Lealtad

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- Van a entrar- dijo con voz preocupada, haciendo que Berlin girara otra vez para ver si Palermo había alcanzado a escuchar y si, su contacto con la mirada fue inmediato.

- ¿Qué? Por dónde...- dijo acercándose.

- Estoy contactando con Marsella, alisten todo, ya les diré más información- escuchándose algo entre cortado.

- Rápido, profesor- dijo Berlin- Llama a todos Martín, ya!. Palermo contactó a todos por el micrófono que tenían en caso de emergencia y los convocó a la biblioteca, en menos de 5 minutos estaban allí.

- Van a entrar, aún no sabemos como, alístense, las armas y todo están en las cajas, pónganse de a doble chalecos, carguen munición extra- proseguía Berlin- Palermo, contacta abajo y diles que sigan fundiendo, no pueden parar, Helsinki está encargado de arma pesada en la entrada del vestíbulo. Vamos, joder, rápido, rápido.- alistándose también. Berlín tenía algo de miedo, no quería estar mal con Martín preciso en ese momento que tenían que atacar.

-Profesor, información- recibiendo un silencio de respuesta.

-Profesor, me escucha- subiendo la voz- Sergio!!- sin ninguna respuesta.-Puta madre-tirando el micrófono.

Todos estaban asustados, estaban ciegos, pues podían entrar por enfrente, podrían hacerlo en helicópteros o por debajo de ellos, no lo sabían.

-Bien, calmémonos-dijo Nairobi para apaciguar el ambiente- Palermo tu conoces bien los planos del edificio piensa cuál es el lugar más débil.-

Pensando bien con un dedo en su boca, él solía hacer siempre que estaba concentrado, era algo inconsciente.

-La azotea- dijo-pueden entrar por la ventilación, pero hay muchas así que ser certero es complicado ya que unas se dirigen hacia las oficinas y otras a los baños, mandemos entonces dos allá, no creo que quieran entrar por la principal, saben que están ahí los rehenes- explicó rápidamente mientras miraba a todos sus compañeros.

- Tienes razón- respondió Berlín.

- Además Helsinki y yo estamos allá en caso de una emboscada con la ametralladora- dijo Tokio, apoyando la idea que estaba dando Palermo.

-Bogotá, Denver ustedes vayan y nos informan, cualquier movimiento quedan autorizados a disparar- dijo Berlín con toda seguridad.

- ¿Disparar?, el profesor dijo que nada de daño Berlín- dijo Tokio.

-Entonces que propones, que nos quedemos quietos mientras vienen y nos matan a todos, pues entonces le pondrás tu el pecho a las balas, querida, no lo quieres hacer porque si es así no te entregarán a Río- dijo Berlín desquiciado.

- Ya... vamos Tokio él tiene razón, tenemos que defendernos procurando no matar a nadie, pero no nos podemos negar a disparar- le dijo Nairobi tomándola del hombro.

-Bien, adelante- dijo Palermo mientras miró a Berlín, recordando lo que pasó hace un momento y que él indirectamente le estaba afirmando que el plan era de ellos.

Cada uno tomó las ventanas principales esperando cualquier movimiento de la policía, pendientes del llamado del profesor. Después de 10 minutos aproximadamente.

-Berlín, van a tirar gases por la ventilación, van a dormiros- dijo agitado como si estuviera corriendo.

-Recibido- Todos! Máscaras de humo, van a tirar gases, Bogotá, Denver bajen y todos vamos acorralarlos en el sótano- dijo al micrófono.

- Helsinki, coloca la ametralladora en el ascensor con Bogotá - escuchó a Palermo hablar, sacándole una sonrisa.-Denver conmigo, colocaremos explosivos alrededor de la habitación del sótano.

Soulmates (Martín and Andrés)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora