La manzana prohibida - Gilbert Blythe

Capítulo 12

— ¡Se encuentran muy radiantes hoy! - exclamó Bash viéndolos llegar.

— Pero que mujer tienes a lado. - le respondió Julieta abrazando a Mary.

— Si. - susurro su amiga.

Julieta la separó un poco para verla con los ojos lagrimosos.

Sonrió más volviendo a abrazarla.

— Ayer se vieron... - les recordó Bash.

— Igual la extrañaba. - le dijo Mary separándose del abrazo.

Julieta la miro con admiración, y se detuvo un segundo a mirar a su alrededor.

— Se fue con Anne. - le aviso Gilbert al verla ponerse preocupada.

— ¿Entramos? - pregunto Bash tomando a Mary del brazo, guiñándole un ojo a su amigo.

Gilbert carraspeó y le estiró el brazo a Julieta. Ella acepto enganchando sus brazos, entrando a la iglesia a sentarse.

— ¿No te ponen nerviosa? - le pregunto Gilbert cerca de su oído.

— ¿Las miradas? - pregunto mirando a su alrededor. — Siempre están presentes.

Gilbert asintió y sonrió al verla tan linda.

— ¿Ese es el profesor? - pregunto mirando a un hombre con un bigote gracioso.

— Sí. - dijo mirándolo.

— ¿Y ella la alumna...? - pregunto mirando a la entrada, estaba una joven con vestido blanco.

Escucharon como un rubio joven se acercaba al profesor y al cura, para informarles que le faltaba algo y ya entraba.

Gilbert asintió, sintiendo como se ponía tensa.

— Es muy jóven. - le dijo mirándolo.

Gilbert vio como su mirada se entristecía, no supo que decir solo tomo su mano haciéndole acaricias.

Anne se acercó a ellos, mirando a la mayor con duda. — ¿Puedes venir? - le pregunto mirando a Julieta.

Julieta asintió dudosa, soltándose de  Gilbert. — Ya vuelvo. - le aviso y fue tras la pelirroja.

— ¿Tienes algo usado? - le pregunto la joven a punto de casarse.

— ¿No te faltaba algo nuevo? - pregunto Beth dudando.

— No, era algo azul. - respondió una niña rellenita.

— Tranquilas, tengo de todo un poco. Será mejor que entren así, cuando ella entre no hay tanta gente en la entrada. - les dijo Julieta viendo a la joven rubia mirándola con súplica.

A los segundos ya las chicas entraron y quedaron solas.

— ¿Estás preparada? - le pregunto tomando una de sus manos.

— Claro que sí. - dijo con los ojos lagrimosos.

— Algo usado. - le pasó una pulsera que tenía bajo la manga. — Algo nuevo. - le pasó un sobrecito que tenía un collar. — No quería aparecer sin nada, por lo menos traer algo para la novia. - le explicó.

— Soy Prissy. - le dijo tomando las cosas que le dió.

— Soy Julieta. - le sonrió.

— Y algo azul. - le dijo poniendo sus manos en los bolsillos.

Prissy negó con la cabeza. — No, no me lo des por favor. - le dijo.

— Si no lo quieres hacer no lo hagas. - le dijo tomando una de sus manos.

— Ya arreglaron el trato. - le informo.

— ¿Y? - pregunto mirando a dentro de la iglesia que ya estaban nerviosos. — Si estás segura entra ahí, y sino sigue con tu vida. Eres joven todavía, toda una vida por delante. - le dijo y tomo de su bolsillo una rosita azul. — Me la dió una vez un amigo, cuando me di cuenta que no iba a ser lo que todos querían que fuera. - le dijo y sonrió con tristeza. — Tú decides tu camino, solo tú. Y si tienes un hombre que te quiere acompañar, bienvenido sea pero no que quiera que seas su sombra. Eres libre, eres mujer, eres lo que quieras ser. - lentamente soltó su mano para dejarla pensar sola, y entro a la iglesia.

Sintiendo que todas las miradas estaban en ella, Gilbert tomo su mano y la miro.

— ¿Estás bien? - pregunto.

— Todo esto es una mierda. - le dijo en tono bajo y resopló. — Estoy bien.

Los murmullos de callaron al ver a la novia entrar con un ramo de rosas en sus manos, y un hombre a su lado acompañándola.

Camino en paso lento mirando a todos, mirando más tiempo a Julieta que le sonrió para que tuviera seguridad.

Llegó a lado de su futuro esposo, y el cura empezó a dar la ceremonia.

— ¿Prissy? - le pregunto el profesor al no responder a la pregunta del cura.

Prissy miro a todos los presentes, deteniéndose en una mujer parecida a ella.

Soltó el ramo de sus manos parar agarrar su vestido y salió corriendo por la puerta, siendo seguida por sus amigas.

Todo quedó en silencio mientras todos miraban hacia el profesor.

El se acercó a los padres de Prissy exigiendo una explicación.

El joven rubio se acercó al profesor para señalar a Julieta y susurrarle algo.

— ¡Tú le has metido ideas! - exclamó enojado acercándose a la mayor Angelini.

Julieta lo miro con una ceja alzada. — ¿Yo? - pregunto sonriendo y negó. — Fíjese que habrá hecho usted para que ella quiera escapar de sus garras señor.

El sr. Philips dió un paso para estar frente a frente, viendo cómo la joven agarraba a Gilbert que se quería interponer.

— ¡Le ha llenado la cabeza! - dijo en tono alto.

— Señor calmese y respete que está hablando con una mujer. - le dijo Gilbert imponiéndose igual entre el medio.

— Ella no es una mujer, anda sola con una cría. ¡Es una mujerzuela! - le respondió enojado.

Julieta tomo la mano de Gilbert para que no haga ninguna locura.

Julieta se rió. — ¿Acaso le debo enseñar que es de mala educación hablar mal de una mujer? - le pregunto.

— Ya es suficiente. - hablo el padre de la joven.

— Eso porque no las educan como debe ser. - exclamó él profesor enojado.

— ¿Usted habla de educación? Por favor. - le dijo Julieta sonriendo.

El padre de la joven tomo del brazo a su ex nuero, para alejarlo de la mujer.

— Lindo intento de casamiento. ¿Nos vamos? - le pregunto a Gilbert que asintió y entrelazaron sus brazos para salir de la iglesia.

— Cada día me sorprendes más. - le confesó el joven.

— No me quieras defender, la próxima te golpeare. - le advirtió.

— Me sale solo perdón. - le dijo con una mueca. — Ahora entiendo el porqué mi padre me contaba que defendía a mamá de todo. - le comentó.

— ¿Y porqué? - pregunto con una sonrisa.

— Porque él quería que fuera igual con la persona que amará. - le confesó mirando al cielo.

Gilbert se sorprendió con el abrazo que Julieta le otorgó.

— Te quiero. - le dijo besando su mejilla.

— Yo te amo. - pensó Gilbert.

—💛—

24/04/21

Siempre me olvido de esta historia. F

Muchas gracias por leer 📖

Luana, cambio y fuera. -.