Capítulo 3

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ATENCIÓN!! Este capítulo contiene una escena no apta para personas sensibles.



Su caballo tuvo que verse obligado a saltar el tronco de un árbol caído en medio de la persecución. Un disparo pasó rozando su mejilla, por poco golpeandole de lleno. El quad se movió deprisa por el sendero de la montaña pero no era tan fácil de maniobrar como un animal ágil como era el caballo, que hacía zigzag a través de los árboles, intentando perder de vista al otro.

El jinete, con su corazón latiendo a toda velocidad, se llevó una mano al cinturón de su pantalón, buscando desesperado su arma.





***





La siguiente vez que despertó en su cama tan solo había pasado la noche del lunes por lo que no le habían tenido tanto tiempo en la silla. Su cuerpo se sentía agotado y picaba tanto que hasta ardía. Probó por rascarse pero eso solo produjo un dolor parecido a como si tuviera chinchetas en los dedos.

Cansado tanto mentalmente como físicamente, se metió en la ducha de su habitación y puso el agua tan fría como pudo. La temperatura helada le quitó la sensación de ardor pero sus pies terminaron morados. No lo tomó mucho en cuenta y terminó por vestirse.

Era la hora del desayuno y todos sus compañeros seguramente estarían en el comedor. Su estómago se revolvió por estar vacío, pero también al pensar en la comida sintió que vomitaria, además de que no tenía ganas de confrontar a los demás, sobretodo a Sehun y sus preguntas estupidas. Optó por ir a las salas de entrenamiento, donde se sentía cómodo mientras le pegaba puñetazos a un saco de boxeo. No tenía muchas fuerzas para entrenar pero con tan solo sentir el olor a plástico de los guantes le bastaba.

Las salas de entrenamiento eran grandes y diversas. Había de todo allí, desde un gimnasio normal y corriente hasta una piscina olímpica o una zona de escalada, incluso una sala para practicar tiros con armas de fuego. Chanyeol no iba a hacer mucho, tan solo se pasearia un rato por las instalaciones y ya.

En aquellos momentos, con todo vacío era como el paraíso para él. Una paz y una calma que se podía respirar. Nada de peleas absurdas entre hombres con poco cerebro o de conversaciones sobre quién sería el siguiente en la lista. Solo había silencio.

Al pasar a la piscina olímpica cubierta, el olor a cloro y agua le golpeó en la cara y le hizo relajarse aún más. Él no era muy fanático de la natación, sabía nadar pero no se pasaba los días haciendo largos como mero entretenimiento como algunos hacían. Sin embargo, admitía que había días que necesitaba meterse en el agua y dejarse flotar sin preocuparse por nada.

Se retiró el calzado que llevaba y se agachó para doblar el borde de sus pantalones hasta justo por debajo de sus rodillas. Luego, se acercó al borde la piscina y allí se sentó y metió los pies en el agua, soltando un suspiro después. El suelo estaba frío y por un momento le recordó a la sensación de la dura silla de metal donde le ataban. Negó con la cabeza, desechando esos pensamientos. Volvió a suspirar.

En ese momento, pequeñas burbujas hicieron cosquillas en sus pies dentro del agua. Él movió los pies, algo asustado, y miró hacia el agua, pero ahí abajo no había nada. Un murmullo como de una canción infantil empezó a sonar detrás de su oreja. Giró rápidamente su cabeza hacia atrás pero no había nadie.

FIGHTER ( CHANBAEK )Where stories live. Discover now