¿Te odio o te amo? •Harry Styles• [TERMINADA]

Epilogo

*6 años después*
-Basta Edward, vas a ensuciarte y acabo de cambiarte-le dije a mi pequeño hijo, que con apenas 5 años de edad era todo un destructor.-corre, ve y dile a papi que traiga a Darcy.-le sonreí.

-¡Ti mami!-gritó y corrió hacia la habitación de la pequeña bebé.

Ya habían pasado 6 años desde la boda, y 12 desde que me pidió que fuera su novia, pero los sentimientos eran los mismos.
Hoy, con dos hijos hermosos y el mejor esposo del mundo, vivía más que feliz.

Después de casarnos, y de que terminara el viaje de luna de miel, descubrí que estaba embarazada, y un año después de la boda, nació mi pequeño Edward, una repicas exacta a su padre, pero con mis ojos azules. Dos años después nació Darcy, que es más parecida a mi, rubia, pero con los encantadores ojos verdes y la hermosa sonrisa de su padre, ella está a punto de cumplir sus tres añitos.
Mi esposo, Harry, fue el más feliz con la noticia de el embarazo, y ahora aún más con sus dos niños a los que ama.

Niall y Carly ya tienen una niña de 6 años, llamada Niarly, que es una mezcla de sus nombres. Es una pequeña lindura, con los ojos de Niall y su ternura, pero la sonrisa de Carly y las demás fracciones. Rubia y muy hermosa. La debilidad de su padre, Niall, que la trata tal cual como la princesa que es al igual que a su esposa.

Oí unos pasos en la escalera, pequeñitos y un poco torpes, y vi que eran Edward y Darcy, quien ya caminaba, bajando las escaleras tomados de las manos. Sonreí.
Detrás de ellos venía mi esposo, viéndolos al igual que yo y sonriendo.
Volteo a verme y me guiñó un ojo. Ni con los años cambio y no creo que lo haga, igual de coqueto que siempre.

Bajaron las escaleras y lo primero que hizo Hazza fue venir a darme un beso.

-Estas preciosa, amor.-susurro lentamente en mi oído, mientras me abrazaba por la cintura y me pegaba a su cuerpo, clavando su nariz en mi cuello.

-Gracias, pero no tanto como tu-le devolví el cumplido.

-¿Estoy preciosa? ¡Hay gracias!-dijo haciendo voz de mujer mientras rompía el hermoso momento.

Comencé a reír como loca y golpee su hombro.

-No tonto, tu eres precioso, hermoso, guapo, y sólo mío.-dije mientras lo abrazaba por el cuello y lo besaba con dulzura.

-Si. Sólo tuyo, y tu eres solo mía, amor.-dijo besándome de nuevo.

-Siempre-dije el asintió besándome.

Oímos unas pequeñas risitas a lado de nosotros y nos separamos.
Eran nuestros niños riendo.

-¡Mami y Papi e iedon un besho ai!-dijo Darcy, quien aún no hablaba muy bien, señalando sus labios.

-Si, iuuu-dijo Edward haciendo cara de asco.

Reímos.
*****
*60 años más tarde*
Me senté en la pequeña banca de mármol, dejando las flores en el pequeño florero que allí había.
Sin quererlo una lágrima se escapó de mi ojo.
Dios, como lo extrañaba.

-Mamá, Edward dijo que viene llegando, que Mariand no iba a poder venir porque tenía que cuidas de los gemelos, están enfermos.-me informo Darcy sentándose a mi lado.

-Si, esta bien.-dije, perdida en mis pensamientos.

Hoy, con 84 años de edad, y mis dos hijos ya grandes, con familias y nietos, aún así se sentía el vacío. Faltaba el.

Mi Harry, mi Hazza.

Eran increíble aún pensar que lo había perdió ya hace cinco años. Cinco años sin el, sin oír su ronca risa y sin ver su hermosa sonrisa.

El destino quiso separarnos, cuando inesperadamente sufrió un paro cardíaco fulminante que lo hizo morir al instante.

Era todo muy diferente sin el.

Aún recuerdo cuando me hice esa pregunta tan tonta.
"¿Te odio o te amo Hazza?"

Siempre lo ame, eso era obvio. A pesar que cuando fuimos adolescentes nos tratábamos horrible, pude sentir que siempre nos amamos. Sólo que no queríamos verlo.

Hoy por hoy, no me arrepiento de nada, ya que viví con el los 61 años más felices de mi vida, llenos de amor.

Y aunque el ya no esté conmigo, se que pronto nos encontraremos en el cielo.

Y hoy mi respuesta esa pregunta es;

Te amo, mi Hazza, y siempre lo haré.