¿Dinero O Amor? [NAMMIN]

00 : 06

La mañana era tranquila, mi piel se sentía muy fresca, y una tranquilidad que pocas veces tengo. Un enorme brazo rodeaba mi cintura sin presión alguna, no se sentía extraño o incómodo como otras veces sentí. Quizá pronto comenzaré a acostumbrarme.

Me moví lentamente para no despertar a Kim, aún no sonaba su alarma así que quería que durmiera bien porque hoy tiene una reunión muy importante.

Busque mis productos que normalmente uso para bañarme y con ello en mis manos fui a darme una relajante ducha.
Ahora sí, Park Jungkook no se va a escapar de mi, debe saber que está casa se va a respetar y no salirse con las suyas.

El sonido de la alarma me indico que tenía que salir del baño, en realidad no demoro mucho, pero está vez quería estar un tiempo más en la tina con agua tibia. El baño era grande y aun que suene raro entraban muchas personas en este lugar. Pero lo obvio era que no quería ver a Namjoon desnudo, eso jamás.

— ¿Jimin? ¿Puedo entrar cielo? — me quite la poca crema que tenía de la cara y me puse mi bata favorita de ceda.
Sonreí ante mi reflejo para después salir y ver a Namjoon con el torso desnudo, me quedé mudo por un momento admirando esos pectorales y su marcado abdomen, cuando paso aquello no hubo tiempo de observarlos adecuadamente. — ¿Ocurre algo? — mis mejillas ardieron y rápidamente aleje mis ojos de él.

— N-no, solo me sorprendió que te quitarás la camisa... Nunca lo haces — hablé en voz baja quitando un poco de sudor de mi frente, no sabía que estaba sudando de echo.

— No, pero está vez quise hacerlo — dijo mirandome de arriba hacía abajo sonriendo y guiñandome un ojo.

— Bien... Yo, te espero aquí — el sonrió y negó, sabía que estaba diciendo tonterías pero no sabía que decir exactamente.

— ¿Que diablos te pasa Park Jimin?— dije después de que se cerrará la puerta, fue hasta entonces que pude respirar bien. Me golpeo levemente la cabeza y respiro más tranquilo, un poco frustrado por la situación. Me visto para ir a la sala, en el pasillo no veo a nadie y es realmente raro no ver a nadie por estás horas, al llegar al comedor veo todo el desayuno servido, y solo una sirvienta se encuentra limpiando la más mínima suciedad.

— ¿Que sucede, dónde están todos?

— No lo sé señor, con permiso — hizo una pequeña reverencia y salió del lugar, no lo tome mucho en cuenta y me senté para probar todo lo que estaba ahí.

— Buenos días — llegó el pequeño Kim, el chico que trabaja en la biblioteca.

— ¡Oh! ¿Ocurre algo? — bebí un poco de jugo de naranja y me lleve un pequeño trozo de sandía a la boca.

— solo quería decirle que el joven Park acaba de llegar, pero no quiere bajar para desayunar. — y no era sorpresa, llevamos  tan solo tres días en esta bella casa y jamás a desayunado aquí.

— bien — no le tome mucha importancia y seguí comiendo el hizo una reverencia con la cabeza y se retiró del lugar, pero antes de hacerlo llegó Namjoon y sonrió.

— Tae, quédate a desayunar con nosotros — mire un poco incrédulo a Kim, ¿Porque un empleado tiene que desayunar con nosotros?

Tae me observo — no, ya desayune, permiso. — hice una pequeña mueca.

— bien — Namjoon tomo asiento y sonrió para después tomar mi mano y acariciarla, yo le sonreí de vuelta, aunque Kim parecía tranquilo en sus ojos mire un poco de nerviosismo.

— Todo va a estar bien Nam.

— Eso espero, pero no quiero hablar de eso esta mañana, mejor dime ¿Ya está aquí Jungkook? — asentí y el sonrió — si que es un niño muy travieso, ¿Por qué no le agrado?