Rumores de pasillo [HaJeongwoo]

4: Equipos

Jeongwoo entró a la escuela acompañado de sus amigos Junghwan y Yedam, ya que Hyunsuk se sentía mal y Mashiho tenía un compromiso en japón.

— ¿Ustedes no sienten que nos miran mucho? —llevaba rato sintiendo las miradas en él, pero creía que tal vez era su imaginación o los nervios de porque en esa semana tendría examen.

— No.

— Mm no —negó con la cabeza Yedam—. Tranquilo.

Caminaron en dirección a los casilleros, pues Jeongwoo tenía que sacar algo de ahí.

— Yoshinori —saludó Yedam al ver que el chico se les acercó.

— Hey —devolvió el saludo—. Jeongwoo, eso campeón —animó al chico y este lo miró raro.

— No soy el único que creyó que eso fue raro, ¿Verdad?

— Tranquilo Jeong, controla tus nervios.

— Si hermano, seguro estás así por el examen —Junghwan apretó su hombro en manera de apoyo

— Tienen razón —tocó su pecho a modo de satisfacción y suspiró.

— Hey chicos.

— Doyoung —saludaron los 3 chicos.

— ¿Escucharon la buena? Asahi y Jaehyuk salen.

— ¿Asahi? ¿El japonés? ¿Asahi sin sentimientos? ¿Hablas de ese Asahi?

— Hanada Asahi sale con Jaehyuk, ¿Hermoso, no?

— Sí —habló Yedam restando importancia.

— Junkyu lo twitteó, supongo que es verdad —habló Junghwan mientras revisaba su Twitter—. Ha estado twitteando muchas cosas.

— ¿En serio? —Jeongwoo abrió los ojos sorprendido.

— Sí —respondió.

— Déjame ver —le quitó el celular de las manos haciendo que entrará en nerviosismo junto con Yedam.

— No creo que haya algo importante —dijo Junghwan tratando de que Jeongwoo le regresara el celular.

Jeongwoo bajó hasta que encontró un tweet que llamó su atención.

@Smile_kyu

A Haruto le gusta Jeongwoo

— ¿Qué? —casi dejaba caer el celular de no ser porque Junghwan agarró el celular a tiempo.

— Casi dejas caer mi celular —chilló.

— ¿Por qué Junkyu twitteó eso?

— No lo sabes viejo, está twitteando los rumores del periódico escolar —Doyoung respondió su duda.

— ¿Acaso cree que esto es gossip girl? —Jeongwoo habló alterado.

— Relajate viejo —Doyoung intervino.

— Sí, relájate bebé —Yedam le tocó el hombro—. Nadie le pondrá atención a eso.

***

Yedam le mintió, todos en el salón lo quedaban viendo de pies a cabeza y más por su asiento era delante de Haruto.

— Todos me observan —susurró a Yedam.

— A Haruto parece no importarle —le contestó de vuelta.

— Oye —tocó su hombro el chico de atrás—. ¿Y tu amigo?