Liberty University (l.s) | TERMINADA

27

Es una mierda cuando la gente olvida tu cumpleaños, pero de alguna forma es mucho más triste y preocupante cuando tú mismo te olvidas de tu cumpleaños.

Ese era el caso de Harry. Era 1 de febrero y no podía ni siquiera sonreír, su novio estaba desaparecido, se sentía culpable, horrible, miserable y sobre todo preocupado.

Ya había pasado un día completo desde que no sabían nada de Louis. Todo había salido terrible desde que se dio cuenta de que el omega no estaba en el estacionamiento. De pura desesperación llegó a la habitación de Niall informando que Louis estaba desaparecido con gritos desgarradores. Se sintió peor de lo que se había sentido nunca cuando Niall gritó y empezó a quejarse de dolor en su vientre, mucha sangre salía entre sus piernas y enfermeras llegaron a ayudar, pidiéndole a todos que se fueran inmediatamente.

Todavía no sabían nada sobre Niall desde el día anterior pero Harry se sentía miserable, si algo llegaba a pasar iba a tener la muerte de un bebé sobre sus hombros, ya tenía suficiente peso en ellos al saber que no pudo proteger a Louis.

No pudo proteger a nadie.

Jay y Lottie estaban ayudando a Harry a pegar volantes con una foto de Louis  por toda la ciudad. Habían intentado ir a la estación a reportarlo desaparecido pero los policías les dijeron que tenían que esperar 42 horas para comenzar su búsqueda. Harry no iba a esperar unas malditas 42 horas para comenzar a buscar a su omega.

Cualquiera que estuviera viendo a Harry pegar los volantes diría que es un poco exagerado comenzar a buscar a alguien que ni siquiera es un familiar después de tan poco tiempo desaparecido, pero esa gente no entiende como es perder a alguien que te importa, sentir que que en un parpadeo ya no estaba y que te pique la piel por no poder hacer nada más que buscar y seguir buscando.

Estaba ya atardeciendo y aún no sabían por dónde empezar a buscar a Louis si quiera. Lottie y Harry habían estado entregando volantes todo el día sin parar, Jay no pudo hacer lo mismo, saber que su pequeño hijito estaba en peligro había sido demasiado para ella, solo pudo entregar volantes por unas horas y luego tuvo que irse a descansar, Lottie pensaba seguir los pasos de su madre, puesto que ni siquiera habían tenido tiempo de comer correctamente en todo el día pero Harry parecía no poder cansarse nunca, ya había entregado al rededor de 200 volantes y sabía que aún no era suficiente, solo iba a ser suficiente cuando Louis estuviera entre sus brazos nuevamente.

-Hey, creo que deberíamos ir a comer a algo o a dormir un poco. No dormiste nada anoche- le dijo Lottie cuando ya estaba al lado de Harry.

Harry suspiró, claro que estaba cansado pero de alguna forma sabía que descansar lo mataría, el sentirse impotente era algo que no podía soportar.

-Si quieres ve tú, Lottie. Solo entregaré unos cuantos más por la estación de autobuses e iré a comer con ustedes- Harry sonrió sin ganas y abrazó a Lottie.

Ella sonrió con pesadez y llamó a un taxi para que la llevara al hotel donde ella y su madre se estaban quedando mientras Louis no aparecía.

Harry continuó entregando y pegando volantes con la foto de Louis y los contactos de Jay y Lottie en ellos por unos minutos más pero hubo un momento en que ya no pudo. Estaba tan cansado, física y mentalmente.

No pudo evitar detenerse a ver la foto del volante, en ella salía Louis en su primer día de clases ese año, unos días antes de que él y Harry se volvieran a encontrar.

Viendo la foto de Louis lo hizo darse cuenta de que eso en serio estaba pasando, su omega de verdad estaba en peligro e incluso existía la posibilidad de que no volviera a ver su sonrisa hermosa de nuevo.