xᴠɪ: "ʀᴏᴍᴘᴇ ᴄᴏʀᴀᴢᴏɴᴇs".

Depuis le début
                                    

— No fui yo. No.

Sabía que no mentía, y aunque sus ojos estuviesen oscuros y quisiese matar a alguien, no podía culpar a quien no era, porque Taeyong podía estar en peligro, y había que solucionarlo de una forma u otra. Asiente lentamente, completamente serio.

— De todas formas, ya me aburriste. Vete, y haz que vuelva el infeliz —Ordena. El demonio que habitaba el cuerpo de Eunseo no parece feliz por ello, pero intenta no demostrarlo y asiente—. Dile que si dice una palabra sobre donde estuvo volverá indudablemente. Y tú... —Alza un poco su cabeza en señal de autoridad—. Si te llegas a escapar, voy a encargarme de que pases la peor eternidad de tu vida.

— S-S-Sí. Sí, mi rey —Se para derecho en su lugar, listo para irse.

— Una cosa más —Jaehyun se va acercando lentamente al demonio, y cuando lo tiene a tan solo centímetros, comienza a sonreír lentamente, de lado—. Corre la voz. Hay un príncipe.

— P...Príncipe.

— Eso es. Que rápido aprendes —Dice, y aunque suene cómico, su expresión de victoria no ha cambiado—. Y si alguien vuelve a poner un solo dedo sobre él... voy a chasquear mis dedos, y se van a morir todos. ¿Capiche?

El demonio tan solo asiente, completamente temblando antes de alzar su rostro, viendo hacia el techo y abriendo su boca. Humo negro sale de su boca fugazmente antes de caer al suelo, desmayado... pero respirando.

El desgraciado estaba de vuelta.

Jaehyun camina hacia la puerta y le pone pestillo antes de, nuevamente, volver a la habitación de Taeyong. Éste último se encontraba frente al espejo de su cuarto, finalizando de abotonarse la camisa. Se giró a ver a Jaehyun al notarlo de reojo, y éste se acercó de inmediato, abotonándole el último botón con calma, paciencia pero muy rápidamente.

— Tu padre va a regresar —Dice. Taeyong se lo queda observando, inmóvil ante la manera natural de Jaehyun por decir cosas importantes y que claramente le iban a provocar un leve shock.

—...Está bien —Tan solo pudo decir luego de unos segundos mientras su esposo le subía los tirantes por los hombros.

Ambos se vieron fijo por unos segundos antes de que Jaehyun pasara lentamente los brazos por la cintura de su niño favorito, acercándolo. Éste último se puso de puntitas de pie y ambos comenzaron una suave y lenta sesión de besos, ladeando sus cabezas hacia los lados contrarios y sintiéndose, realmente haciéndolo por primera vez en el día.

Los dedos de Taeyong acariciaban tímidamente el cabello en la nuca del diablo, mientras que éste último se tomaba la libertad de, luego de haber acariciado la espalda del castaño, acariciarle los glúteos.

El beso, poco a poco, fue volviéndose más intenso, pero continuaba lento. Finamente se alejaron debido a que el calor comenzaba a reinar en aquel lugar, y se hacía tarde como para comenzar una sesión de algo más. Taeyong debía de ir a la escuela, encargarse de ver cómo estaba Johnny. Jaehyun debía averiguar quién mierda dañó a su esposo, y hacerlo pagar.

— Vendré en la noche... —El rey del inframundo dice sobre los labios de su bebé, el cual asiente apenitas con la cabeza. Ninguno puede separarse aún—...y te haré sentir bien.

— Sí...

Jaehyun le da unos últimos besos en los labios antes de subir sus manos a la cintura del castaño y besarle la mejilla, finalmente separándose y dando unos pasos hacia atrás.

— Si algo sucede con tu padre, quítate el anillo. Voy a sentirlo cuando lo hagas.

Taeyong asiente lentamente y, con un guiño de ojo, en un parpadeo el diablo desaparece. El leve vacío aparece en el pecho del castaño y siente que no quiere hacer mucho, pero pone lo mejor de sí y sale de la habitación luego de tomar sus cosas.

"Dancing with the Devil." | JaeYong. 🌹 [Adaptación]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant