, por lo que ilumina cada uno de sus rasgos haciéndolo brillar. Como si se tratara de oro. Sin pensármelo dos veces, levanto la mano y con mucho cuidado paso mis dedos sobre su frente, después sus cejas, trazo con delicadeza sus ojos y pestañas y sigo por su nariz perfecta, acaricio sus mejillas y finalmente coloco la palma de mi mano sobre su barbilla donde se encuentra una creciente pero, mínima barba.
— Juro que si sigues así volveré a quedarme dormido — murmura con la voz más ronca de lo normal y consigue exaltarme al igual que querer alejar mi mano por completo, sin embargo, él la retiene y me pide que la deje justo donde estaba — Vuelve a hacerlo por favor — susurra aun con los ojos cerrados y sintiéndome confundida, con la mano un poco temblorosa repito los trazos que fui dejando en su cara — La próxima vez le pediré a Paige que me despierte así — no dudo ni dos veces en apartar mi mano
— Bueno, pues ahora que te has dignado en despertar dime una cosa, ¿cómo te sientes? — pregunto
— La verdad es que mucho mejor — bosteza y se estira a su antojo relajando los músculos — Esa pastilla y la siesta me han sentado muy bien — sonríe y como si recordara que fui yo quien se encargó del viaje, mira a través de la venta — ¿Brighton? — pregunta y me mira con la boca abierta
— Supuse que sería una buena idea — murmuro tratando de adivinar sus pensamientos
— Isabella ¡es lo mejor que pudiste hacer después de elegirme como mejor amigo! — veo como salta emocionado de su asiento y sale de la camioneta para ayudarme a bajar también — ¡Mierda! Teníamos tanto sin venir
— Ocho años — recuerdo sintiéndome sumamente emocionada y recordando aquel viaje que hicimos con mi familia
— Es como si volviéramos a tener diecinueve — sonríe y toma mi mano — Tu ya escogiste el lugar, ahora déjame a mi hacerte pasar un excelente día
Caminamos rumbo a un pequeño restaurant que se ubica cerca de donde he estacionado la camioneta de Harry y decidimos sentarnos en el pequeño balcón del segundo piso. El aire parece desatarse, lo que hace que los rulos de Harry se alboroten y cierre los ojos tratando de evitar que entre a sus ojos, y lo único que puedo pensar, es que es el ser más bello que he visto en mi vida. Lo escucho hablar sobre el posible negocio que abrirá su hermana Gemma y me informa que en cualquier momento ella hablará conmigo para saber mi opinión. Adoraba a su hermana, se había convertido en mi mejore amiga, y desde hace unos meses, comencé a sospechar que ella sabía acerca de mis sentimientos hacia su hermano. ¿Cómo? Ni idea, pero como suele decir ella "ojo de loca no se equivoca".
Después del pequeño almuerzo, Harry y yo decidimos ir caminando rumbo al Brighton Pier, el gran muelle donde se ubican las atracciones donde alguna vez reímos y vomité sobre los pantalones de Harry al bajar de la montaña rusa.
— De acuerdo, los boletos yo los pago — digo sacando mi cartera del bolso — Ya pagaste tú el desayuno, esto me corresponde a mí
— Bien, pero lo siguiente yo lo pago — sonríe, mientras nos formamos frente a la taquilla del pequeño parque de diversiones
Una vez con nuestros boletos, nuevamente Harry me toma de la mano y entrelaza sus dedos con los míos para adentrarnos al parque. Esta sensación de sus manos con las mías debería de ser algo de lo que ya estuviera acostumbrada, pues no era nada nuevo que él hiciera eso, sin embargo, el cosquilleo de su piel aún me hacía sudar.
— Primero subiremos a la rueda de fortuna, después a aquel carrusel, más tarde entraremos a la casa de susto y finalmente concluiremos con la montaña rusa — dice pensativo viendo a su alrededor — Sí — afirma — Dejaremos esa hasta el final para asegurarme de que ya hayan pasado varias horas después del desayuno, no vaya a ser que se te ocurra vomitarme de nuevo y mira que estos pantalones son caros y no pienso dejar que me los arruines
— Los puedo pagar, no te preocupes — finjo estar indignada
— Sí, pero son edición limitada, seguro que ya no hay. Además estos se me ven perfectos — me guiña un ojo
— Egocéntrico — ruedo los ojos como por tercera vez en el día
— Deja de hacer eso — me regaña por mi acción y besa mi frente para después pasar uno de sus brazos por mi hombro. Comenzamos a caminar hacia la primera atracción
— Gracias Harold — digo después de unos minutos en silencio — Realmente necesitaba esto
— ¿Pasar tiempo conmigo? Claro que lo necesitabas
— Gracias por arruinar el momento — lo molesto y ambos reímos — No, lo digo en serio, últimamente he estado tan estresada y concentrada en tanto que te he dejado de lado — el arrepentimiento llega — Y lo siento Harry — suspiro — Últimamente he estado un poco mortificada — río sintiéndome apenada
— Oye, no tienes de que preocuparte. Aquí seguiré siempre, para ti — me sonríe — Te amo, ¿bien? Eres mi chica, Isa
Aquí la cuestión, es que en realidad no lo soy.
— Además, sabes que puedes confiar en mí y decirme que es lo que te mortifica
— Nada que tenga importancia — respondí y era la verdad, mis sentimientos hacia mi mejor amigo eran algo que podía dejar para después — Bueno, vamos a disfrutar de esto — nos subimos a una de las cabinas de la rueda de la fortuna y fuimos subiendo poco a poco esperando a que más gente se montara al juego
— Tenía años sin hacer esto — dice Harry una vez que estamos hasta arriba. Su brazo sigue descansando alrededor de mi hombro y ambos contemplamos tranquilamente las olas del mar que se sitúa frente a nosotros. Me tomo la libertad de recostarme un poco sobre su cuerpo — La última vez que estuvimos aquí nunca habría pensado que en un futuro seguiríamos juntos
— ¿No le veías futuro a nuestra amistad? — pregunté girando mi cabeza para verlo mejor
— No me refería a eso, es solo que, supuse que por adentrarnos a la vida adulta las cosas cambiarían demasiado y no seríamos los mismos — hace una larga pausa — Tenía bastante miedo de que todo terminara — me mira atentamente — Recuerdo el pavor que sentí cuando te vi caminar hacia tu dormitorio el primer día de universidad, pensé ¿y si después de esto encuentra a mejores personas que yo? Y lo hiciste, estoy seguro — ríe — Sin embargo, cada día te sentabas a comer conmigo después de clases y creo que fue ahí cuando supe que en realidad, contigo nada iba a cambiar — su mirada ahora se dirige hacia la nada — Te veía entrar con aquella seriedad que te caracteriza, pero, por alguna razón, en cuanto me veías, sonreías y te juro que me iluminabas la vida
¿Es normal que sienta ganas de llorar?
— Solía llamar a mi madre cada día para informarle que hasta el momento todo iba normal, sintiendo una preocupación de que aquel fuera el último en el que hablaras conmigo — confiesa — Después de casi dos años ese temor desapareció
— Harry, ¿por qué nunca me hablaste de eso? — pregunto — Estabas la mayor parte del tiempo rodeado de amigos, sobretodo de Niall que no te dejaba en paz — río recordando al irlandés
— Lo sé — ríe conmigo — Pero nadie me conocía realmente, al menos no como lo haces tú
El resto de la tarde transcurre sin más confesiones pero sí con muchas risas, bromas y malos chistes de Harry. En el carrusel mi mejor amigo se concentra en tomarme fotos vergonzosas y de la casa de sustos salimos riendo por la pésima calidad de esta. Harry, logra bajar de la montaña rusa sin vómito en sus pantalones y yo con el cabello hecho un desastre por el viento. Ahora mismo, nos encontramos sentados en la arena junto al mar discutiendo por una idea absurda que se le ocurrió al chico de ojos verdes.
— Te he dicho que no lo voy a hacer, no tengo otro cambio de ropa y vamos a mojar los asientos de tu camioneta y nos podemos resfriar... ¡Harry! — mi amigo no me deja terminar pues me toma por las piernas y camina hacia el mar — ¡Detente, no puedes hacer esto! — seguido de esto me deposita en el suelo
— Entonces quítate la ropa y entremos — dice mientras comienza a desabotonar su camisa azul. Veo como la saca de su cuerpo y sus manos se dirigen a su pantalón — ¿Lo haces tú o lo hago yo?
— Eres despreciable — le digo y comienzo a sacar mi ropa hasta quedar solamente en ropa interior al igual que él
— Linda — dice escaneando mi cuerpo y sonriendo coquetamente — ¡Vamos! — vuelve a tomarme y mientras pataleo y río con él, siento como las olas heladas del mar chocan con nosotros
— ¡Está horriblemente fría! — chillo y Harry nos hunde hacia el fondo
— Mierda, porque supuse que esto sería buena idea — dice una vez con nuestras cabezas fuera — ¿Por qué dejaste que esto ocurriera? — noto como sus dientes castañean por el frío
— Nunca te has caracterizado por tener las mejores ideas — me carcajeo al ver como comienza a arrepentirse de esto — ¿Recuerdas la vez que llevaste un pato a la casa de tu madre? Ese es un gran ejemplo del porque tus ideas no son las mejores
— Era un pato hermoso, pensaba llamarlo Isabella porque se la pasaba graznando de una manera tan chillante, tal como te escuchas tú cuando gritas
— Me voy — digo riendo a la vez que salgo rumbo a la arena y después de unos cuantos pasos me tiro en ella
— Tienes la piel erizada — dice Harry una vez que se coloca a mi lado — Ven acá — me toma de la cintura y me pega a su pecho para abrazarme y cubrirme del frío
Desde esta posición puedo sentir el tranquilo latir de su corazón y aprovecho para delinear con mis dedos algunos de los tatuajes que quedan a mi alcancé; sobre todo, aquellas golondrinas que eran mis favoritas.
— Había olvidado por completo las pecas que tienes en la espalda — rompe el silencio minutos después y siento como sus dedos unen los puntos que se sitúan en esa zona — Siempre me han parecido bellas
— Yo las odio — confieso
— No tendrías por qué hacerlo, son bellas — repite y después siento como acerca su rostro a mi cuello para provocarme cosquillas con su barba. No puedo evitar reír y él repite la acción en varias ocasiones hasta que me duele el estómago de reír — Eres una chica maravillosa, sabes que eres mi adoración — me aprieta más a su cuerpo manteniendo en su rostro una hermosa sonrisa — Y sabes que siempre que puedo hablo de ti
— Espero que sean cosas buenas
— Lo son, créeme — se separa y me mira atento, pero de una manera diferente — Es por eso que hay alguien que quiere conocerte
¿De qué me está hablando?
— Muy bien — digo en pausa sintiéndome extrañada
— Hay un chico en la empresa...
— No — lo interrumpo alejándome más de él y enfocando mi vista en el mar. Sabía a donde quería llegar
— Por favor déjame terminar — suplica
— No vas a jugar ese rol de quererme juntar con alguien, mi mamá ya tiene ese puesto y no pienso soportar a alguien más que busque lo mismo
— Lo hago porque te quiero Isabella, él de verdad parece interesado en ti. Se llama Sam, a lo mejor podemos tener una cena los cuatro, como una cita doble — dice sonriendo entusiasmado
— Pues Paige debería presentarle a alguna amiga para que no se arruinen sus planes — me pongo de pie y Harry imita mi acción
— Necesitas conocer a más gente, sobre todo a hombres, desde hace un tiempo que ya no brillas de la misma manera y puede que...
— Harry, gracias, pero no necesito a un hombre para ser feliz
Bueno, tal vez si lo necesitaba pero solo podía ser mi mejor amigo.
— ¿Acaso se trata de una chica? — me toma por los brazos y lo único que puedo hacer es mirarlo indignada — Bien, creo que no va por ahí
— ¡Claro que no! — alzo la voz y comienzo a vestirme sin importar que mi ropa interior siga húmeda — Y no tendría nada de malo que fuera una mujer, incluso sería mucho mejor que me gustaran las chicas en vez de los hombres, ustedes pueden llegar a ser despreciables. Pero el punto es que no necesito de ninguna persona para ser feliz, yo sola puedo ser mi propia alegría ¿Por qué dejaría que mi vida dependiera de alguien más?
— Por favor no te enojes — intenta detener mis movimientos pero no lo consigue — Es solo que en este tiempo de amistad nunca te he visto tener un novio y ayer que conversaba con Paige sobre el asunto, supusimos que a lo mejor...
— Pues supusieron mal
Tomo mi bolso y camino fuera de la playa tratando de llegar lo más rápido a la maldita camioneta de Harry. Me sentía ofendida de que se pusiera a hablar de mi vida privada con su novia, me sentía ofendida de que fuera tan torpe y no se diera cuenta de que su mejor amiga estaba enamorada de él. Sentía que las lágrimas quemaban mis ojos, pero no, por ningún motivo me permitiría llorar frente a él.
Minutos después, Harry, llega corriendo ya vestido e intenta hablar conmigo pero lo detengo pidiéndole que me lleve a casa. El camino se torna silencioso e incómodo y no puedo parar de pensar en cuántas veces habrá mantenido conversaciones de ese tipo con su novia.
Casi dos horas después, se está estacionando frente a mi departamento.
— Isabella, por favor discúlpame
— No tienes por qué hablar de mi vida privada con nadie
— Lo sé, arruine nuestro día — suspira y pasa las manos por su cabello — Pensaba que, tal vez, podríamos cenar juntos para terminar el día
— No tengo hambre, pero gracias. Solo quiero dormir
— Por favor — insiste pero me niego. Suelta un gran suspiro — De acuerdo — acepta
— Adiós Harry — doy una casto beso en su mejilla y bajo de la camioneta
— ¡Isa! — grita mi nombre y me giro para verlo mejor — ¿Estás libre mañana? — lo miro dudosa pero asiento — ¿Puedo pedirte un favor? — pregunta pero al notar mi silencio continúa — ¿Podrías acompañarme mañana al centro comercial? Me gustaría que me ayudaras a elegir el anillo que le daré a Paige
.....
¡Hola!
¿Están listxs para los Grammy's? Yo estoy muriendo de emoción.
En fin ¿les está gustando la trama? amaría mucho si me dieran su opinión.
Estoy pensando en actualizar cada cinco días o cada semana.
Por otra parte, me doy cuenta de que esté capítulo está un poco largo ¿Les parece bien esta extensión o les resulta algo pesado seguirle el hilo?
Te agradecería si me ayudas con tu voto y tu comentario
TPWK