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Es el segundo día que llego tarde al trabajo. Al parecer las dos semanas de abstinencia pegaron fuerte y, prácticamente, he estado corriendo a los brazos de Sehun cada día y cada noche.

Ayer hubo un problema, bebimos demasiado y, por lo que viví, al pequeño la ebriedad le sube la alegría y el deseo sexual. Era una maldita máquina exprimidora de lujuria y vitalidad. No recuperé la conciencia hasta muy tarde en la mañana.

- Pensé que no viviría para ver esto. - Oí que suspiraba Kai, mientras que Kris solo me miraba y sonreía.

- ¿Qué pasa?

- Nada, solo estamos felices por ti.

- ¿Felices? Acabo de llegar tarde.

- Pues comunicale la preocupación a tu cuerpo, porque te veo muy relajado.

- Eso no les importa.

- Bueno. - Kai levantó sus manos y sonrió. - Cubrete el chupón que tienes en el cuello. - Lleve mi mano hasta la zona, precioné y el calor atravesó mi cara. - Tu chico es muy...

- Ninguna palabra.

- Seguramente ya lo vio todo el mundo. - Agregó Kris. - Eso, y la mordida en el labio.

- Estas más que bien. - Comenzaron a reír. - En verdad, pensamos que no eras humano.

- Esto no te hace humano...

- Bueno, él te hace más humano.

- Es una lastima por el tutor, yo les tenía fe. - Dijo Kris, Kai me miró y abrió su boca.

- Espera... sigues con el tutor, ¿verdad?

- Sí... - Tiré mi maletín en el sofá y esperé toda clase de estupideces.

- ¡Lo sabía!

- No, ¿cómo...

- No creo que sea momento para hablar de eso.

- Gracias... porque estoy muy frustrado ahora.

- Oh, ¿el tutor sigue resistiendo al todo poderoso Park Chanyeol?

- Más que resistir, está acorralándome cada día.

- Y el problema es...

- Que no le veo lo estable a esto. Estoy caminando entre una cortina de humo.

- No puedes simplemente vivir y dejar que el tiempo pase.

- Chanyeol no es de esa clase de gente.

- Y si llegas a un acuerdo. - Dijo Kris sentándose en el sillón.

- ¿Un acuerdo?

- Sí, es obvio que ninguno de los dos está dispuesto a dejarse "controlar" por otro, pero podrían reforzar lo que tienen en común y manejar el resto como una pareja normal.

- El problema es que nuestro amigo no quiere dar el brazo a torcer.

- Entonces estarás en problemas y pondrás en un lugar difícil al tutor.

- Él es el difícil. - Dije tratando de mantener mi orgullo.

- Tienes razón, el que está desesperado por atención es él y no tú.

- Yo no estoy desesperado.

- Claro, ayer te fuiste corriendo de la reunión.

- ...

- El día anterior no contestabas las llamadas.

- Esto es un ataque.

- Solo te estamos diciendo lo que nos parece. Tus emociones por ese chico te están desbordando Chanyeol.

A mí no me engañas. Eres una zorra.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora