"LA NOVIA DE MI PRIMO" | JENLISA

Vuelta de tuerca.

Nayeon estaba ocupada llamando por teléfono a su novia para pedirle que trajera algunas para curar a Lisa y Bambam. Mientras tanto, la pelinegra y yo estábamos en otra lucha.

- Jeongyeon vendrá a curarla.- Intento persuadirla.

Una parte de mi, había tenido suficiente está noche y no quería a Joy cerca, mucho menos de Lisa.

- No tienes nada que hacer aquí.- Digo con dureza y ella me mira con molestia.

- Si crees que la dejaré contigo luego de lo que hiciste, estás loca.- Sus ojos me atraviesan y parpadeo aturdida.

- ¿De qué hablas?.- La irritación en mi voz es más que notable, intento mantener un tono bajo para que Nayeon no escuche nada.

- Tu sabes de lo que hablo Kim.- Me dice con una sonrisa sarcastica.- La dejaste ir..- Me regaña.- Luego de que se abrió contigo.. Luego de verla ebria y dolida, la dejaste ir.- Sus palabras me golpean, como si fuera un bloque de concreto.- No sé qué es lo que Lisa vio en ti, pero te..

- Cierra la puta boca, o te juro que..

- No diré nada.- Me dice, pero no hay temor en su voz. Sólo una enorme nota de prejuicio.- Ni siquiera mereces saberlo. No después de lo que hiciste está noche..

Golpean la puerta suavemente y regreso mi mirada. Nayeon entra con cuidado, me mira a mi y luego a Bambam.

- Probablemente mañana sienta mucho dolor, dale un par de estás.- Dice y deja sobre mi mano una tira de pastillas.

- ¿Cómo está Lisa?.- Preguntó con un nudo creciente en mi garganta.

- Se despertó pero ya está dormida otra vez. Estará bien, sólo necesita descansar y tendrá que tomarlas.- Señala las pastillas.- Porque seguro le dolerá bastante el cuerpo..

- ¿Ya te vas?.- Preguntó con timidez.

- Mm si, pero puedo quedarme si quieres.- Me dice acercándose un poco más.

- No, no.- Niego rápidamente.- Necesitas descansar y yo igual.. Te llamaré si necesito algo.

Ella me abraza y de camino a la puerta principal, me repite una y otra vez que todo estará bien, que intente descansar y mañana las cosas estarán mejor.

Pero nada estará mejor, ni hoy ni mañana.

Me quedo apoyada en la puerta, sintiendo la tormenta que se avecina en mi cabeza. Un huracán imponente que amenaza con darme vuelta las ideas. Una realidad dolorosa.. que no voy a aeptar.

Subo uno a uno los peldaños de las escaleras, sin fuerza, sin energía. Completamente deshecha. Me detengo justo frente a su puerta, y mi corazón se agita cuando veo sus ojos abiertos y brillantes clavados en mi.

Está inmóvil, su cabeza ligeramente inclinada hacía mi dirección. Hay un leve moreton debajo de su párpado derecho y sobre las sabanas, descansa su mano bendada.

Mis pies permanecen clavados al suelo y mis ojos en ella. Siento mi garganta apretarse más y más. La recuerdo corriendo lejos de mi. Recuerdo las palabras de Joy. Todo debajo de mis pies parece temblar.

Armandome de valor, camino hasta ella, con su mirada puesta en mi todo el tiempo. Su piel tersa está magullada y sucia por la tirra. Se ve frágil y vulnerable. No es la Lisa que veo a diario. No. Está muchacha herida es mi constante recordatorio de que está noche no pudo haber sido peor.

- ¿Te sientes bien?.- Preguntó casi susurrando.

Las palabras salen más secas y frías de lo que quisiera y al parecer, de lo que ella quisiera también. Espero su respuesta que nunca llega. Sólo se queda en silencio, observandome. La veo mover su cabeza incomodamente sobre la almohada y me apresuro hasta su lado.

- Déjame ayudarte..

Ella no se niega a mi ayuda. Se permanece quieta mientras mis manos toman su cabello y lo acomoda sobre la almohada y luego acomodo ésta en mejor posición. A penas si me doy cuenta, que me he inclinado demasiado y mi rostro está más cerca del suyo.

Cierra sus ojos con fuerza, como si quisiera no tenerme a esa distancia y mi corazón se sacude aún más, una vez que siento su mano llegar a mi cara. El latido aturde mis oídos, pero no me muevo, incluso cuando abre sus ojos y estos sólo tiene una dirección.

Instintivamente, siento la necesidad de humecer mis labios y siento su pulgar apretando en mi mejilla. Su respiración se vuelve pesada y mi cuello comienza a arder. Trago forzosamente, cuando soy consciente de que mis ojos también están mirando a los suyos.

Y lo detengo.

Tomo su mano, con cuidado de no apretarla, y la aparto de mi, mientras recuperó mi postura.

- Estaré en mi cuarto, por si necesitas algo.- No pasó por alto el hecho de que ella desvía su mirada hacía otro lado del cuarto. Y se voltea.- Buenas noches.

Ella no me saluda.

Y la noche por fin termina.

La mañana siguiente, me levanto algo tarde y voy directo al cuarto de Bambam, y noto que la puerta de Lisa está cerrada. Mi novio se despierta pasado el medió día, con un dolor terrible en su cuerpo y un enorme regaño de mi parte.

Le doy los calmantes, tal como Nayeon me indicó, también observó que faltan algunas..

Lisa..

En ese domingo frío, ella no se asoma. Yo tampoco voy a buscarla. Me la paso recostada junto a Bambam, viendo películas en su móvil, pero sin ignorar los pasos que van del corredor hacía el baño o la cocina.

Por la noche, cuando bajamos a cenar, tampoco la veo. Bambam se atreve a ir a su cuarto y permanece allí durante largo rato.

Me pregunto ¿Cómo puede hablarle con tanta normalidad?, cuando no yo  puedo siquiera mirarlo sin recordar todo.

No la veo.

Tampoco el lunes.

Ni el martes o el miércoles. 

Falta a clases, a causa de sus golpes. O eso me dice Bambam. Como estudiante becada, por una riña así, podría perder todo. Falta por precaución.

Tampoco la cruzo en casa. No sé cómo está, o si está mejor. No sé si su cara ya sano, o si su mano continua herida. No sé si le duele el cuerpo o si le han quedado moretones.

No sé nada.

Sólo sé que cuando llego el viernes por la tarde a casa, luego de haber pasado todo el jodido día pensando en ella, no estoy lista para lo que me espera.

Cuando entro, Bambam está en el sillon, con la mirada perdida y sus ojos hinchados. Mi respiración se corta, mientras camino a él.

Se aferra a mi y llora sobre mi hombro desconsolado, y un asqueroso presentimiento me invade cuando veo al lado de las escaleras, un par de maletas descansando.

- Jiyong tuvo un infarto..- Dice sorbiendo la nariz.- No saben si sobrevivirá..- Mi corazón se comprime.

Reprimo un quejido con mi mano. Puedo imaginar el desenlace de todo esto, pero me permito estar en la ignorancia hasta que Bambam no lo diga.

Y lo dice.

- Lisa ya preparó todo, volverá está noche a Tailandia.

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Y estamos más y más cerca.

No les diré cuánto. Sólo esperenlo.

Nos vemos en la próxima actualización!!

Love G.