¿Y si te digo que te extraño? [EN REVISIÓN]

Epílogo

*Holiwis. Desde aquí te doy una recomendación. Los capítulos están desordenados porque wattpad esta loco, si bb, te recomiendo que los busques. Igual está enumerados beisa. Disfrute no más. *

☀️Dedicatoria: Isabe_l

ALLAN:

—¡Ey! —Marcos me dio una palmada en la espalda. Paso su bufanda por el cuello sonriendo en grande. —¿Y Juls?  No me digas que te dejo plantado, esa chica es mala, Allan. —alzo ambas cejas con picardía queriendo molestar.

Le di un golpe en el hombro —Juls no es así. Esta allá, mira. —señale.

La pista era el lugar donde trabaja Juls. Siempre solemos reunirnos aquí, me encanta ver como patina sobre el hielo al ritmo de una música, mientras una tierna sonrisa la acompaña.

Además que hay chocolate caliente en la cabina de empelados, aunque no sea uno, Juls me ha ayudado a colarme en muchas ocasiones.

Esto es lo mejor de invierno.

Me gustaba pasar tiempo con ella, es de calidad. Aunque el verano este lejos de nuestros planes.

La rubia dio un par de vueltas por la pista adueñándose del lugar. Estiro sus manos flexionando sus rodillas, tomando algo de impulso dio un salto elevándose por segundos.

—Lo hace bien —arqueo la ceja —Eres afortunado ¿lo sabías? —asenti —¡Ohh viene acá!

Puse las manos en la baranda regalándole una enorme sonrisa.

Juls paso sus manos con guantes por mi cuello mirando me con esa calidez que derrite mi mundo.

—Hola.

—Allan.

Trague en seco. Sin aviso Juls junto sus labios contra los míos en un suave beso que provocaba estragos en mi piel. Sin embargo, Marcos era el mal tercio que estorbaba en ambos.

Tociendo falso Juls se separó de mis labios —¿Qué quieres Marco? —arqueo la ceja con molestia.

La mire de reojo. Sus ojos hacían juego con los míos, estaban llenos de un azul exquisito que me daba ganas de hundirme en ellos.

Así sea un instante, así sea toda la vida.

—Me lo estás quitando, —paso su brazo por mi hombro.

—Corrección. No los estás quitando.

Bufie al ver a Joaquín a lado de Marco. Me di una palmada mental; Juls sonreían, y mientras lo hacía, esos hoyuelos aparecieron.

—¿Por? Es mi novio.

—¡Por eso mismo! —chillo Marco —Ya no es como antes Juls, antes eramos tres —saco tres dedos dando referencia a lo que decía —tres, la otra semana nos dejo plantados a mí y a Joaquín por culpa tuya.

—¿Y que? Teníamos que elegir el lugar de la recepción Marco —jalo de su cachete —Eres un pesado hermano y tu Jo consiguete una novia, desde que te conozco no te he visto con nadie.