Twisted

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Pov ____

Calores infernales se apoderaban de mi ser, fragmentos de neblina transformada hacia que mi vista sea patética, siento mi pecho arder, demonios correr, dando zancadas con el ruido más zumbante perjudicando mis oídos.

"¿Qué pa-..." Intenté hablar pero paré en seco al ver el hilillo de voz que tenía.

Mi voz además de escasa era muy rasposa.

Y nada que comentar acerca de mis razonamientos, mi cabeza estaba por explotar.

Pero me quedé quieto, mirando el gran abstracto blanco que tenía de frente, un techo dando reflejos tenues de la linda sonrisa del amanecer, y eso a ciegas, pues no sabía si era un amanecer o estaba enloqueciendo.

El dolor cesó. Por unos instantes, por lo menos no sentí como me empujaban desde la espalda hacia el baño por los estragos que habían dejado el claro alcohol que aún corría por mi organismo.

Pero en ese momento sentí algo más, un ruido, un tacto, un llamado. Algo.

Por índices estaba claro el ruido leve de los autos circulando, pues la residencia donde estaba de seguro se encontraba en el centro del gran Seúl.

Además el pequeño tacto, algo suave se dejaba sentir en mi abdomen, y en mi pecho podía sentir una respiración, igual que su precedente. Suave, tranquila, sin preocupaciones.

Pero seguía mirando el techo, mis sentidos prioritarios, (la vista y el oído) se compusieron.

Algo que perduraba era un ardor, en mi zona baja, y un sufrimiento abdominal terrible.

Mi brazos cansados, y al querer cambiar mi ángulo de visión también concreté que mi cuello estaba adolorido. Una tensión recurrente era tangente.

Y bueno, al querer poner algo de movilidad en mis piernas noté que estaban muy débiles, temblaban, la fuerza combatía con el nerviosismo.

Todo apuntaba a algo.

Pero lo comprobé al percibir un leve roce con mi entrepierna, de manera involuntaria, si. Pero no mía.

Ja ja.

Estaba desnudo.

Espera, ¿Qué?

Con el movimiento brusco que hice con mi cuello generé más tensión, regresándome a mi ángulo inicial.

La normalidad de mi paso sanguíneo fue cortado, un peso en mi brazo izquierdo interrumpía su corriente, provocando que el mismo se durmiera.

En busca de una solución, pasé mi brazo derecho sobre mi cuello y fuí inclinándome lentamente de manera autónoma, hasta quedar sentado.

El bulto que sostenía parte de mi torso cayó rodando a mis piernas.

Algo suave parecía ser aplastado por la presión.

Mi cabello se posicionó sobre mis ojos. Al recogerlo me quedé un rato meditando.

Froté mis ojos un poco para quitarme el efecto somnoliento que persistía.

La Vida De Un Youtuber Con TWICE [Twice Y Tú] Where stories live. Discover now