My Lo(Ve)st Star. Thomas Sangster & Tú

✨22✨

Pov. _____.

Era extraño, desde esta mañana mi despertar resultó más motivado, y la razón era él, aquel dueño de mi seguridad y de mi ser. Resumido en una sola palabra “Thomas”.

Me sorprendió ver su habitación abierta y que no estuviera dentro. Era extraño, se supone que él siempre despierta después que yo en las mañanas.

Así que escuche un ruido abajo, pero me preocupo al escuchar un grito varonil junto con un golpe fuerte de un sartén y descendiendo rápidamente por las escaleras ahí lo ví, en la cocina, intentando cocinar unos hot cakes.

- ¿Thomas? - dije llamando su atención.

- ¡____! - dijo tratando de abrir la llave del lavabo para disimular el sartén quemado - Yo... Solo estaba... - dijo nervioso.

- ¿Intentando quemar la casa? - dije con una sonrisa.

- ¡No! ¡Eso jamás! Es solo que...

- ¿Qué?

- Intentaba preparar unos hot cakes pero no me salió la receta de aquí.

- Jaja. Es por qué tienes la lumbre muy alta y en segundo no le hechaste la cantidad de huevos indicados, Thomas - me acerque a la cocina - Aún hay tiempo antes de ir a la escuela, así que vamos te ayudaré.

Y fue así como comenzamos nuestra propia receta, sin mencionar que también hicimos una guerra de harina entre ambos, risas, carcajadas como si dos niños estuvieran jugando entre ellos mismos.

- ¿Por cierto? ¿Dónde está Dylan?

- Salió temprano. Dijo que era algo importante.

- ¿Y qué era tan importante? - dije buscando con que acompañar los hot cakes.

- No me lo dijo. Solo que nos veíamos en la escuela.

- Está bien. Por cierto, Thomas. Tienes que probar esta forma de acompañar los hot cakes - dije poniendo platos en la mesa.

- ¿Jamón y salsa de Tomate?

- Sí, pruébalo.

- ¿No es dañino, verdad?

- No, yo acostumbro a comerlo - dije preparando un hot cakes con jamón y un poco de salsa de tomate para él.

- Está bien. Confiaré en tí - dijo dando un bocado cerrando los ojos para después mostrar una cara de convencimiento - ____, ¡Sabe bien! - dijo dando otro bocado - ¿Cómo es que sabes esta forma de acompañarlo?

- Mi abuelo materno, solía hacérselo a mi mamá y ella a nosotros - dije con una sonrisa dando un bocado a mi desayuno - Es algo único para mí, aunque la gente lo vea asqueroso jaja.

Sin percatarme él me vio fijamente.

- ¿Qué? - dije.

- Es solo que te manchaste tu cara de salsa - dijo.

- ¿Dónde? ¿Aquí? - dije limpiando mi rostro.

- No, espera - tomo mi brazo, se puso de pie y se acercó a mí y con su dedo limpia delicadamente cerca de mi  boca.

Un juego de miradas cercanas no tardó entre nosotros. Sus ojos cafés penetraban en los míos haciendo que me pusiera cada vez más nerviosa y aquel tacto que aún sujetaba mi brazo era más difícil para mí, y sin mencionar que sus ojos bajaron a la comisura de mis labios para después él lamerse los suyos intentando acercarse más.

Tenía miedo, sí lo tenía, no sabía cómo actuar, pero la idea de besarlo no era desagradable para mí, porque empezaba a sentir algo por Thomas. Cerré los ojos esperando el siguiente paso, hasta que mí celular sonó.