Dulce Venganza

Capitulo 9. Solo hay una forma de comprobarlo

................... Gabriel ...................

Llegamos a casa, cuantos años alejados de nuestra verdadera casa, en donde crecimos, donde jugamos, donde pasamos tantos buenos momentos, pero al recordar los buenos llegaron los malos.... Mi padre ya no estaba, y había calculado mal, alejarme no había calmado el dolor, volvía a resurgir una vez que mis pies tocaron el suelo...

Una chica rubia salió corriendo en nuestra direccion, solo podía ser ella, Saray. Corrió a abrazarme y la cogí en brazos, dando vueltas por el aire.

- Bájame, bájame.

- ¿Tan poco me as extrañado?

- Te he extrañado mucho - dijo de nuevo tirándose a mis brazos.

- Yo también soy tu hermano... eh... - dijo Chris a nuestro lado.

- ¿Si? No lo recordaba.... - dijo mi hermanita graciosa y se echó a los brazos de él.

Una vez se soltó de Chris miró a Sandra, no se llevaban demasiado bien. Saray decía que ella no era para mi, que yo no la amaba y ella solo buscaba poder.

- Hola Sandra - dijo seria.

- Hola Saray, ¿no me vas a dar un beso?

Miré como mi hermana la miraba como si le estuviese pidiendo que se sacara un ojo.... y lentamente se acercó a ella, esperando que alguien la detuviese... me pareció muy cómico y me reí. Pero ella tuvo que besar a mi novia, mientras me miraba como diciéndome que me iba a matar... me limité a encogerme de hombros.. yo ahí ni cortaba, ni pinchaba.

- ¿Y Madre?

- Dentro ultimando los detalles de la recepción de esta noche... ya sabes como es.... quiere estar al tanto de todo lo que pasa...

- ¿Y porque la recepción?

- ¿No lo sabéis? - dijo sorprendida.

- No, pero nos lo vas a contar tu.

- Ni lo sueñes, si madre no ha dicho nada.... yo con la reina no me meto...- dijo escapándose.

- Quieta ahí, granuja - dije comenzando una persecución como en los viejos tiempos. - Hola Tomas, ¿como ha estado?tome las llaves del coche, el equipaje está en el maletero.. - dije al mayordomo sin esperar contestación, era un hombre de pocas palabras y aunque le preguntaras como estaba jamás contestaba... solo se limitaba ha hacer su trabajo..

Entré en casa y vi como mi hermana corría hacia las escaleras, apuré el paso para detenerla y la cogí por detrás.... haciendo un escándalo inaudito en palacio.. pero así éramos nosotros, demasiado alegres para las leyes de palacio. Empecé a hacerle cosquillas, mientras ella juraba que jamás diria una sola palabra.

- ¿Que es todo este estruendo? - dijo la voz de mi madre.

Automáticamente bajé a mi hermana y miré a mi madre, que me sonrió muy feliz, acercándose a mi.

- Hijo...

- Madre, está muy hermosa - dije acercándome a darle un beso en la mejilla, no sabía como tratarla... Porque después del separamiento, y estado en palacio, no era correcto mostrar demasiadas ansias por algo.. Pero ella haciendo caso omiso al protocolo me abrazó y me sentí en casa, me sentí de nuevo feliz, me sentí de nuevo un niño.... Al que le faltaba que su padre entrara del pasillo, proveniente de su despacho... con la alegría que lo caracterizaba, solo que eso no ocurriría.

A nuestro abrazo se unieron Saray y Chris, haciendo que nos emocionásemos, bajo la mirada de los empleados de palacio, de los del catering y de Tomas que también sonrió, algo inaudito en el.