𝒢𝑜𝒹 𝓌𝒾𝓁𝓁 𝒻𝑜𝓇𝑔𝒾𝓋𝑒 𝓎𝑜𝓊

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-sí, aquí esta, el de Londres también.

-bien, yo se los llevó a Alfie, no te preocupes- sus pies la llevaron hasta el salón, donde su hermano miraba la ventana a un lateral.

Al escuchar el ruido de su hermana entrando soltó un largo suspiro, esperando poder hablar y perdonar su actuar en la noche de ayer, sin embargo, al verla entrar de forma segura se quedó estático.

-Ollie trajo el periódico, buenos días, aquí esta- lo dejo sobre la mesa, justo al lado de su mano, al tocar el hombro de su hermano noto lo tenso que estaba.

-para ti serán buenos, uh- bajo la mirada hasta la taza humeante, buscando las palabras correctas para no entrar en una discusión como la de ayer.

Segundos donde ambos estaban en distintos lados de una misma pared, Scarlett revolvió él té con nerviosismo, el cual disimulo con una pierna moviéndose debajo de la mesa.

-quiero hablar contigo sobre lo de ayer- el mayor dio inicio, llevando las cuerdas de la conversación- pero primero espero que no andes así por toda la maldita casa.

Con soberbia observo al primer judío que estaba parado cerca de la puerta.

-eh, ¿te estoy provocando?- la seriedad de su voz no se comparaba a la mirada coqueta que sus ojos demostraban, poniendo nervioso al pobre hombre- se honesto, por favor.

-o sea, se ve muy hermosa y todo, pero el escote es algo que llama la atención, y bueno, no es lo más adecuado porque, al menos a mí, me distrae.

-bien...- se acomodó en su asiento, suspirando- sal de esta habitación, que entre Harry, el no estará distrayéndose con mi escote.

Tomo aire comenzando a enojarle la actitud que había tomado su hermana, aguanto el aire para volver a hablar.

-sé que ayer estabas jodidamente mal, porque murieron hombres inocentes, que no pudiste defender y toda esa mierda te afecto, si, lo entiendo, ¿sabías? También dude de la existencia de Dios mientras estaba en las malditas trincheras, estar en ese lugar te hace replantearte varias cosas. El ver como con un solo movimiento un hombre muere, o cuando torturas a alguien por primera vez, te afecta demasiado, es una mierda.

Tomo aire, dejando salir lentamente lo que sentía.

-se por donde quieres ir, Alfie, pero no me siento cómoda siendo judía- los rituales la aburrían, le desesperaba el hecho de tener que hacerlos todos los días, restringiéndose por lo que Abraham había dicho hace unos años- debes entender muchas cosas.

-¿cosas como qué?- el ambiente iba pacifico, como si se tratase de una reunión de negocios.

-que no solo por ser mujer tengo que estar por debajo de ti, que lo que yo use no significa que quiero que me violen, con esta ropa, ¿me quieres violar?- el tema le daba pudor y nervios, pero sabía que era necesario hacerlo.

-no, nunca.

-puede que haya hecho cosas que para nuestra religión no esté bien, y... y noté que realmente me siento mejor siendo libre, sin tener que estar meditando un día en el que podría estar haciendo cosas más productivas, tengo todas las noches para pensar, no solo el viernes, es un día perdido.

Alfie abrió la boca queriendo hablar, más callo esperando que su hermana soltara todo y luego él ir quitando punto por punto.

-ayer tú mismo lo dijiste, no seré nadie si estas tu siempre delante, yo quiero poder tener lo mismo que tu sin la necesidad de que estés amenazando para que me tengan miedo o respeto, quiero yo hacerlo por mí misma- Scarlett se acomodó en el asiento mientras comenzaba a explayarse más- y encuentro injusto que yo haya creado el negocio, que yo hiciera todo para que luego tú te llevaras todo el reconocimiento como si hubieses estado desde el principio, es una mierda.

𝔓𝔩𝔢𝔞𝔰𝔞𝔫𝔱 ℌ𝔢𝔩𝔩 [Thomas Shelby]Where stories live. Discover now