Subdirectora del periódico diario

 

Me hizo que me distrajera un momento, ella siempre hacia que me animara y que sonriera sin ningún motivo.

-         esa sonrisa es de una persona enamora- me saco de mis pensamiento la Dra. Kingdom

-         no, es mi compañera de piso. Siempre esta bromeando y me hace reír- ella me miro con dulzura

-         espero que el imponente de mi hermano no se haya pasado contigo hoy- suspire

-         solo me dijo lo que me tenia que decir, llegue tarde y estaba enojado conmigo- ella empezó a reír

-         siempre intenta imponer sus reglas, es un hombre muy amable pero esta demasiado centrado en sus negocios- ¿negocios?

-         Pensaba que solo se dedicaba a llevar este hospital- ella me miro extrañada

-         Veo que no sabes quien es mi hermano, es uno de los hombres más influyentes de Londres después de mi padre. El lleva todos los negocios que dejo mis padre después de fallecer. Este hospital lo creo después de fallecer mi padre, el quería un lugar para que la gente fuera bien atendido- sus ojos de oscurecieron con lagrimas

-         No te pongas triste, enséñame los sitios que no me as enseñado hasta ahora- limpio sus lagrimas y se levanto de la silla

Cuando salimos de la cafetería una chica con una bata blanca se acerco a mi muy apurada.

-         Dra. Becker, el señor Kingtom te esta buscando para que acuda a su despacho- cogió aliento

-         Esta bien, ahora acudo a su despacho- le sonreí

Me despedí de la Dra. Kingdom, me dirigí hacia el ascensor y puse el numero seis. Mientras subía hacia la sexta plante empecé a pensar “por que quiere que suba” “será de nuevo uno de sus broncas” “podré aguantar su mirada” los nervios empezaron a florecer en mi mente. Se abrió el ascensor y vi que la chica de la recepción no estaba. Me dirigí hacia el despacho de Sr. Kingdom, toque con dulzura la puerta y me dio permiso para entrar. Se levanto de su silla para recibirme, me di cuenta que tenia unas vistas privilegiadas de Selton, los ventanales del despacho dejaba entrar una luz que hacia que iluminara cada rincón del despacho.

-         siente se Dra. Becker- me ordeno

Me senté en la silla frente a el, se le veía tan tranquilo y seguro. Sonó el teléfono del despacho pero el no lo descolgo

-         te he llamado para darte tu iphome personal como Dra. Este teléfono tiene que estar encendido las 24 horas del día. Así será mas fácil para poder localizarte, es lo ultimo en tecnología de móviles – solo podía fijarme en su camisa, no dejaba de jugar con mi mente

-         si es todo me gustaría volver a mi trabajo, no tengo ningún problema en tener encendido las 24 horas el móvil- hizo amago de sonrisa

-         es todo Dra. Becker, espero que mires todos los días el móvil y contentes-  mis mejillas se enrojaron

Me metí en iphone en el bolsillo y me fui hacia el ascensor, pero el Sr., Kingdom me llamo de nuevo. Puse mis ojos en blanco y me gire para mirarle.

-         espera que bajo contigo en el ascensor- ¡no puede ser!

Le sonreí y nos metimos en el ascensor, me sentía nerviosa e incomoda. Su olor era dulce, fresco y me hacia excitarme. Jamás me había pasado eso con ningún hombre, se cruzo delante mío para darle al numero uno, yo estaba embriagada con su olor y no me di cuenta que no le di al botón. El empezó a silbar, me ponía muy nerviosa su presencia y se me estaba haciendo eterno el descenso del ascensor. Se abrieron las puerta y Salí como si me estuvieran persiguiendo, lo quería escapar de ese lugar que tan excitada me había puesto.

EL AMOR APARECE SIEMPRE, CONFIA EN MIWhere stories live. Discover now