Mi Muñeca Mi muñeco (Nuevas Especies)

CAPITULO 4

-Eres diferente Will- dije al para y mirarle a esos hermosos ojos azules –pero el ser diferente te hace especial, mucho más especial para mí-

-Gracias- me beso otra vez

Vaya manera el de besarnos, no parábamos de reír.

-Y cómo te escapaste? - pregunte otra vez, estaba echada sobre su cuerpo

-Confió en ti mi muñeca, pero...- paso sus manos por mi cintura

-Yo lo entiendo Will, no tienes que decirme por donde sino como, las nuevas especies vigilan muy bien esos muros y puertas, es de saber común que tienen una impecable seguridad-

-Bueno, primero tuve que discutir con mi hermano mayor-

-Que? -

-Nada grabe solo debía tener una excusa para encerrarme en mi habitación, lo hago a veces cuando entreno a escondidas ahí o cuando hablamos todo el día-

Cierto, había ocasiones que hablamos todo el maldito día y eran los mejores porque hacíamos algo juntos como mirar una película o jugábamos algún juego por online, hacíamos cualquier cosa.

-La cosa es que nadie me busca cuando me encierro, mi familia aprendió a no molestarme cuando estoy con mi genio y solo dejan comida en el pasillo, más solo funciona por un día porque si no aparezco al día siguiente mi madre rompe la puerta de mi habitación-

-Lo hace? - debía tener mucha fuerza

-Lo hizo cinco veces y la que se me arma, mi madre es cariñosa pero no tiene mucho aguante, mi padre dice que es una característica que ama de mi madre y que le hizo enamorar de ella-

-No tiene paciencia-

-Las nuevas especies tampoco somos muy pacientes que digamos, pero yo he aprendió a tenerla mientras no me molesten-

-Fuiste muy paciente conmigo- fueron dos años

-Y pusiste a reto todo lo que soy- me dio un pequeño besito rápido –y así que discutí con mi hermano y todo este día nadie sabrá que me escape, use una entrada especial que estuve buscando unos buenos meses desde que pusimos la fecha de nuestro encuentro-

-Nadie sabe estas aquí entonces-

-Nadie, y tengo de mi suerte también que mis padres tuvieron que viajar a la Reserva, luego van a ir a Future-

Conocía sobre Future, no investigue mucho, pero era otras tierras que consiguieron la ONE, decía que mayormente tenían grandes edificios con varios centros desde investigación a diversión.

-Como es ese lugar? -

-Me han contado que tiene cines- desvió la mirada

-Te contaron? ¿No has ido? -

-La seguridad ahí aun es defectuosa a pesar de todos esos rascacielos que hay, mi padre se niega a llevarme ahí-

-Por qué? - no lo entendía, ahí vivían muchas nuevas especies

-Siempre ocurre algo ahí y mi padre piensa que sería peligroso-

-Ya veo... es una pena que tampoco tus hermanos puedan ir-

-Ellos si han ido-

-Qué? - lo mire –ellos sí y tú no? - arrugue la frente, esto empezaba a molestarme

-Recuerda que soy diferente- cerro los ojos contrayendo el rostro

-Will-

-Pero nada de eso me importa- abrió los ojos –siempre quise ir y discutí con mis padres mucho sobre todo con mi padre, pero ahora es diferente, el estar aquí contigo, poder tocarte al fin... supera cualquier deseo que haya tenido antes-

-Escuche que ustedes pueden oler diferentes emociones... a que huelo? -

Respiro hondo.

-Hueles dulce... eres feliz? -

-Si- oculte mi rostro en su pecho –muy, muy feliz-

-No te ocultes, quiero ver todas tus expresiones- tomo mi rostro con sus manos –todas- quiso besarme otra vez lo esquive

-Nos hemos besado mucho...-

-Sigo queriéndote más-

-Pero no somos novios para hacerlo- mire a otro lado avergonzada, mi corazón iba a mil con cada beso que daba o recibía

-Hazel- aún tenía mi rostro en sus manos –mírame- obedecí –mi muñeca- acaricio mi mejilla –somos mucho más de lo que puedas creer-

-En serio? -

-Si, pero si quieres que te pida ser mi novia lo hare- se levantó –he visto una película donde el humano grita para pedirle a la humana ser su pareja, ¿quieres que haga eso? -

-No! - eso sería vergonzoso y llamaríamos mucho la atención

-Entonces como lo quieres, pídemelo y lo hare-

-Creo que pregunte de más- parecía empeñado a siempre avergonzarme –somos mucho más? - busque sus ojos

-Somos todo-

-Entonces somos novios-

-Lo que tú quieras- esta vez sí logro robar mis labios, no fue un beso apasionado, fue calmado, tranquilo, como si me atesorara

Terminamos abrazados, me encantaba estar entre sus brazos y era una lástima separarme de ellos así que me abrace con brazos y piernas a su cuerpo, fue complicado porque usaba un vestido, pero nada me importo y había pocas personas, parecíamos una simple pareja.

-Will...-suspiré -eres mi primer novio- confesé –mi primer beso-

-Y robare todas tus primeras veces-

-Eso espero- porque dejaría que lo hiciera

Luego nos levantamos y fuimos a comer algo, cerca había un pequeño café donde ofrecían comida, comimos mientras seguíamos hablando. Nos sentamos en una mesa apartada y me conto sobre sus hermanos, tenía uno mayor y otro menor, Unión y Joy. Yo le conté sobre mis tres hermanos, Brenda, Lowell y Jadenn. Y me toco hablar de mi familia, no quería hacerlo así que le conté pequeños detalles como que mi familia era muy importante, que no estaban en contra de la ONE pero que tampoco los apoyaban, Will no estaba convencido después que le dije antes que si ellos se enteraban nunca nos volveríamos a ver. No quise centrarme en esos detalles así que pasé a contarle sobre el internado, Will sabía que era un internado de música, que amaba cantar, pero también que lo odiaba.

Terminamos de comer y pasamos a dar una vuelta por otros lugares, ambos compramos gorros y nuevos lentes, para que nadie nos reconociera. Caminamos mucho para encontrar un cine, Will iba a ver por primera vez una película en un cine y seria conmigo. Decidimos por una graciosa, nos partimos a reír en muchas ocasiones.

Me le quedé mirando muchas veces y el me atrapaba haciéndolo para conseguir robarme muchos besos que le di la bienvenida.

Cerca de las 2 volvimos a su moto y dimos una vuelta hasta otros lugares escondidos. Nos tomamos tantas fotos, nos grabamos. Hasta nos tomamos una foto besándonos cosa que me avergonzó.

Will era tan perfecto que me robaba los suspiros.

Fue una grandiosa cita que al final tenía que terminar.

El sol empezaba a ocultarse.

-No quiero decir adiós- me dijo mientras mirábamos el atardecer desde un mirador a la playa y me abrazaba

-Yo tampoco- confesé

Aunque quisiéramos no podíamos seguir en esta burbuja de felicidad para siempre.

-Hazel...- susurro en mi oído –te amo-