Los niños no piden venir a este mundo y esto Camus lo sabe muy bien, sin embargo no estaba seguro de poder lidiar con la situación que le plantaba la vida en ese momento, de los errores se aprende, pero esto iba más allá y él tendría que aprender a...
-Muy bien espero no se olviden nada, porque una vez que estemos allá no pienso venir a buscar algo. Aunque solo había una niña, parecía que Camus le hablaba a dos
-No nos olvidaremos nada papi, ¿Ya podemos irnos?. Estaba muy ansiosa
-De acuerdo, andando
Así partieron, por cada templo que pasaban todos los saludaban cordialmente en especial al pequeño copito, llegaron a la playa y Nadja quiso ir a nadar solo que...
-Bien hermosa, ya está. Terminaba de colocarle el protector solar
-Mm, no sé si ahora tengo muchas ganas de nadar. Se sentó en la arena con ambas manos en su cara
-Vamos, yo te acompañaré
-No está bien. Hundió su cabeza en sus rodillas, Camus dejó de leer un libro que había llevado y se acercó a su hija
-¿Que ocurre Nadja?. Pudo una mano en su hombro
-Nada...
-¿No le dirás ni a tu tío favorito?. Le hizo una caricia
-Me... da.. mie...do el mar
-Pero manzanita, iré contigo no tienes porque temer, además papá nos acompañará también. Le guiñó un ojo a Camus
-Iremos los tres hija. Se sentó a su lado
-Es que yo no sé nadar. Soltó de repente -Y me dá vergüenza
-Haa, princesita. Milo la acercó a él y le dió muchos besos en sus cachetitos -¿Ese es el problema?
-Aja.Dijo con una vocecita apenas entendible
-No hay problema yo te enseñaré
-¿De verdad tío?
-Y Camus nos acompañará
-Yo cuidaré que no te ahogues. Le besó la frente
-Está bien. Se levantaron y fueron corriendo los tres al agua Jugaron todo tipo de juegos, al salir Nadja se quedó armando unos castillos de arena, ambos caballeros la vigilaban Milo comía un emparedado mientras Camus seguía con su lectura, de vez en cuando se miraban de reojo y sonreían, el francés había acercado su mano a la del escorpiano las entrelazaron y en un momento dado sin que se percate el.copito se dieron un suave beso, al rato Nadja quiso ir a recolectar caracolas y quería que su padre la acompañase, Milo aprovechó a tomar un poco de sol
-Mirá está papi, es color azul de seguro a tío Milo le encantará
-Es uno de sus colores favoritos
-Allí hay otra.Tomó una color salmon -Está me recuerda a mamá. La contempló
-Recuerdo que a Solange le gustaba mucho ese color
Comenzó a llorar despacio -¡Hey!, vamos Nadja no llores. La abrazó -Tranquila no estás sola, recuerda que estoy contigo y también extraño a mamá. Acarició su cabello -A parte también están Milo, Afro y demás tíos y dónde sea que esté mamá está cuidándote hija
-¿En serio lo crees?. Secó sus lágrimas con sus manitos
-Por supuesto, es más si gustas algún día podemos ir a verla y dejarle unas bellas flores, estoy seguro de que se alegrará
-También de que tú vayas
-Nadja...
-Ella siempre hablaba de tí papá. Lo miró tranquilamente -Puedo preguntarte algo
-Dime
-¿Querías mucho a mamá?
Esa pregunta no la esperaba menos de su hija de 7 años
-Yo hice mucho más que querer a tu madre Nadja. Miró hacia el cielo -Ella fue la persona que más amé en esta vida. La volvió a mirar
-¿Y a mí me querías?
-A tí te amé inconscientemente desde que supe de tu existencia
Nadja abrió los ojos con asombro y saltó a los brazos de su padre con emoción y entre lágrimas le dijo
-Mami tenía razón, eres el mejor papá del mundo y jijiji el más lindo también
Después de eso los dos regresaron con una cubeta llena de caracolas, le dió la caracola azul a Milo el cuál se puso muy felíz, Nadja estaba con hambre Camus le dió un emparedado de jamón y queso al rato se quedó dormida, ambos caballeros la acomodaron bajo la sombrilla
-¿Quieres?. Le ofreció un refresco
-Sí gracias este calor es abrazador
-¿Se divirtieron?
-Sí, es solo que Nadja me preguntó si yo quise a Solange
-¿A qué vino la pregunta?. Milo estaba intrigado
-Es que se acordó de ella
-Pobre manzanita, debe extrañarla mucho Camus
-Además estoy seguro que han hecho muchas cosas juntas como lo que hicimos hoy. Milo tomó rostro
-Me alegra que puedas cada día comunicarte más con tu hija Camus
Se besaron y fueron recostandose en la arena, entre besos el francés le dijo
-Quiero ir a dejarle flores a Solange y hacer eso de la despedida de una vez, y quería saber si quieres ir con nosotros
-Será un placer. Se besaron un ratito más y luego se separaron Era hora de volver al santuario
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Queridos lectores, nuevamente tengo que agradecerles el que sigan mi historia y no solo eso que además se tome la molestia de poner una estrella no hay palabras, me alegra profundamente que disfruten de la historia, les confirmo que nunca creí llegar a 1.26K de lecturas es una locura, millones de gracias a todos, en especial a GroovemetalMariJuly0miloacuarius15PrincesaSailorMoon y montón de gente más que también está presente, les digo que si está historia sigue gustando tanto haré posiblemente una segunda temporada Saludos con amor atte: Cecyangel95 💕💕💕
