ROUTINE🔄 [KookTae]

• Tragedia •

Taehyung le miraba entre molesto y desepcionando, con sus ojitos a punto de derramar lágrimas y Jungkook queria tanto llenarlo de besos y decirle que jamás olvidaría algo tan importante como su aniversario.

“Aún no acaba el día, podemos ir a cenar a algún lug...”

“No quiero nada ya, Jeon” se levantó del sillón y se dirigió a llorar a su habitación.

Jungkook entró en desesperación, ahora sí porque si no lo convencía de salir, el plan se arruinaría. Así que fue rápido con su precioso y se acercó lentamente, el cuerpo de Taehyung estaba acurrucado y podía escuchar los apenas audibles hipidos que soltaba. Se acostó a su lado y lo abrazó con delicadeza por la cintura.

“Mi amor, mi borreguito... por favor perdona a este pobre tonto que te ama con locura. Bebé ” llamó al otro.

Cuando Taehyung se giró pudo ver sus ojitos llenos de lágrimas y se prometió no volver a hacerle ese tipo de bromas, porque Taehyung amaba festejar su relación. Aunque ahora actuaba como un chiquillo berrinchudo, y con justa razón.

“Eres un tonto. Me dolió mucho que te fueras hoy así, sin felicitarnos”

“No va a volver a pasar, lo prometo corazón. Por favor déjame remediarlo”

Taehyung pareció pensarlo y una vez retiró las lágrimas que resbalaban por sus mejillas sonrió juguetón.
“Bueno, pero dame muchos besitos”

Jungkook se rió y comenzó a dejar besos sobre todo el rostro ajeno y en los labios se tomó su tiempo de saborearlos. Estaba seguro de querer pasar el resto de su vida junto a ese precioso ángel al que amaba con locura. Estaba listo para tener una vida hermosa junto a Taehyung y nada podía impedírselo.

Una vez se subieron al auto, mientras Jungkook conducía perdido en sus pensamientos, Taehyung se dio cuenta de que estaban yendo demasiado lejos.

“Jungkook, te pasaste todos los restaurantes. ¿Dónde vamos a comer?”

Jungkook le miró sonriente “Es uno mas especial, pero aún falta camino ”

“¿Cómo que uno especial? Entonces ¿Ya lo habías reservado?”

“Mi amor, no seas impaciente. Ya lo verás”

“De acuerdo, pero que sepas que estás actuando muy raro”

Una vez llegaron al lugar Jungkook le extendió una pañoleta al rubio que lo miró confundido “¿Qué es eso?”

“Debes cubrir tus preciosos ojos, amor”

“¿Vas a dejarme aquí?” inquirió sorprendido.

“¿Qué? Eso jamás, mi amor. Jamás voy a dejarte ”

“De acuerdo” tomó dubitativo la pañoleta

Una vez se cubrió los ojos, Jungkook le ayudó a salir del auto, guiándolo dentro del lugar donde sus amigos se encontraban.

“Dios... Jungkook donde sea una broma te dejo en abstinencia”

“Tranquilo...” rió.

Hizo la seña a Jimin para que le ayudara a sacarle la venda a Taehyung mientras él se hincaba frente al rubio y sostenía la caja.

Cuando quitaron la venda de sus ojos Taehyung divisó un hermoso jardín lleno de luces doradas, a sus amigos y cuando bajó la vista la emoción no tardó en llegar.