Mística Natural: Pasado & Presente. Capítulo IV: EMOCIONES, MAGIA, AGUA

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Miriyan sintió a Sebástian en las cercanías, su esencia era tan pesada como el más oscuro sentimiento, él estaba atormentado y ella no podía asegurar el porqué; tenía algunas teorías, pero no había podido confirmar ninguna. Quería ayudarlo, él era su amigo, el dueño de sus pensamientos, el ser que amaba apasionadamente, y quien, para su desventura, no le correspondía.

Tiempo atrás, cuando él se alejó de su familia durante años, pudo disfrutar de su compañía; intermitentemente, por supuesto, ya que el Guarnat siempre ha sido solitario; sin embargo, se albergó en su aldea y compartieron muchas experiencias felices. Todo cambió desde que apareció Luna Polleo, y aunque Miriyan hubiera querido abrigar simpatía por ella, por La Única, no podía evitar sentir cierta aversión, no soportaba la indudable conexión que tenían.

Recordó una conversación que sostuvo con Aidan unas semanas atrás, y de cómo se sorprendió al oír que, tanto él, como sus allegados, creían que Sebástian se había alejado durante ese tiempo, por el dolor de haber perdido a su amada: María, aquella abunat hija de Proters, simplona y, según su criterio, sin ningún atributo especial.

Siempre creyó que Sebástian se había alejado de sus seres queridos por ese comportamiento humano de causar muertes por avaricia, porque le causaba repulsión, pero jamás porque se sintiera desconsolado por haber perdido a la mujer que amaba, de eso estaba segura, lo conocía lo suficiente para saber que nunca estuvo enamorado de María; y así mismo se lo dijo a su hermano. El hecho de que hubieran supuesto las razones de su lejanía, y que él no lo negara, no quería decir que estaban en lo cierto.

Sebástian se alejaba y retraía cuando se sentía insatisfecho con él mismo, cuando creía que no era buena compañía, y sentir odio hacia los humanos no era propio de la nobleza de un Diáfano; este siempre fue el razonamiento de Miriyan, la confianza y el entendimiento de su personalidad debido a su fuerte amistad con él, la había llevado a esas conclusiones.

Ahora era distinto, ahora se alejaba también de ella, y eso era inaceptable, y adicionalmente muy injusto, le dolía como había sido despojada de la compañía del atractivo Guarnat de los ojos verdes; quizás si se vinculaba con los Proters tuviera más oportunidades de compartir con él. Esta era una opción que tenía que considerar meticulosamente, porque no le agradaba estar junto a humanos, aunque muchos Elfos estrechaban lazos de amistad con ellos, ella no pensaba, ni sentía igual.

Se acercó hasta el mirador ubicado a lo alto del Parque Nacional Montañas Azules, y pronto notó que Sebástian se bloqueó, supuso que él mismo sabía que la frustración que lo dominaba se percibía fácilmente, y eso era irresponsable, cualquiera podía ubicarlo sin mucha dificultad. Se detuvo frente al pasamano que delimitaba la terraza y ahí lo vio, con el didgeridoo a sus pies.

Aunque todavía la noche era joven, era obvio que no iba a poder despertar a las Tres Hermanas, Eiris le comentó que no ha podido hablar con ellas desde que comenzó el entrenamiento de Luna; esta novedad no tenía que estar necesariamente vinculada con la humana, porque, aparentemente, era la actitud negativa de Sebástian la razón por la cual las criaturas de piedra no querían compartir más con él.

Con la agilidad que caracteriza a los Elfos, Miriyan se desplazó sobre las rocas hasta llegar al lado del Guarnat, y en silencio, se sentó junto a él.

—¿Te quedas a cenar esta noche? —preguntó la Elfa minutos después tratando de imprimir desinterés en su tono, pero era inútil intentar ocultar su deseo de querer disfrutar de su compañía; así como ella lo conocía a él, él la conocía a ella.

—Hoy no —respondió el Guarnat poniéndose de pie para luego disponerse a guardar el didgeridoo en el escondite de siempre.

Miriyan lo observó desplazarse sin poder evitar analizar cada uno de sus movimientos, hasta la manera de caminar había sido afectada por los nuevos cambios en su actitud, la tensión dominaba sus articulaciones, estaba convencida de que Luna tenía algo que ver en el comportamiento reciente de Sebástian, y no sabía si alguna vez iba a volver a experimentar momentos gratificantes a su lado como en el pasado.

Mística Natural: Pasado & Presente (PRIMEROS CAPÍTULOS)Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin