Rebelde Involuntario [Pausada]

Conversaciones y Divagaciones

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Pues muy a mi inconformidad octubre se niega a avanzar, así que sus primeros días comienzan justo dónde nos quedamos, a ver si en el otro cap se logra avanzar más y llegar al menos a mediados del mes dónde "mudanza s.a" haya terminado de ocurrir y todos ya estén de nuevos ubicados en sus sitios... por ahora un par de días charlados, en idas y venidas que hacen ver eterno este capítulo... y cómo el titulo lo dice, esto, consiste en hablar, entiendase eso como es largo (Q novedad... ¬_¬) hay muchos personajes, diferentes situaciones y lugares... así que con suerte sea claro y ligero de leer... pero no prometo nada

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En el intento vano de estarse ocupado, Grantaire alcanzó a cubrir el eterno lienzo sin terminar que tenía desde hace tanto, dónde Enjolras aún no tenía identidad y se conservaba como Chief in Rouge, antes de empezar a revisar la habitación en busca de algo más que hacer con tal de no salir y que no hubiera algún otro dibujo por ahí y tan absorto estaba en su misión, como para dar un respingo al sentirse observado y girar a ver lentamente hacia la puerta, como quien espera que no hubiera nada, pero en efecto estaba y de inmediato, el diseñador volvió la vista al lienzo tras sí mismo antes de ver a su invitado de nuevo

-¿Era yo?- fue todo lo que preguntó Enjolras apoyado en el marco de la puerta

-No, alguien muy parecido a ti- aseguró intrigándole con ello, como para sonreír y negar volviendo la vista al lienzo cubierto- tal vez le conoces, le salvé en una protesta dónde me tomó por rehén- se forzó por bromear volviendo con él- pero por ahora se niega a verme a los ojos ante la ausencia del tono idóneo, será dejarle ahí- concluyó tomándole de la mano para apagar la luz antes q le diera por explorar esa habitación, así que optó por volver al sofá empezando a maldecirse como si no hubiera más que hacer- oye... entonces ¿tú y yo... estamos bien?- se forzó a preguntar y pese a que Enjolras lo dudó, le alzó los hombros como respuesta

-Supongo- se forzó a responder quedando en silencio de nuevo como para que Grantaire fuera incapaz de pasar por alto que esa mirada volvía a la habitación con cuadros cada nada, como para sonreír y negar echándole el cabello hacia atrás captando su atención

-Ahí no hay nada para ti- advirtió divertido girando hacia él recogiendo las piernas contra su propio pecho para caber en su parte del sofá logrando que apartara la vista de inmediato de esa puerta- solo son bocetos y trazos ajenos, en algunos incluso, cuando las clases alcanzan a importar, tienen en práctica lo visto, intentar plasmar de forma manual lo que hacen los programas, pero solo tecnicismos que vuelven todo más preciso- divagó restando importancia que no logró contagiar, al contrario, para Enjolras pareció más interesante, pero tendría que esperar que su anfitrión se durmiera para ir a curiosearlo... y estaba decidido a eso, ahora, solo necesitaba que Grantaire se durmiera

-Huele mucho a pintura- musitó intrigándole

-Supongo- concedió consciente de jamás haberse fijado, pero encontrarlo lógico- pinto ahí, se secan ahí, supongo que el aroma se impregna... ¿te fastidia?- dudó y de inmediato sintió el estómago contraerse temiendo a que fuera el caso, porque una vida sin pintura en sus manos y a su alcance, no la imaginaba, pero el mismo se diluyó cuando Enjolras se apresuró a negarle, así que Grantaire exhaló suave, casi aliviado de ello- pues mira que yo no lo había notado- se forzó a añadir sin darle tiempo de decirle que de hecho el aroma le gustaba cuado el diseñador alcanzó a esbozarle una sonrisa- ¿quieres una cerveza?- ofreció levantándose para ir a la cocina en busca de una y algo que hacer para callar las verdaderas sugerencias de su mente

-Yo sospecho que has perdido el sentido del olfato, como para no notarlo porque casi que desde que abres esa puerta sale el aroma a pintura- dedujo viéndole ir a la cocina y volver con una cerveza cuando le negó a que trajera una para él- no deberías beber más- advirtió sin alzar la vista el móvil por responder algo a alguien mientras Grantaire se dejaba caer en el sofá