𝑬𝒔𝒑𝒆𝒄𝒊𝒂𝒍 𝑵𝒂𝒗𝒊𝒅𝒂𝒅

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La nieve caía de manera tranquila por las afueras de aquella casa, encargándose de decorar de manera suave con un fresco color blanco el lugar que antes estaba teñido de verde.

Aquella mañana era particularmente fría, durante la noche anterior la nieve caía con fuerza acompañada por un fuerte viento que dejó las ventanas de aquella casa empapadas y que al salir el sol se podían apreciar nubladas.

La casa pronto se llenó de voces y risas de aquellos que vivían en ella. Los niños corrían de un lado a otro jugando y hablando, estaban bien abrigados evitando que el aire entrara a sus cuerpos y los enfermara. A casa risa que soltaban, una pequeña nube de humo salía.

Pronto, dos niños en particular, pararon sus pasos mirando la vista medianamente borrosa del tranquilo paisaje de fuera de casa, con sus manos, limpiaron un poco de la ventana para apreciar mejor a la nieve caer.

Un suspiro salió del de ojos azules, llamando así la atención de la pequeña del listón y de la pelirroja que pasaba por ahí. Al ver la tristeza de los ojos del pequeño se acercó para saber que pasaba.

Al ver a su hermana mayor pasando por ahí trató de formar una pequeña sonrisa.

— ¿Qué pasa Phil, te sientes bien? — El menor asintió. A su lado, Shelly miró con preocupación a Emma quien les dio una sonrisa - ¿Estás nervioso?.

Asintió un poco: — ¿Crees que vengan?.

Sus ojos fueron bañados en un poco de tristeza, las lágrimas querían salir por parte de su amiga quién entendió a que se refería, Emma, por su parte, se mostró preocupada por las palabras y reacción de los pequeños.

— ¿Alguna vez han roto una promesa?  Ambos negaron — No tienen porque romper esta, ellos vendrán, ya verás.

— ¿Y si es el primer año en que lo pasamos sin ellos? — Susurró la pequeña quién se encontraba llorando.

— No tiene por qué ser así, ellos vendrán. Y no creo que les guste verlos tristes, ¿Por qué no vamos a ayudar al resto?. Vamos.

Ambos asintieron, mostrando una gran sonrisa y corrieron con su madre para ir a ayudar, Emma miró nuevamente por la ventana esperando llegaran como habían prometido.

Poco después del desayuno todos volvieron a sus actividades normales. Algunos salieron a jugar cerca de la casa siendo supervisados por la mayor, otros se quedaron dentro dibujando o leyendo.

Pasando la tarde, el cielo se tornó cálido, el sol se estaba ocultando dando una vista un tanto melancólica al lugar, la nieve era poca a esa hora y la temperatura había subido poco más que hace horas atrás.

Al dejar un poco de paso libre se acercaron a la puerta, esperando impacientes a que diera la hora en la que ellos llegaran, esperaban corriendo o sentados, hablando y riendo. Pronto, el cielo se hizo oscuro y las estrellas se asomaban. La noche llegaba en compañía del frío, por lo cuál todos tuvieron que ir a casa, manteniendo la esperanza de que llegaran para la cena.

Phil, en compañía de Shelly se encargaban de animar al resto, creyendo firmemente en las palabras que Emma les había dado en la mañana, el brillo en sus ojos se mantenía.

Al pasar un poco de tiempo y ver que la mayoría se desanimaba decidieron iniciar la cena, era bastante tarde y la gran mayoría se encontraba cabeceado por el sueño que se hacía presente en sus cuerpos.

Antes de que la cena iniciara el sonido de la puerta siendo tocada llamó la atención de todos, deteniendo sus acciones. Isabella salió del lugar bajo la curiosa mirada de los demás.

No había ningún ruido y la tención aumentaba cada vez más, pronto los pasos cercanos a la puerta del comedor se detuvieron, aumentando la espera, y finalmente vieron a los invitados de aquella cena por la cuál se esmeraron.

Lo primero que lograron ver fue un comedor muy bien decorado, los listones rojos con algunas guirnaldas. Las velas que estaban bien posicionadas le daban un toque único a aquella sala que se encontraba bañada en suspenso.

Las risas llenaron el lugar, todo volvió a su curso normal, las voces, los gritos, los pasos. Corriendo, abrazaron a los tres niños y a la adulta contentos de verlos después de unos meses de su partida. Las lágrimas también estaban presentes en aquella conmovedora escena esperada por todos.

— ¡Chicos, pensamos que no vendrían! — Emma se lanzó a los brazos de sus dos amigos mientras reía tratando de ocultar aquella sensación de llanto que estaba atorada en su pecho.

— ¡Lo sentimos mucho! — Se disculpó el albino.

— La tormenta de anoche nos complicó demasiado, tuvimos suerte de que el sol calentara lo suficiente para poder remover la nieve con facilidad — Sonrió nerviosa la de cabellos (color).

— Lo importante es que están aquí — Apoyó Gilda, todos sonrieron.

Se acomodaron en sus lugares, Isabella hablaba con Krone sobre el otro orfanato y Conny hablaba muy animada con el resto de los niños. La casa nuevamente estaba llena de aquella alegría tan característica de aquél cálido lugar al que le llamaban hogar.

—𖥸—

¡Feliz navidad a todos!.

Espero la estén pasando genial. Un abrazo virtual y mucho cariño <3.

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⏰ Last updated: Dec 25, 2020 ⏰

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𝗢𝗻𝗲 𝗦𝗵𝗼𝘁𝘀 - Yakusoku no NeverlandWhere stories live. Discover now