—No le quita lo molesto.— bufo el cazador, siguiendo con su trabajo.

Por otro lado Ellie charlaba con el chico, recibiendo la taza de agua que el repartía. Y sonreía al darse cuenta que el niño se hacía el duro con ella, para demostrarse más genial.

—Estás haciendo un buen trabajo, sigue así.— le felicitó Ellie revolviendo sus cabellos rubios.

Henry asintió con su cabeza y siguió haciendo lo suyo, mientras Ellie se alejaba levemente para seguir trabajando.

Pero sus pasos se detuvieron al ver cómo Henry le tocaba ofrecerle agua a este tipo llamado Justin, el Salvador que tuvo un pequeño roce con Daryl sobre la pintura.

Se quedó ahí mirando por si acaso, ese sujeto no le daba buena espina para nada.

—Tranquilo amigo, aún sigo con sed.— sonrió el hombre quitándole la taza al chico.

—No, no alcanza para todos.— le negó Henry sin una pizca de agrado hacia ese salvador.

—Dame un respiro, niño.—

Ellie enojada, se acercó a la escena. El Salvador de cabello un tanto largo había empujado a Henry, quitándole el recipiente con agua que el chico llevaba y tomando de ella como un egoísta.

—Te lo pido prestado.— le pidió el palo de Henry, siendo mirada por el chico en el suelo.

La castaña con un fuerte golpe en las piernas de Justin, hizo que cayera al piso sin previo aviso. Sostuvo el palo en su hombro mirando con asco al hombre, empujar a un niño para quitarle el poco de agua que tenía para todos, no era genial.

—Dejala, eso no es genial idiota.— añadió la chica, tomando el recipiente con el palo de Henry y devolviendo las pertenencias al niño.— para la otra solo sacale los malditos ojos con tu palo.

Henry asintió enojado, mirando como el Salvador seguía en el piso adolorido, pero agradecido por la chica que le ayudó con ese idiota.

—No te preocupes.— se burló un amigo de Justin mirándole.— A mi también me dio una paliza una chica.

—Aunque yo tenía seis años y la chica era un camión.— agregó el mismo sujeto de barba, ayudando a Justin a levantarse.

El hombre ni siquiera dudo en ir tras Ellie, pues al levantarse sólo camino con rabia hacía ella, probablemente para golpearla.

—El niño está haciendo su trabajo, Ellie lo defendió por tus estupideces.— Un Daryl bastante enojado detuvo a Justin, al darse cuenta de las intenciones que tenía con su mujer.— sigue trabajando.

—No necesito que ustedes me digan qué hacer, ya no los quiero de niñeras.— el hombre seguía con la intención de pelear con Ellie, mientras esta lo esperaba tranquila, pero el segundo intento Daryl le tomó del hombro haciendo que Justin cabreado tirara un golpe hacia el.

—¡Daryl!— Grito la castaña al ver como su esposo golpeaba a Justin tras haber esquivando el golpe que quería darle.— ¡Para!

Se había desatado una pelea rápidamente, era increíble ver que la gente del santuario no ayudaba a separar a los que peleaban, solo gritaban emocionados.
Aaron detuvo enojo al otro tipo que ayudó a Justin, pues quería meterse para golpear al cazador que seguía peleando.

—Maldito hijo de perra.— Gruñó Ellie al ver cómo Justin quería ahorcar a su esposo.

Corrió rápidamente para alzar una patada demasiado fuerte a las cosillas del Salvador, haciendo que cayera adolorido al piso. Y sin más espera Ellie se colocó encima del hombre para empezar a golpearlo sin parar.

How many walkers have you killed? (Daryl Dixon.) Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon