Capitulo 24

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Valentina POV

- Juliana... - estaba besando mi cuello - Juliana espera...

- ¿Qué, Valentina?

Me miró por un segundo, pero volvió a subir su cuerpo para besar mi cuello. Yo estaba perdiendo el auto control a este punto, bajé más mi cuerpo pegándome a ella, una de sus manos estaba en mi nuca y la otra se metía bajo mi camisa.

Sus piernas de enrollaron en mi cintura y me empujó hacia abajo haciendo que nuestras caderas chocasen. Tomé su cara con una mano y mis labios buscaron los suyos, el beso era rápido y con ganas, nuestras lenguas jugaban y se debatían una guerra.

Sujeté su labio inferior y lo mordí para luego succionar. Ella tomó el borde de mi camisa y la subió, sacándomela por completo. Mis labios se fueron directo a su cuello, lamí y mordí a mi antojo, escuchando pequeños jadeos por parte de ella. Tomé el lóbulo de su oreja y lo jalé con mis labios, lamiendo un poco, ella gimió.

Esto me parecía un sueño, ella era algo irreal. No sé si era a causa del alcohol, pero ella estaba completamente entregada a mí y yo quería tomarla, pero sabía que debido a nuestro estado, no sería una buena idea. Aunque realmente yo deseaba tenerla, deseaba ser una sola con ella, unirnos y amarnos, pero no quería arrepentimientos después, eso me devastaría.

- Juliana... ¿Estas...seg - tomó mi cara y me besó, metió su lengua en mi boca sin previo aviso y comenzó a jugar con la mía, de nuevo. Mis manos se fueron hasta su camisa y la quité. Toqué su abdomen plano, y ella suspiró contra mi boca.

- Juliana... No deberíamos... Estás borracha... - Intente que entrara en razón, en mi cabeza había un ángel y un demonio hablándome y no estaba segura a cuál le haría caso.

Me incorporé y ella gruñó, se levantó también y enlazó sus brazos a mi cuello, haciéndonos caer a la cama de regreso.

- ¿Quien dijo que estaba borracha? Si hago esto, es porque quiero.

Mi mirada conectó con la suya y sus ojos brillaban como nunca antes, una sonrisa se coló por sus labios y dejé un pequeño beso en ella. Me quité los zapatos y quité los de ella para quedar en el centro de la cama, ella estaba acostada y yo estaba arrodillada entre sus piernas, desde mi punto de vista tenia a Juliana en sujetador, con la respiración agitada y los labios hinchados.

Pasé la punta de mis dedos por su abdomen bien trabajado  , ella entreabrió sus labios. Toqué sus costados y sus piernas que estaban una a cada lado de mi. Desabroché su short y se lo bajé lentamente, metiendo mis manos por sus piernas y tocando todo hasta quitárselo.

Volví a mi posición anterior y la miré, en sus ojos había deseo. Me incliné y repartí besos por todos lados, sus costados, su abdomen, su vientre , mientras que ella llevo una de sus manos hasta mi cabello, tirando un poco de él.

Al subir y encontrarme con su sujetador la miré, pasé la punta de mi lengua por el borde de éste y ella se apretó las sábanas mientras mordía su labio. Sonreí al notar que se desabrochaba por delante y lo hice, con una mano sujeté uno de sus pechos mientras que con mi boca dejaba tiernos besos en su otro seno, pasando después la punta de mi lengua por el área. Juliana gimió y fue música para mí, ella apretó las sábanas con fuerza y su cuerpo se movía debajo de mí.

Llevó una de sus manos hasta enredarla en mi cabello e hizo presión como si yo hubiera tenido pensado moverme de allí. Mi lengua buscó su otro pezón y comenzó a jugar con él, estaba completamente erecto y Juliana gemía.

Cuando los gemidos de Juliana aumentaron me detuve y subí repartiendo besos hasta su boca, volví a morder su labio inferior y ella también lo hizo con el mío. Sus manos se posaron e el botón de mi pantalón y lo bajó, yo terminé sacándomelo por completo. Lamí su cuello y bajé por su cuerpo besando todo a mi paso, su cuerpo era perfecto, merecía ser besado con paciencia, con devoción. Al llegar a su vientre elevé mi mirada, sus labios volvieron a llamarme así que subí a darle atención, mientras lo hacía puse mi mano en su entrepierna por encima de su ropa interior y movía mis dedos lentamente, ella arqueó su cuerpo y gimió en mi boca. Quite mi mano y ella gruño haciéndome sonreír.

Kilometraje  (Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora