Capitulo 4: ¿Tienes que ir?

3.2K 169 19
                                    

Su lengua buscaba a la mía de una manera tan especial, su mano se posó en mi cabeza, guiándome para que el beso fuera aún mucho más perfecto. Sentía una gran adrenalina recorrer mi cuerpo, al momento que sentí que su otra mano comenzó a acariciar mi pierna de un modo excitante. De un momento para otro nos encontrábamos acostados en el gran sofá de la sala, Riker encima de mí, sin dejar caer todo su peso. Nuestro beso empezó a cambiar de tono, mis brazos rodearon rápidamente el cuello de Riker, mientras que sus manos fueron a parar a mi cintura. Aunque poco a poco fui sintiendo una de sus manos entrar bajo mi blusa.

Su mano era tan cálida, bajo sus labios hasta llegar a mi cuello y besarlo sutilmente. Mientras mi cuello era devorado por él, su mano encontró el broche de mi sostén e inmediatamente lo soltó, luego paso su mano por toda mi espalda y me estremecí por completo. “N-no…" dije entre pequeños gemidos que salían de mis labios. “Vamos... sé que te gusta” Su mano bajo mi blusa del hombro dándole besos.

“Sabes que me deseas así como te deseo”

Era cierto, él me estaba deseando. Su cuerpo estaba tan pegado a mí, que podía sentir su miembro preparándose.

- No… -  dije separándome de su beso - Esto…esto no está bien…. Tú y yo no somos nada

Sonrió y tomo mis muñecas llevándolas arriba de mi cabeza con mucha fuerza.

- Suéltame!! - tratando de záfame.

Pude notar como veía mi busto subir y bajar por la impresión.

- Podemos ser amantes preciosa…. - mordió su labio - Yo te daré diario lo que tu marido no pueda…

Sonrió triunfal, pues me había quedado callada, tratando de asimilar sus palabras. Volvió a besarme sin soltar mis manos. Trate de aguantar el no besarlo, pero lo hacía tan bien, que caí en sus brazos fácilmente. Soltó mis manos de pronto y así pude tomarlo del cuello mientras nos besábamos. Otra vez volvió a meter su mano por mi blusa, pero esta vez tomo uno de mis senos apretándolo con fuerza. La sala de pronto se convirtió en un lugar mágico, y apasionado, solo podían oírse nuestros ligeros gemidos… Aparte claro de la madera quemándose en la chimenea.

Empezó a hacer cada vez más calor, deseando con ansias quitarnos cada prenda. De repente y sin haber reaccionado antes, me encontraba sin mi blusa, y tampoco tenía mi sostén. En cambio Riker solo se había quitado la playera. Bajo sus labios a mis senos y comenzó a inspeccionarlos con su lengua, incluso metió sus dientes en este juego. Inmediatamente mis pezones se endurecieron por su tacto. “R-Riker” pronuncie gimiendo y tomando su cabello rubio.

“Ahora sé que me deseas princesa… ahora sabrás lo que es bueno”

Se separó de mí y bajo sus manos a mi pantalón que fue desabrochando poco a poco, dejándose ver mi braga, Riker se mordió su labio, sus manos se fueron a los costados de mi cintura, queriendo bajar mi pantalón. Un ruido extraño hiso que regresara a la realidad… “RIKER DETENTE” dije casi en grito.

- ¿Que sucede?

- Es el auto de Jason…

- ¿Que? - dijo sorprendido.

- Vamos - me senté en el sofá - No puede verte aquí… - tome mi ropa y me la fui poniendo.

Se puso su playera y chaqueta.

- ¿Por donde salgo _____?

Abroche mi pantalón.

- Ven sígueme…

Lo bueno que yo le había puesto pasador a la puerta, así que Jason tenía que tocar para poder entrar a la casa. Conduje a Riker por la cocina, lo llevaba hacia la puerta trasera. Jason toco la puerta de la casa mientras que yo abría la otra y empujaba a Riker para que se saliera, rápidamente Riker me tomo en sus brazos y me planto otro beso que no pude resistir a aceptarlo.

Sus manos bajaron hasta mis glúteos y los presiono fuerte. “Auch” me queje…

Luego vendré por lo demás preciosa” dijo sonriente, beso de nuevo mis labios y se fue.

Cerré rápido la puerta, y Jason volvió a tocar la puerta principal. Camine casi corriendo, pero me detuve al pasar por un espejo… “Dios!!” Estaba toda despeinada., y mi cuello podía verse un poco rojo, acomode mi cabello de una forma que no se notara nada…

- Hola Jason - dije abriendo la puerta al fin.

- Hola linda - me dio un beso rápido en mis labios - ¿Porque tardaste? 

- Oh es que apenas me iba a dar un baño… y pues se me olvido ponerle llave a la puerta para que entraras

- Oh está bien - dejo su maletín en el sofá - ¿Y esto? - tomo la bufanda negra que Riker me había prestado.

Me quede helada.

- Fui al centro comercial y como hacía ya mucho frio, me la compre - sonreí levemente y tomándola en mis brazos antes de que oliera el perfume de Riker.

- Ya te he dicho que no andes caminando con este frio…

- Es bueno para la salud… - dije salvada.

- Lo sé, pero lo último que quiero es que te enfermes… - se quedó viéndome - Entonces ¿Te vas a bañar? 

- Amm… a si…

- ¿No quieres ir a cenar? - pregunto de pronto - Cuando regresemos ya haces eso…

- ¿En… verdad? 

- Si, - sonrió.

- Está bien… iré por mi chaqueta

Camine a mi cuarto, tome mi chaqueta negra del closet y me la puse… Me mire en el espejo, debía de ocultar el color rojo de mi cuello. Bueno, ya que Riker dejo su bufanda y le hice creer a Jason que es mía me la pondré… Una vez puesta en mi cuello me puse un poco de perfume, para disfrazar ese olor de hombre de ella. “Vamos” dije ya en la sala y tomando mi bolsa.

* * *

- ¿Entonces te vas? - dije mientras el mesero ponía mi palto con comida frente a mi.

- Son solo dos días linda… el miércoles por la mañana estaré aquí…

- ¿Tienes que ir? - dije un poco desanimada.

- Si, es por el trabajo linda… - dijo tomando mi mano y acariciándola.

- Oh, está bien… te estaré esperando

- Volveré pronto - dijo con una sonrisa.

Había sido casi increíble de creer que Jason me llevara a cenar, pero solo fue un plan, realmente preparado para darme esa noticia. Iría a una junta de trabajo fuera de la ciudad. Estaría dos días sola en casa… Bueno… A menos de que tenga otra vez la visita de Riker, debo tener más cuidado con él, sobre todo que Jason no sepa de todo esto.

- Me voy a las 5 de la mañana…

- ¿Te acompano al aeropuerto?

- No linda, no quiero que te resfríes, y menos que te regreses sola de allá…

- Está bien… pero me levantare temprano para despedirte

- Esta bien linda.

Regresamos a la casa como a las 10 de la noche, tome mi pijama y me metí a bañarme. Mientras el jabón resbalaba por mi cuerpo, en mi mente solo podía estar la tarde que pase con Riker. Estuve a punto de acostarme con él!. Me propuso ser amantes!... ¿Que iba a hacer ahora?. Estoy casada, y se supone que es con el hombre que amo, sin embargo ahora solo estoy más que confundida. Sabía que debía de evitar a Riker, no aceptar sus ofertas indecorosas, sin embargo… Deseaba sus caricias más que nada…

"Amantes Compartidos" (Riker Lynch y Tu) (HOT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora