"No eran seres humanos, pero en ningún animal había encontrado una relación tan profunda conmigo. Los axólotl eran como testigos de algo, y a veces como horribles jueces. Me sentía innoble frente a ellos; había una pureza tan espantosa en esos ojos transparentes. Eran larvas, pero larva quiere decir también máscara y también fantasmas."
Julio Cortázar