✨02✨

321 21 4
                                    

Quejándome del dolor de aquel golpe fuí abriendo los ojos mientras escuchaba las voces de la gente que me rodeaba.

- ¡Oh, por Dios! ¿¡Vieron eso!?

- ¿¡De dónde salió!?

- ¡¡Ese muchacho la salvó!! - decían las personas.

Cuándo voltié a ver, pude ver el cuerpo de un chico rubio en el suelo, está inconsciente, él me había salvado de que aquel auto me atropellara y en mi lugar el recibió el impacto. Quedé pasmada ante aquella situación.

Aún así mire a mi alrededor para ver si no veía a la desconocida, pero no podía dejar aquel muchacho en ese estado. Adolorida me arrastre hacia él y tome su pulso.

- Sigue vivo - dije - ¡Llamen a una ambulancia, rápido! - les dije a quienes estaban a mi alrededor - ¿Puedes oírme? - dije al oído del chico tratando de no moverlo y no saber que hacer - Oye, por favor no te mueras - dije asustada - Mí teléfono - dije buscándolo hasta encontrarlo en el pavimento y tomarlo en mis manos pero este ya no funcionaba - Rayos.

Solo escuché un quejido de parte del muchacho.

- ¿Estás bien? - volvió a quejarse - Es obvio que no. Por favor resiste, la ambulancia ya no tarda en llegar - quise salir de ahí de nuevo con las ideas de que la desconocida siguiera ahí después del escándalo que se hizo pero la momento de levantarme esté chico tomo de mi muñeca y no me dejó ir después de susurrar unas palabras.

- _____ - dijo él.

- ¿Qué?

En unos minutos llegó la ambulancia, bajaron una camilla y subieron al chico.

- ¿Usted viene con él? - me preguntó un paramédico.

- Este... Yo... - no sabía que decir, pues él aún se aferraba a mi brazo.

- ¡No tenemos tiempo para esto, señorita! ¡Suba ahora! - dijo una paramédico y no me quedó de otra más que subir.

...

- ¿Disculpe un teléfono público? - pregunté a una de las enfermeras quien después me señaló un teléfono - Gracias.

Llevaba una hora esperando noticias de aquel chico, no podía irme pues aún sentía culpa y la necesidad de agradecerle que me haya salvado la vida, aunque casi me haya arrancado el brazo. Pero tenía curiosidad por qué casi estoy segura que sabía mi nombre.

Tenía que avisarle a mi hermano donde estaba, creo que después de lo sucedido, debía estar preocupado.

- ¿Diga?

- Hola, Dylan. Soy yo.

- ¡____! ¿¡Dónde estás!?
¿¡Qué fue lo que pasó!?
¿¡Porqué no contestaste
el teléfono!?
¿¡Estás bien!?

- Tranquilo, estoy bien.
Estoy en el hospital, Ángeles.

- ¿¡En el hospital!?
¿¡Qué haces ahí!?
¿¡Estás lastimada!?

- No, nada de eso. Yo
Estoy bien, es una larga historia.

- Iré por tí. Solo
Espera.

Mí hermano tardo unos 20 minutos en llegar y no tarde en explicarle todo lo sucedido, desde cuándo encontré a aquella extraña y cuándo este este chico salvó mi vida.

My Lo(Ve)st Star. Thomas Sangster & Tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora