CAPITULO 4

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Hoy, hace dos dias que no salgo de casa, me levanto muy temprano. Me pongo unos pantalones cortos negros y una camiseta corta granate, me hago un moño, me pongo las converse y salgo por la ventana. Comienzo a caminar sin rumbo fijo, después de una hora y pico llego a nuestro lugar. Entro en la pequeña cabaña y me siento en uno de los asientos. Me quedo mirando a la nada durante nose cuanto tiempo. No sé cuanto llevo aquí, pero me da igual. Estoy mejor que en mi casa.

Kona: ey hola –dice entrando por la puerta- no sabia que estabas aquí –dice sonriendo y yo hago una mueca- ¿Cómo estas? No sabemos nada de ti desde el otro dia

Yo: lo siento, no estaba de humor –hago una mueca

Kona: no he visto tu coche –dice mientras busca algo en una caja

Yo: he venido andando –me mira cuando ya tiene en la mano lo que buscaba- quería despejarme un poco

Kona: vamos, te llevo –dice saliendo de la cabaña

Yo: ¿Dónde vas tu?

Kona: al taller, le voy a dar esto a mi padre y luego te acerco a casa –levanta la pequeña pieza que ha cogido de la caja antes- ¿quieres venir?

Yo: no quiero molestar

Kona: -rueda los ojos- tu no molestas, ya lo sabes –dice sonriendo- venga vamos

Nos montamos en su coche y varios minutos después llegamos al taller de tom, el padre de kona.

Tom: ¿kona? ¿traes la pieza?

Kona: creo que esto servirá –le da la pieza que cogio

Tom: leilani –se da cuenta de que estoy aquí- que sorpresa

Yo: hola tom –digo sonriente

Kona: estaba en la cabaña, fue caminando, asique ahora la acercare a casa

Tom: asi me gusta hijo –dice poniéndole la mano en el hombro a Kona

Kona: luego te veo en casa –dice en forma de despedida

Yo: empiezo a pensar que tu padre creerá que soy una pesada –digo mientras me abrocho el cinturón

Kona: ¿Por qué dices eso? Si le caes genial –dice con una sonrisa

Yo: duermo en tu casa muy a menudo, siempre estas llevándome a los sitios, nose

Kona: porque somos amigos, para eso estamos

Yo: gracias –hago una mini pausa- por estar siempre cuando te necesito –digo mirándole con una mueca y el me responde con una sonrisa

Me despido de Kona con un abrazo y entro en casa por mi ventana. Bajo por primera vez a comer con mis padres y la única conversación durante toda la comida es la universidad. Supuestamente tendrían que contestarme pronto, con si me han aceptado o no.

Paso la tarde tranquila en la piscina sin hacer nada en concreto. Ceno con mis padres, esta vez en un incómodo silencio. Y mas tarde me voy a dormir.

A la mañana siguiente me despierto porque esta sonando mi teléfono. Es Tj.

Yo: ¿Qué pasa? Son las 7 de la mañana –digo medio adormilada

Tj: estamos hablando de ir a hawaii todos hoy, ¿te apuntas?

Yo: ¿a que hora sale el ferri? –digo frotándome los ojos

Tj: en una hora

Yo: vale, os veo en el muelle –cuelgo

Me levanto de la cama, la hago lo mas rápido posible y me meto a la ducha. Me dejo el pelo suelto y me pongo mis converse blancas. Me pongo un mono corto azul que se ata al cuello y tiene toda la espalda al aire libre. Bajo a la cocina y desayuno algo rápido. Dejo una nota diciendo que me voy a hawaii, que volveré tarde. Salgo de casa y voy caminando hacia el muelle que tan solo esta a unos minutos de mi casa, y aun tengo tiempo de llegar.

MokaiWhere stories live. Discover now