Capitulo XXII

862 86 32
                                    

Los pasos de Jin Ling resonaban por todo el pasillo, si bien al principio habían sido rápidos para intentar alcanzar a su JiuJiu después de doblar una esquina empezaron a bajar de ritmo hasta ser pasos bastante lentos. Eran como su coraje.

Cuando su JiuJiu se había levantado y largado repentinamente de la reunión su primer pensamiento fue disculparse y correr a seguirlo, su comportamiento se le hizo extraño, había esperado quizá algún grito dirigido a Wei Wuxian pero no que solo se fuera sin decir más, sin importarle en lo más mínimo la mirada asesina y molesta que la Lluvia Carmesí le había dirigido, la cual había hecho que cualquiera temblara de miedo. Pero el solo se fue sin mirar atrás y casi corriendo.

Fue después de que perdió su espalda en aquel pasillo que se dio cuenta de algo.

¿Qué lío tendría su mente?

Jin Ling era una de las personas mas cercanas a Jiang Cheng, había sido lo más parecido a una figura paterna después de todo, por lo tanto estaba muy consciente de todo el dolor y la pena que lo rodeaba aunque su JiuJiu nunca había mencionado ese dolor en público.

El dolor de Jiang Cheng se mostraría con él sentado en el salón ancestral por horas frente a las placas de su familia cuando la noche caía, lo mostraría en su mirada nostálgica cada Qingming, en sus dedos temblorosos cada vez que agarraba a Chengqing cuando pensaba que nadie lo miraba y quizás la más visiblemente en cada vez que miraba fijamente a su sobrino. Jiang Cheng no mostraba sus sentimientos en palabras, era terco... Pero él era humano.

Sus pasos pararon a solo unos metros del cuarto donde se quedaba su tío, Jin Ling sabía perfectamente que sus tíos aún no arreglaban sus problemas, si bien la atmósfera entre ellos era menos tensa no regresaría a lo que tenían, Wei Wuxian había decidido dejar todo lo que ocurrió en el pasado y empezar poco a poco en esta nueva vida, tenía arrepentimientos y consideraba que no tenia ningún derecho en volver a ser hermano de Jiang Cheng, que su relación nunca se repondría.

El caso de Jiang Cheng era más complicado, una parte de él aún no perdonaba al chico por todo, el resentimiento de años seguirá allí... Pero otra parte... Seguía siendo su hermano. Había visto con sus propios ojos como los cadáveres lo empezaron a devorar hasta no dejar nada de él.

Así Jin Ling se quedó mirando fijamente el pasillo, sabía que la cabeza de su tío estaría llena de cosas, molestias, arrepentimientos. Jin Ling aún era joven, no entendía el dolor de su JiuJiu, pero no dejaría que su familia siguiera así. Respiro profundamente y con mirada decidida camino hasta la puerta del cuarto de su tío y tocó con determinación.

- JiuJiu, soy Jin Ling -

Nadie le contestó.

Jin Ling miró la puerta con el ceño fruncido, no había reunido todo su coraje para ser ignorado, no señor, incluso si perdía sus piernas hablaría con él. Tomó aire una vez más.

- JiuJiu, voy a entrar - Abrió la puerta ignorando todo sentido de supervivencia en su cabeza y dio un paso adentro.

El cuarto estaba iluminado por una única vela puesta en una pequeña mesa en el centro del cuarto, Jiang Cheng estaba sentado en el piso mirando fijamente la llama moverse, no separó la mirada en lo absoluto ante la intromisión de su sobrino a su habitación. Jin Ling trago saliva, estaba empezando a perder el coraje de hace un rato.

- JiuJi...-

- ¿Esos son los modales de un líder de la secta? - La voz de Jiang Wangyi no mostraba ninguna emoción. - Entrar al cuarto de alguien sin ser invitado -

- Lamento mi falta de respeto... - Sintió la vergüenza subir por su cuerpo, pero no te puedes acobardar, no ahora. - Pero... Es hipócrita de tu parte alegarme por tan acción cuando tu te fuiste del salón sin mostrar algún respeto -

Memories of those 13 years[CANCELADA]Where stories live. Discover now