Camino de Salvación (Homoerótica)

Capitulo 1.

Caín estaba sobre los tejados de la ciudad, las hojas caían y el viento soplaba lento pero frío, sólo que él no lo sentía.

Hacía ya cincuenta que le habian encargado a su protegido y setenta desde su conversión, aún debía hallarlo cuanto antes si quería vencer a Castiel, debían hallar la Lanza del Destino y enviarlo al otro mundo hasta que mil años después ese ciclo vital volviera a cumplirse.

No tenía ni la más mínima idea de quién podria ser su protegido, le habían dicho que despertaría en una noche de luna llena en medio de una situación límite, él obviamente sentirá a su protegido e iría hasta él. Desde luego no sabe que situación es la que pasará así que debe tener mucho cuidado.

Traía una gabardina,el cabello algo largo y negro, sus ojos eran de color pardo muy bonitos, zapatos de diseñador y unos jeans algo ajustados.

Era tarde en la noche y de vez en cuando hacía una parada para poder buscar mentalmente a su Protegido. Vio a una pareja de la mano caminando y platicando sobre el nombre que le pondrían al bebé, y a juzgar por el vientre de la mujer la misma llevaba unos ocho meses de embarazo.

La plaza estaba solitaria, la noche era cálida y el viento soplaba apenas, en medio del parque había una fuente de agua con tres doncellas como escultura, una de ellas parecía cantar, otra tocaba la lira y otra la flauta. Había bancos desocupados, ardillas subiendo por los árboles y jugando.

Recorrió un poco más hasta entrada la madrugada pero nada, de nuevo sin rastros de él.

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Sabeth no podía conciliar el sueño aún, su exámen de pasado mañana era de astronomía y uno de los más difíciles, sentado en su silla con la lámpara prendrida, unas cuantas tazas de café yacían a su lado cerca de sus varios libros de astronomía, mañana tenía exámen de literatura, allí debía estudiar de todo, Barroco, Romanticismo y tantos otros, estaba exhausto pero debía estudiar si quería pasar de curso.

Sabeth se echó hacia atrás restregándose los ojos con el dorso de la mano y suspiró pesado. Miró su celular y eran ya las 03:12 de la madrugada y era de lo peor estar despierto a esas horas, era inaudito. Apenas llevaban tres meses de comenzadas las clases y ya les daban exámenes de aquí y allá, pero no se desesperaba, con sus amigos Jane y Peter todo estaba bien.

Su celular vibró y lo tomó en manos, era un mensaje de Jane.

*Querido príncipe ¿sigues despierto?* 

Sabeth rió ante su mensaje y respondió.

*Tan despierto como hace media hora, Mi Lady*

Todas esas costumbres las agarraban de sus clases de teatro, era algo que compartían los dos y claro, Peter también.

*¿Todo listo para el exámen? Yo sigo tratando de que algo se me grabe, aunque diría que es algo así como actuar...*

*Eso si, tienes razón Mi Lady ¿Peter ha estudiado algo?*

*Vería en su casa pero no responde a las pedradas, tal vez se durmió*

Jane y Peter eran vecinos, uno al lado de otro y les era fácil comunicarse, solo que Peter no contaba con teléfono celular por razones desconocidas y no se comunicaban a menos que fuera en el instituto, a través del teléfono común de su casa o yendo hasta en persona hasta su vivienda. De vez en cuando se reunían para trasnochar y ver películas. Sabeth amaba su vida tal y como estaba, aunque no tenía padres ya que ellos habían muerto hacía, ya tiempo, cuando él era muy pequeño, tanto que ni recordaba sus caras, solo tenía una fotografía borrosa que sinceramente tampoco recordaba cómo había llegado a sus manos.