U.E.I Sevenzuela -Seventeen-

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Minghao paró la bicicleta justo en frente del callejón. Jun no quería bajarse, había barro, pero tenía que ir a buscar a su futuro hijo.

— Anda, la gata los dejó solos y a veces tengo que venir yo a cuidarlos.— Minghao le dio un trapito— Agarras al gato y lo arropas.

—¿Puedo agarrar a cualquiera?

—Sí, son sólo tres. Te fijas si están en su caja, a veces ruedan y se salen.

Jun bajó de la bicicleta sin ganas, pisando las zonas secas. La caja estaba debajo de un techito, y pudo escuchar los leves maullidos.

¿Y si se los llevaba todos?

—MINGHAO ¿Y SI ME LOS LLEVO TODOS?

—¿TÚ NOS VES CARA DE RICOS?

—ANDA, ME DA MUCHO DOLOR.

—ELLOS ESTÁN BIEN.

—SI YO ESTUVIERA EN UN CALLEJÓN NO ESTARÍA BIEN.

Minghao suspiró y pensó, bueno, a su mamá tal vez no le gustaría la idea...

Cuando iban en camino a la casa, Jun cargaba feliz la caja con tres gaticos bebés.

La mamá de Minghao sólo se rió, y les aconsejó que les dieran comida. Así que Minghao agarró un poquito de leche que habían comprado antes para SÓLO UN GATO y la agarró en jeringas.

Jun estaba en la silla del porche sacando a los gatos, la perra solo los vio y al ver que no eran un pedazo de pan, los ignoró.

—Vamos a ponerles nombre.

—Pa ve, este tiene cara de Asdrúbal— dijo Minghao señalando al gato negro con blanco.

—Qué Asdrúbal chico, marginal. Tiene pinta de Oreo.

—PARCHIIIITAAAAA.

—MARGINAAAAAL.

—Equis— Minghao agarró al gatico y este le maulló en queja— A mí no me estés hablando así, feo.

—No le digas así al niño. Está chiquito.

—... Es niña— dijo mientras veía debajo— Eres una niñitaa amoor.

—VAMOS A PONERLE ROSA.

—O le ponemos cumbia.

—Quejeeeso ¿Y a los otros qué? ¿Guaracha y reguetón? No vale.

—Ya sé, vamos a ponerles nombres de gemas.

—Tipo Steven Universe.

—Puede ser.

—O YA SÉ, QUE ELLA SEA PANDA, Y LOS OTROS DOS PARDO Y POLAR.

—... Me gusta.— Minghao le pasó a Panda a Junhui cuando ya estuvo alimentada— Ve con tu papá.

—No puede ser, qué cuchi sonó eso.

—Ajá, este es pardo... Sí, es macho.— el gato le maulló cuando lo bajó. Y agarró al blanco— Y tú Polar.

—¿Es niño?

Minghao volvió a alzar al gato y verificó.

—Sí, es macho. La cosa es que si nos los vamos a quedar, tenemos que castrar a los machos después, pueden preñar a Panda cuando crezcan.

—¿Eso no es malo?

—Es mejor si no queremos ser la familia sobre poblada.

—¿Es caro?