•°sᴜᴇñᴏs ᴅᴇsᴛʀᴏᴢᴀᴅᴏs°• (𝕻𝖆𝖚𝖑 𝖝 𝖑𝖊𝖈𝖙𝖔𝖗𝖆) •||PAUSADA||•

Cap.3 Tristeza y pena

Estuvimos cenando de manera normal, y Lionel se empezó a preocupar por su hermano, ya que hacía un buen rato que no bajaba, fue a buscar a Paul, a ver si estaba bien.

Llegó al baño y llamó a la puerta, Paul contestó con un hilo de voz: "¿Qué quieres?"

A lo que Lionel le respondió: "Hola, soy yo, Lionel, he venido a ver si estabas bien, es que hace un buen rato que no bajas, ¿Te ha pasado algo?"

Paul suspiró y le contestó: "Lee, tranquilo, estoy bien, ahora bajo, dame un minuto"

Lionel se tranquilizó un poco y bajó a seguir cenando.Después de un par de minutos bajó Paul, a quien se le volvían a notar los ojos hinchados, supuse que había llorado, pero no le quise molestar, y seguí como si nada.Al fin terminamos de cenar, la cena estaba exquisita, cenamos un curri dinamax, y unas malasadas caseras de postre.

Ayudé a fregar los platos, algo que al fin me permitieron hacer, y cuando terminé, me dispuse a ir en busca de Paul, ya que estaba preocupada por su estado de ánimo, y como su mejor amiga, era lo mínimo que podía hacer.

Le comencé a buscar por el laboratorio de la profesora Magnolia, ahora laboratorio de Sonia, pero ahora no estaba allí, supongo que lo hizo para que ,si me daba por buscarle, no le encontrase tan fácilmente.

Comencé a pensar en un lugar donde pudiese estar, pero no se me ocurría nada, le pregunté a su madre y a Lionel, pero no sabían dónde estaba.

Busqué por los alrededores, pero nada, hasta que de pronto noté que una de mis pokéballs se estaba sacudiendo, ¡Era Zacian/Zamazenta!, me estaba intentando decir algo, así que lo saqué de su pokéball y me hizo un gesto de que le siguiera.

Cuando me dí cuenta ya nos habíamos adentrado lo suficiente en el bosque Oniria, me empezaron a llegar muchos buenos recuerdos de cuando comenzamos nuestra aventura: Cuando ayudamos al Wooloo que rompió la valla que prohibía la entrada al bosque Oniria, cuando tuvimos nuestra primera batalla...

Yo seguía recordando felizmente cosas de el comienzo de nuestra aventura, hasta que Zacian/Zamazenta me sacó de mis pensamientos. Yo me quedé extrañada mirándole, pues no entendía nada, "¿Por qué me había traído aquí?" era el único pensamiento que tenía en mente.

Zacian/Zamazenta me empujó hacia donde estaba el "Altar" donde encontramos la espada y el escudo oxidados, y allí, para mi sorpresa, ¡Estaba Paul!

Corrí hacia él, hasta que de pronto su Zamazenta/Zacian me paró en seco.

Me quedé paralizada del susto, pero me recompuse e intenté apartar a su Zamazenta/Zacian.

Paul pudo ver mi reflejo en el agua, y me preguntó: "¿A qué has venido, t/n?"

Yo le dije: "¡¡Te estaba buscando, no haces otra cosa que preocuparme, desapareces así de la nada, y nadie sabe de tu paradero!!" ¡¡Y encima ahora...!!- Fui interrumpida por Paul.

"Yo... Lo... ¡¡Lo siento!!"- Me gritó Paul mientras su Zamazenta/Zacian me permitía pasar.

Fui corriendo hacia él, en cambio él se limitó a darse la vuelta, por lo que pude contemplar su rostro lleno de lágrimas, en ese momento noté como si me clavasen una estaca en el corazón; nunca había visto a Paul así, ni querría haberle visto así.

Me agaché y le abracé con todas mis fuerzas. Noté cómo los ojos de Paul se abrían como platos.

"Paul, por favor, no llores"-Le dije conteniéndome las lágrimas- "Si sigues así al final yo también lloraré... Ya sabes que no me puedo contener por mucho tiempo"

Entonces Paul me alejó de él, se secó los ojos, y me miró dedicándome una de sus famosas sonrisas.

"Lo siento, t/n..."- Me dijo inclinando la cabeza hacia abajo a modo de disculpa.

"Tranquilo, no pasa nada, lo importante es que estés bien, nos tenías muy preocupados..."- Dije volviéndole a abrazar.

Paul me devolvió el abrazo, y estuvimos así un rato, hasta que miré el cielo, y ví que estaba oscureciendo.

"Paul, nos tenemos que ir, se hace tarde..."- Le dije a mi amigo.

Paul no me respondió, por lo que le miré y pude ver que estaba dormido, supongo que había sido un día agotador para él.

La verdad que es era adorable con esa carita suya al dormir, espera, ¡En que estaba pensando!

Paul, por su parte, seguía dormido, sin percatarse de lo sucedido, así que suspiré aliviada.

Le continué abrazando, esperando que ese momento nunca terminase, pero mi suerte me traicionó, de pronto llegó Lionel, exclamando:

"¡Paul, t/n, os estábamos buscando!- Pero de pronto se calló - "¡Oh!, lo siento por interrumpiros, par de luvdiscs..."

De pronto vi que Paul se acababa de despertar por semejante estruendo que estaba montando Lionel.

Me vio y me dijo:

"Buenos días, t/n"- Sonrió.

Yo, ante su comentario, me sonrojé y, a su vez, Paul notó que seguíamos abrazados, y por mi sonrojo, se percató de la situación y se alejó de golpe.

"¡L-Lo siento, no quería...!- Exclamó mi compañero.

"Y-yo ta-también lo s-siento, no e-era mi intención..."- Le respondí.

Lionel vió nuestro agobio, y para tranquilizarnos nos dijo:

"Venga chicos, ya hablaréis en otro momento, ahora tenemos que irnos, que se hace tarde..."

CONTINUARÁ...

¡¡Hola!! ¡¡Aqui está el tercer capítulo, espero que os haya gustado, y de verdad os agradezco que leáis mi historia!! <3

~Saludos!!!