|| Todo por Ti || [Victuuri / Yuri On Ice]

12.

Iba de aquí para allá, dando vueltas al rededor del pequeño sofá de su habitación pateando, un objeto invisible y gruñendo mientras era observado por un peli negro que se encontraba sentado en una esquina de la cama con su típica expresión de seriedad

-Estúpido anciano, me saca de quicio_ gruñía el menor_ cuando regrese lo voy a matar, lo juro!_

Sabía que el menor se desesperaba por las acciones y las decisiones que se tomaba su jefe llevándolo al borde de un colapso mental; lo comprendía, hasta él que era una persona que podía adaptarse rápidamente a los cambios de situación repentinos debido a su puesto como líder de los hombres de Nikiforov, le generaba un leve dolor de cabeza la manera de actuar de éste, aunque sabía muy bien que era por la actitud infantil que podía llegar a tener y se le pasaba. El ruso hizo muchas cosas por ayudarlo a salvarse, y a salvar a su familia de conflictos innecesarios y bobos con "mafiosos de quinta" como solía decirles, y tenía que agradecerle aceptando el puesto que le ofreció, adentrándose en ese mundo obscuro en el que, una vez que aceptas formar parte, no hay vuelta atrás

Allí fue donde lo conoció. Donde vió por primera vez esa mirada color jade que le llamó la atención dejándolo cautivado y con ganas de ver más allá de lo profunda y llena de determinación que se mostraba. Sin duda ese chico de piel blanca y que desde lejos podía notarse suave y lechosa, con esa cabellera rubia digna de un ser tan angelical, con ese cuerpo delgado y con curvas que resaltaban su jóven figura, debía de ser una divinidad bajada del mismo cielo

Él tampoco consideraba muy hablador y tampoco es que tenía la obligación de socializar con cualquiera de las otras personas cercanas a Víctor, sin embargo se convirtió en un amigo cercano del aludido y llegó a llevarse bien con él, aunque muy poco, con Giaccometti y otros de los aliados de éste; al parecer no era el único con una personalidad seria y distante

Seung Gil Lee era el nombre del representante del ruso en los negocios menores y su asesor o consejero en los negocios importantes, un coreano de cabellos negros, piel pálida y cejas gruesas, con un carácter frío y cortante, especialmente cuando alguna mujer trata de acercarse a él con intenciones de coquetear o "insinuar que está urgida sexualmente", según la manera de ver de éste, rechazándolas de inmediato y evadiendo conversaciones con las féminas

Casi siempre solía cruzar miradas con el adolescente arisco, que aveces lo atrapaba observándolo desde lejos y cuando se daba cuenta salía corriendo con la cara rosada y murmurando cosas en su idioma natal

Poco a poco fueron haciéndose más cercanos comenzando con una simple amistad, que con el pasar del tiempo se fue convirtiendo en un sentimiento más fuerte. Muy en el fondo tenía dudas y miedo de que ese sentimiento no fuera correspondido pues pensaba que quizás el menor lo veía como un hermano mayor y no quería que las cosas se arruinaran entre ellos dos, pero jamás sabría si lo que él se suponía era cierto, y dispuesto a acabar con la intriga se propuso a averiguarlo

Fue directo, con la misma seriedad de siempre aunque por dentro estuviera muriendo por no saber que vendría ahora. Vió la mirada incrédula y confusa del rubio, cerró los ojos esperando el insulto por parte de este o como mínimo una patada de las que solía darle a todos.

Pero nunca llegó. Sintió unos labios tibios y suaves posarse con delicadeza sobre los suyos que luego tomaron un ritmo lento y torpe que correspondió de inmediato

-...Ka…_

No importa lo que dirían

-...eka…_

No importa lo que pensarían

-..Beka...

El lo amaba, lo ama y lo amaría siempre