T2.Cap6

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[Narra Levi]

Había salido con Claude a beber para desahogarme. Lo mejor para Eren y para mí era olvidarnos el uno al otro, o comenzaríamos a jodernos la vida. Él estaba prometido con Historia, e interponerme en medio solo era egoísta de mi parte así que no quería hacerlo. Además debía superarle aunque eso me resultaba muy difícil. Por eso fue que salí a beber con Claude, para despejarme un poco y tratar de pensar que debía hacer. Confiar en mi cabeza o en mi corazón.

—Levi, ¿cómo estas? Tenía ganas de verte, siempre me llamaste la atención.—me sonrió cálidamente, realmente era todo un caballero.

—¡Claude! Hoy quisiera centrarme en hablar conitgo, beber y olvidarme de lo demás, pero mañana debo trabajar.—suspiré y el revolvió mi pelo un poco.

—Hey, yo te llevaré a casa. No te preocupes, puedes confiar en mí.— nos sentamos en una mesa y comencé a beber.

Varias bebidas después mi cabeza dolía y me coloqué encima de Claude, moviendo mis caderas sobre su miembro, tratando de calentarle. Eso me apetecía ahora, pues estaba muy borracho. Entonces uní mis labios con los suyos comenzando un beso. A mi cabeza venían imágenes de Eren, quería que me follase. Que me follase como él sabía hacerlo. ¿Podría utilizar yo a Claude para mis propias fantasías?

Todo se volvía más caliente, hasta que alguien me apartó de Claude y gritó enfadado. Eren. Espera... ¿¡Eren!? ¿Que hacía aquí? Mis ojos se abrieron como platos mientras observaba la pelea que ambos habían empezado. Sentía todo dar vueltas y cerré mis ojos algo mareado. Sentí unos brazos fuertes cargarme, y el aroma de Eren penetrar en mis orificios nasales. Sus fuertes brazos, su cuello, su forma de tomarme. Era sin duda él. Hurgó en mis bolsillos y tomó las llaves abriendo y entrando en mi piso.

—Eren... ¿Que has hecho?—susurré algo mareado.

—Levi... no me gusta que estés con él. Solo te quiere para tener sexo.—le noté molesto y preocupado por mí.

—¿Hay algún problema con eso? Quería que me follara... muy fuerte. Quería que me follara tan rudo como tú. Tú follas muy bien, Eren.—ya no sabía ni lo que decía.—Fóllame hasta olvidar mi nombre, ahora es tu culpa que ande caliente.

Eso le debió pillar por sorpresa, cuando me quité los pantalones y empecé a tocar mi miembro, estimulándolo mientras gemía.

—A-ah! Eren... mm, Eren quiero más. Hazme... Ahh... hazme todo lo que quieras.—que vergüenza, estaba diciendo todo eso frente a Eren.

Pensé que se iría, o que trataría de calmarme para luego irse. Pero se acercó a mí y unió nuestros labios. Su mano bajó hasta mi miembro y comenzó a tocarlo, realmente sabía donde hacerme sentir bien. Como si se acordara de mi cuerpo a la perfección, incluso si yo sabía que no era así.

Sentía todo mi cuerpo temblar, me sonrojé de vergüenza y traté de no gemir y hacerlo bajito. Me había sorprendido su actitud, pero sus ojos verdes se habían oscurecido y acto seguido me ordenó.

—No se te ocurra bajar el volumen ahora, pequeña perra. Gime bien alto mi nombre, y dime que se siente bien.—su voz sonaba grave y erótica. Me estaba volviendo loco con solo una masturbación de su parte, pero hacía 4 años que no me tocaba y mi cuerpo le necesitaba.

Obedecí su orden, comenzando a gemir alto y su nombre. Jadeaba y me aferré a su camisa fuerte y sonrojado por como me humillaba y lo mucho que me gustaba eso. Pronto logré correrme en su mano y Eren me sonrió.

—Creo que empiezo a comprender cual era nuestra relación en el pasado. ¿Fuiste tú quién te alejaste? No creo que perdiéramos contacto por mí. Y como veo ahora, no puedes resistirte a mí. ¿Me equivoco?—su maldita sonrisa solo le hacía ver mucho mejor. Llevó su mano a su boca, lamiendo el líquido blanco que yo había expulsado hace apenas segundos.

—E-eren...—susurré y respiré agitado.

—Deberías descansar, mañana tienes trabajo. Debo irme, enano. Prométeme que no te juntarás mucho con ese tipo.—me mostró esa jodida sonrisa tan irresistible y soltó su pelo guiñándome el ojo.

Me quedé mirando como cerraba la puerta mientras mi cuerpo se volvía loco por sentirle. Sabía como tenerme a sus pies, tanto sexual, como románticamente.

Aún podía sentir sus manos sobre su miembro, y sus roncas palabras en mi cabeza, su aliento en mi oído susurrándome... mi mente daba vueltas sobre todo lo ocurrido en apenas esta semana. Nos habíamos besado, además me había tocado. Se había puesto celoso de otro hombre que me besaba, ¿eso significaba algo?

Mi chico favorito. EreRi|SNKOnde as histórias ganham vida. Descobre agora