Ya no estaba solo.

Ya no lo estaría nunca más.

- Hey...- murmuró el menor- ¿Estás bien?

Jungkook alzó la cabeza, hipnotizado de repente por aquel par de orbes miel.

Sonrió.

- Lo estoy.

- ¿Te perdiste de nuevo en tus pensamientos? A veces me da miedo que te quedes mirando a la nada por cinco minutos seguidos- arrugó la nariz.

- Es que me cautiva tu belleza- sonrió de lado.

- La belleza de la pared diría yo~- rió.

Kook debía admitir que a veces se perdía en su mundo por un par de minutos.

- Estaba pensando...- se animó a decir, acariciando el abdomen de su chico-... Quiero que me acompañes a un lugar... ¿Te parece?

El rubio pareció alarmado por unos segundos. Jeon enarcó una ceja y Jimin hizo como si no tuviera nada planeado entre manos. Lo había escuchado hablar por teléfono el día anterior, así que sabía que algo estaba planeando.

Fingiría no saber solo porque era lindo verlo nervioso.

- ¿Demoraremos mucho...?- murmuró- Quiero prepararte.... U-un pastel- soltó sonriente.

- Si con pastel te refieres a una masa mal hecha de harina y huevos, yo...- Jimin hizo una mueca triste-... La comería completa. Claro que sí. Es más, haz dos~.

Park sonrió.

- ¿Crees que tenga tiempo de prepararte eso?- habló contento, dejándose mimar- Si es así, vamos... O bueno, es tu cumpleaños, eres el rey del mundo por hoy~. Tú decides si voy o no contigo~.

- En primer lugar, tú siempre serás el rey- besó sus mofletes y Jimin sonrió orgulloso- Y en segundo, aceptaré ser tu vasallo real, pero como me acabas de dar permiso de hacer lo que yo quiera, entonces vendrás conmigo.

- Bueno- soltó, riendo brevemente ante el contacto de la nariz de Jungkook con su barriguita- Ya sal de ahí. Aturdes al niño y a mi también~.

- Es mi cumpleaños y hago lo que quiero- le sacó la lengua.

Jimin volvió a reír.

- ¿Realmente cumplirás 25?- se burló.

- Mi edad mental no me define- bufó indignado.

El rubio le regaló un beso más, embobándolo al instante.

- ¿A dónde iremos?- preguntó, cambiando de tema.

- Dame otro y te digo.

- Kook, dime.

- Es mi cumpleaños- gruñó.

Jimin puso los ojos en blanco y le jaló la oreja.

- ¿A dónde iremos?- repitió la pregunta.

Kook le robó un beso y sonrió satisfecho.

- Al cementerio- se encogió de hombros.

El rubio se le quedó viendo, haciéndole otra pregunta más que obvia en silencio.

- Mi mamá... Siempre voy a verla en mi cumpleaños...- sonrió nuevamente.

Jimin le devolvió la sonrisa y acarició su cabeza con cariño.

- Quiero ir... No importa el tiempo que tome, mi pastel horrible podrá esperar... Compraré flores- soltó observando el rostro afectado del castaño.

Ma Sweet Boy- #KOOKMIN- #M-PREGWhere stories live. Discover now