Bentley no dijo nada por lo que se sintieron horas mientras el parpadeaba unas cuantas veces antes de dejar escapar una aguda risa, una que atravesó los oídos de Justin. "Tu y yo sabemos que eso es una burda mentira."

"Siempre es una posibilidad," Justin se encogió de hombros, sus manos chocaron en su regazo. "Vamos a ser honestos Bentley, tu y tu equipo haréis cualquier cosa para aseguraos de que estoy de vuelta en la cárcel, encerrado para siempre."

"Se lo que esta en juego aquí. Lo que esta pasando en la ciudad va a conducir no solo a una, si no a muchas muertes. Estoy tratando de evitar que cometas el mayor error de tu vida--"

"El único error que podría hacer es dejar a ese bastardo vivo!" Justin gruñó furiosamente mientras el empujaba su sitio, su pecho subiendo. "Por el amor de Dios, ¿Crees que el es inocente o algo? Tu no sabes que co*ño ha estado haciendo. Todo por lo que vosotros, jodidos idi*otas, os preocupáis es por mi!" Justin empujó un dedo contra su pecho, enfatizando su punto. "Bueno, déjame decirte algo Bentley," El gruñó con ira, "No soy la amenaza aquí más. El la es." Dejando esas palabras escaparse de sus labios, Justin se congeló.

Limpiándose su boca con la palma de su mano, Justin la envolvió alrededor de la parte trasera de su cuello mientras el frotaba furiosamente la piel, sin ser capaz de creer lo que el acababa de decir. "Joder," El lanzó su cabeza hacia atrás, maldiciendo el día en el que se involucró con esto.

Bentley no dijo una palabra mientras el se quedaba allí de pie, mirando a Justin con una expresión en blanco. El no sabía que hacer con la información que la acababan de dar. De todos los años que el ha conocido a Justin, ni siquiera una vez había admitido algo así.

"Si el muere," Justin se burló, una perezosa sonrisa se colocaba en sus labios mientras se encontraba con los ojos de Bentley, pura exasperación brotaba de los soles de los suyos, "Es por que él lo merece."

Abriendo su boca para decir algo, Bentley fue interrumpido cuando el Oficial Carmelo hizo su camino dentro de la cocina. "No encontramos nada." Él dijo, "Comprobamos cada centímetro del lugar, abrimos los armarios en cada habitación, miramos detrás de cada espacio dado para almacenar cualquier cosa. Miramos debajo de los colchones y dentro de los armarios del baño. También comprobamos el ático; no vimos nada fuera de lo normal."

"¿Por que no estoy sorprendido?" Justin soltó sarcásticamente mientras él rodaba sus ojos, "¿Habéis acabado ahora? ¿Podéis marchaos de mi jodida casa?"

Antes de que Carmelo tuviera el tiempo para responder, el Oficial Bentley se puso en medio de ello, "Mueve al equipo y esperad afuera. Tengo unas cuantas cosas mas que necesito discutir con el Sr. Bieber aquí antes de que volvamos a la oficina."

Asintiendo, Carmelo se dirigió derecho hacia el living, su voz resonó por todo el lugar mientras el le gritaba a los otros que hicieran lo que él fue dirigido a hacer.

"No tenemos nada mas que hablar," Justin dijo, "Viniste aquí para que tus matones destrozaran el lugar y ya has dicho lo que tenías que decir. Ahora, te sugiero que te marches a menos que la orden tuya diga que esta bien que puedas acosar al otro--lo que, estoy muy seguro que no dice." Retirándose de Bentley con sus brazos sostenidos en señal de rendición, el se volvió sobre los tacones de sus zapatos para alejarse.

"Fuiste capaz de tener tres años por homicidio cuando se trató de Lucas Delgado, pero esta vez tendrás cadena perpetua si haces algo como tocar a Lyndon Mathews."

Justin se detuvo a mitad de camino mientras el se daba la vuelta en lo que Bentley tenía que decir.

"Fuiste salvado antes, pero no en esta ocasión. Si Lyndon acaba muerto, tu serás nuestro principal sospechoso y serás cargado por asesinato de primer grado." El forzó sus palabras, asegurándose de que Justin escuchaba cada una tan clara como el día.

Danger's Back (Español) (Temporada 1 y 2)Where stories live. Discover now