U.E.I Sevenzuela -Seventeen-

17

—No me digas esa mierda, por favor.

—Perdón...

Joshua se quedó mirando las llaves encima de la mesa mientras escuchaba la voz afónica de Jeonghan. Ahora no era el único de la Trinidad en el salón, sino que como vocero de reemplazo, le tocaba estar pendiente del salón.

Joshua suspiró. Miró a los lados en busca de su mamá, al no verla por ningún lado, habló dulcemente.

— ¿Te sientes muy mal?

—Me duele la cabeza y no quiero comer... No sé qué mierda loca nos dió pero no me gusta.

Joshua sonrió.

—Tranquilo, descansa. Yo les llevo las clases.

—Gracias... Eres un sol.

—Lo sé— Joshua se rió al escuchar una queja de Jeonghan— Ya me voy entonces. Mi mamá está en el carro, supongo que con Hansol.

—Dale... Te quiero.

—Ehg, gérmenes.

—Maldito.

—Te quiero.

Joshua trancó la llamada suspirando pesadamente. Encargado del salón... Cristo. No tuvo que burlarse al decir que el tercer vocero no servía para un coño.

Pero, todos dependían de él...

Eso quiere decir que estaba al mando...

Y tenían que hacerle caso...

—JISOO, MUÉVELO— escuchó a su mamá desde afuera.

Joshua miró de nuevo las llaves, agarrandolas en un ataque de poder antes de salir.

No tardaron mucho en llegar al colegio, Sofía hablaba con él como toda niña grande que era. Mientras que Hansol se meneaba al ritmo de la radio.

Al llegar, todos se despidieron de la señora Hong, y entraron al colegio medio vacío.

—Shit, verdad que ahora salimos normal.

—¿Cómo normal?

—La semana pasada salimos a las 11. Ahora nos toca como siempre.

Joshua chasqueo la lengua, cierto.

—Hansol, vi a mis amigas. Me voy.

—Okay, nos vemos a la salida ¿Agarraste tu galleta?

—¡Sí!

Joshua vio como los hermanitos se separaban como siempre, tan adorables y lindos.

—Sofía es muy linda.

—Es fastidiosa.— Hansol siguió a Joshua, el cual se reía por lo que dijo— Me roba medias.

—¿Le quedan?

—Bro, sí.— Joshua volvió a reír— o les agarra ruedo, no sé.

—MUCHACHOS, ESTO ES DE VIDA O MUERTE— ambos se asustaron, Seokmin llegó de la nada con una hoja de cuaderno doblada en una mano y un papel bond en la otra— ¿SABEN DIBUJAR?

—Yo no— dijo Hansol— ¿Qué necesitas dibujar?

—DOS CANGREJOS.

—¿Vas a exponer sobre cangrejos?— dijo Joshua y Seokmin se río en medio del pánico.

—ANIMALES MARINOS. ME TOCÓ EL CANGREJO. HORRIBLE, PERO ME ENTERÉ AYER A LAS 10 DE LA NOCHE.

—¿Por qué?