—Déjame adivinar, le dijo que tenía que observarlas hasta que viera algo extraño. —dijo Moris riéndose a carcajadas.

—Eres un genio hermano, ahora vamos con la misión. —procedió a cortar la llamada con una gran risa.

Los cuatro chicos entraron de acuerdo al plan, Tayzon se encontraba en el baño esperando alguna señal de Moris. Andrés estaba cuidando la puerta donde ningún personal podía ingresar, David y Jacob se encontraba en la capilla buscando su objetivo.

La habitación estaba muy clara, sus ventanas estaban  abiertas y todo estaba en perfecto orden, ellos se acercaron a una parte de la habitación donde la cubría una gran cortina, al deslizarla hacía un lado vieron a un señor de aproximadamente 65 años postrado de rodillas en el suelo. David no entendía que buscaban así que solo seguía a su compañero, Jacob observó que delante del señor estaban varios objetos poco comunes, entre eso estaban una caja negra bastante grande cubierta de unas raíces secas con un olor fétido.

Jacob señala la caja con sus manos indicándole a David que ese era su objetivo, se desplazan suavemente por un lado del lugar sin hacer ruido para que el señor no los delate, en eso Jacob se acerca a la caja y cuando está apunto de tomarla una voz lo interrumpe.

—Yo no haría eso sí fuera tú muchacho. —dijo el anciano poniéndose de pie—Salgan de este lugar ahora mismo, solo los puros de corazón podemos estar aquí.

—Lo siento viejo pero ya llegamos hasta aquí y no me iré sin esta caja. —responde Jacob

—¿Sabes lo que hay en esa caja muchacho? No tienes idea de lo que puede pasarle a este mundo si eso cae en manos equivocadas.

—¿Cómo así que pasarle al mundo? Disculpé anciano pero ¿Qué carajos ahí en esa caja? —expresó David muy alterado.

—No le hagas caso a este viejo, solo quiere asustarnos. —dijo Jacob tomando la caja.

—Aun estás a tiempo de salvar tu alma, deja eso en su lugar y ven aquí para borrar de ti esas malas intenciones muchacho. —dijo el anciano.

—Ya cállate viejo, David vamos apúrate…—dijo Jacob corriendo hacia la puerta, se detuvo y miró hacia atrás. —¡David reacciona que debemos irnos apúrate!

El anciano miraba a David mientras intento dar un paso con su bastón, claramente estaba muy débil y solo podía hablar.

—Lo que está ahí dentro los va a tentar tanto como la ganas de respirar, una vez que empiecen sus vidas perecerán y un caos va a desatarse por culpa de su insolencia. —dijo el anciano mirando a David—Una vez que salgan de aquí, Dios no estará con ustedes.

—Vamos, tenemos que irnos…—Dijo Jacob tomando por la camisa a David y obligándolo a correr.

                       ****************

—No puedo creer que todo halla salido de maravillas, si no es por que robamos una iglesia, diría que Dios estaba con nosotros. —expresó Tayzon.

—El que nos acompañaba era alguien ajeno a Dios…—dijo David muy confundido.

—Bueno ya que estamos aquí todos, vamos a ver qué hay en la caja. —dijo Andrés muy emocionado.

—Oigan déjenme ver, no cabemos todos en la mesa. —dijo Jhon intentando entrar a la conversación.

Jacob trató de arrancar las raíces secas y en el proceso una espina lo hirió de manera repentina, las raíces recuperaron el color y su grosor.

—¿Qué pasa con esta caja? Acaban de cobrar vida esas raíces. —dijo Moris viéndola de cerca.

Jacob lo intentó de nuevo y se deslizaron las raíces de la caja sin ningún esfuerzo, todos se miraban muy confundidos.

Hell Game Where stories live. Discover now