l⚘Inazuma Eleven [AU MEDIEVAL]⚘l

Capítulo 4

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— Gracias por la ayuda.

La chica se sentó en un Mesón en la cocina un momento para suspirar cansada mientras Asuto traía una olla caliente y una tabla de madera, ambas puestas en la mesa.

—De nada.

El protagonista trajo un cucharon, dos cucharas y dos tazones.

—¿Segura que no hay problema de que...?.

—Si, segura. Sirvete cuanto quieras. De todas formas tu ayudaste a preparar el estofado.

— Gracias.

— Además es tu pagó por ayudarme a sacar toda esa comida descompuesta y además repartir pedidos que tenia pendientes.

— ¿Quieres que te sirva también?.

— Seguro, gracias Inamori.

El chico puso un plato junto a la olla virtiendo el contenido de ella en dos platos de forma equitativa.

— Tsukushi, ¿Así está bien?.

— Ajá.

Estaba caliente. Incluso si los soldados caminaban de allí para allá derritiendo todo, seguía haciendo frío y esa comida era perfecta para el clíma.

— ¿Y qué hace por estos lados un chico de la naturaleza?.— Pregunto la chica de pronto.

— ¿Cómo sabes que no soy de aquí?.

— Por tu caballo, tiene un logo de la naturaleza. Pero me imaginó que vienes de la Primavera.

— Bueno, si. Quería conocer más lados, ya sabes. Nunca había salido de mi casa y eso.

—Esta bien, señor sospechoso.

— ¿Te molesta si preguntó porque tenías tanta comida podrida?.

— Por estos guardias que derriten todo. Usualmente tengo todo en una habitación aparte con una refrigeración mínima para que no se congelen. ¡Pero...!.

— ¿Pero...?

— Perdona el enojo... ¡Pero estos imbéciles del reino del fuego andan de aquí para allá!. ¡Incluso se metieron a mi restaurante y mi mamá anda con los nervios de punta!. ¿Puedes creer que nos acusaran por robar aquello que buscan?. ¡Solo porque éramos meseros en la fiesta!.

— Que mal. A nadie le gusta que lo traten de ladrón y mentiroso.

— ¡Exacto!. ¡¿Quiénes se creen que son?!. ¡Se sienten con mucha autoridad sólo porque su rey tiene problemas de ira!.

Frustrada, la chica se levantó enojada y camino a lo largo de la cocina con la intención de calmarse.

— ¡De verdad!. ¡Mira cuanta fruta y verduras perdimos!. ¡Nuestros huertos no dan tanto!. ¡No lo vale!. ¡Ni siquiera se porque estan aquí si ese tonto príncipe probablemente ya se fue!.

— ¿Príncipe?. ¿Cuál príncipe?.

De pronto Tsukushi se dio vuelta con una expresión facial nerviosa. Caminó lentamente y regreso a su asiento anterior.

— Ninguno.

— Porfa, Cuéntame, soy de fiar.

—En serio, no se porqué dije príncipe. Que torpe de mi.

— Vamos. ¡Si se como guardar secretos!.

La chica castaña suspiró con frustración, entrelazo sus dedos y comenzó a hablar.

—No lo escuchaste de mí.

— No lo escuche de ti.— Repitió Asuto intentando dar gracia.

— Como dije, no lo escuchaste de mí. Lo que se perdió no fue un objeto, fue el príncipe del fuego. Desapareció después de la fiesta. Todos creen que fue por culpa del país del invierno. Claro, el país del fuego lo está buscando en varios reinos pero se concentran acá.

— ¿Y tu crees que este en el invierno?. Es que dijiste "probablemente ya se fue".

— Cuando los nobles tienen visitas cambian el menú. Lo se porque trabajo con mi mamá en la cocina del palacio. Este último tiempo. Y se redujo la libertad de pasear de la servidumbre por el Palacio.  Así que si, creo que estuvo aquí. Además un mago, guardaespaldas de la princesa, se quejaba de que el invitado de la princesa era insufrible y que sólo causaría problemas a la larga.

—Ya veo...

— Y mira, hay un montón de guardias. Si causó problemas.

Asuto estaba satisfecho, había estado 2 días en el reino del invierno y ya estaba soltando frutos.

—¿Crees que hay alguna forma de contactarme al mago ese?.

—¿Por qué quieres contactarlo?

— Soy muy curioso. Debes admitir que es un tema muy interesante.

— No hay forma de entrar directamente al palacio ahora mismo. No es tan sencillo. Pero.... Conozco a alguien.

—¿En serio?. ¡Me viene genial!.

—Si. Pero deberías ir mañana. Por las noches es imposible de contactar.

Asuto miró por la ventana percatandose de que de hecho era de noche, como dijo ella. Suspiro mientras veía el plato vacío que al parecer llevaba así mucho tiempo.

—  ¿Conoces algún lugar donde pueda quedarme por hoy?.

Ella se cruzó de brazos.

— El primer piso es un restaurante y el segundo una posada. Cuesta 2 monedas de plata la estadía pero te dejaré quedarte gratis si mañana me ayudas tal como lo hiciste hoy.

— ¡No hay problema!. ¡Gracias!.

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Para ubicar un poquito:

He estado editando un poco los capítulos anteriores. Para que se noten más las horas y los días.

Aun no se si está claro.

Pensé que tal vez no debería cruzarse de un país un país al cabo de unas horas solamente. Así que Asuto tardo en salir de la Primavera 1 día a caballo y llegar a la Ciudadela del Invierno a un día y medio.

Supongo que debería ser mas, no estoy segura aún. Supongo que debí tener Encuenta que va en caballo y asi.

¿Quedaría más claro si narro algunos campamentos a lo largo de la historia?.

Eso.

Sale bye