𝗗𝗲𝗹𝗶𝗰𝗮𝘁𝗲 ；Stiles Stilinski (Sin Editar)

08

-Entonces ¿Nuestro profesor de química está haciendo sacrificios humanos?- pregunté.

-Sonaba mejor en mi mente- dijo Stiles.

-De todos modos Harris tiene un aura maligna- dije yo.

-¿Y si es otra persona de la escuela? ¿Recuerdan a Matt? No sabíamos que mataba gente- dijo Scott.

Stiles se medio sentó y por consecuencia yo también lo hice.

-¿Perdón? Si sabíamos, lo dije desde el primer día- dijo Stiles.

-Si, pero nunca pensamos seriamente que fuera Matt. Se veía buena persona- dije yo.

Stiles me miró con el ceño fruncido.

-Yo hablaba en serio, muy en serio- dijo

-¿Y los otros tres?- pregunta Scott.

-La hermana de Derek, Cora. Nadie sabe nada de ella y es hermana de Derek. Luego, tu jefe- dijo mirando a Scott.

-¿Mi jefe?- preguntó.

-Si. Tu jefe. No me gusta para nada esa onda Obi-Wan que tiene. Me asusta- dijo Stiles.

Scott me miró en busca de una respuesta.

-Dios mío ¿Todavía no viste Star Wars?- pregunta Stiles sorprendido.

-Juro que si volvemos vivos, veré todas las películas- prometió Scott.

-Me voy a volver loco- dijo Stiles.

Se tiro mirando al techo.

-¿Quien era el último?- pregunta Scott.

-Lydia- respondió.

-No puede ser Lydia- dije yo.

-Estaba totalmente controlada por Peter, y no teníamos ni idea- dijo el.

-En ese caso es Peter controlando a Lydia- dije.

-Tienes razón- dijo Stiles.

Me tiré a su lado, y cerré mis ojos.

-¿Ya te vas a dormir?- pregunta Scott.

-No, solo quiero descansar un rato- dije.

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Estaba saliendo del baño, estaba por bañarme y había olvidado mi ropa.

-¿Estas bien?- pregunté

Scott salió de la habitación, ignorándome. Yo entré a la duche, y mientras me duchaba, miré hacia mis pies y el agua se tiñó de sangre, y la que caía sobre mi cabeza también. Salí corriendo y solo con una toalla puesta.

-¿Te encuentras bien?- Ese era Scott.

-Si...- dije mirando hacia el baño.

Camine hacia la cama y me senté allí.

A Scott le llegó una llamada y atendió, después de eso también empezó a actuar raro.

-Iré por Stiles- dije.

Salí de la habitación, no me importó estar en toalla. Camine por los pasillos hasta encontrarme a Isaac, pero también estaba raro.

-¿Isaac, estás bien?- pregunté.

Puse una mano en su hombro y la otra sostenía la toalla.

Él se volteó y me miró con los ojos amarillos. Se empezó a acercar, y yo retrocedí por instinto.

-No vas a escapar- dijo con voz grave.

Me tomó de ambos lados y me estampó contra la pared. Traté de usar esos nuevos poderes que tenía, pero al estar nerviosa y no saber controlarlos, no me salía. Isaac sacó sus garras y empezó a clavarlas en ambos costados de mi cuerpo.