"Londres Antiguo" Parte I

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— ¿Si?— respondió.

Elly balbuceo sin saber que responder.

— ¿Doctor?— preguntó.

— Si, aquí para ayudar— respondió el señor del tiempo mientras hacia una reverecia.

— ¿Cómo hiciste eso? Hace un momento estabas en la biblioteca, rostro diferente, moño ridículo— dijo Elizabeth sin entender que estaba sucediendo.

— ¿Biblioteca? ¿Moño ridículo? ¿De qué estas hablando? ¿Quién eres?

— ¿Cuántos años tienes?— preguntó la chica.

— 904 años.

— La última vez que te pregunte, no sabías, habías perdido la cuenta— dijo Elizabeth para si misma.

— ¿Última vez? Supongo que viajas con una versión futura de mi— respondió el señor del Tiempo. —¿Cómo has encontrado a la TARDIS?

— La he escuchado.

El Doctor examinó la situación mirando fijamente a la chica.

— ¿Cuál es tu nombre?

— Elizabeth— exclamo alguien detrás de ellos.

Elly miró atrás suyo para encontrarse con el Doctor a quién ella acompañaba buscandola.

— Mejor me voy, me estan buscando.

— Un placer conocerte.

Elizabeth miró como la TARDIS se desvanecía antes de regresar con su extravagante acompañante. Y se preguntó que rayos hacían los señores del Tiempo para cambiar de rostro. Y en su mente corrió la palabra "Regeneración" por todos lados. 

— ¡Oh! Ahi estas, ¡He estado buscandote!— exclamó con alegría el Doctor mientras abrazaba a Elly. Cargaba una bolsa grande en el hombro. —Ven, quiero que conoscas a alguien.

El Doctor condujo a su acompañante a la librería donde habia entrado antes emocionado, y Elizabeth se encontró con un señor de cara un poco regordeta, bigote gris, cabello corto y amplía sonrisa que los miró al entrar al pequeño local. La chica lo reconoció de inmediato y se exalto de asombro e incrédula.

—¡Tu debes ser Elizabeth!— prorrumpió el señor Arthur Conan Doyle con acento escocés. — Tu hermano habla muy bien de ti.

En ese momento, Elly miró con una expresión de confusión al Doctor.

— Un gusto en conocerlo Señor Conan— respondió al saludo de su escritor favorito con tranquilidad, ocultando su emoción para no delatarse, pensando en su colección de libros del famoso dectetive Londinense. — He disfrutado su extraordinario relato de Sherlock Holmes.

— Es un gusto tener lectores— garantizó con una sonrisa que albergaba felicidad y entusiasmo. —¿Qué les trae a Norfolk Doctor Smith?— inquirió el escritor.

— Hemos venido por algunos libros, ya sabe. A mi hermana le encanta leer. ¿Gustas uno en especial?— siguio hablando el "Doctor John Smith" con su "hermana".

— Veré que encuentro.

Y Elly se apartó de ellos para mirar los libros que se hospedaban estacionariamente en los anaqueles de madera. 

<< Los poetas malditos, Los Hermanos Karamazov, Las Aventuras de Tom Sawyer, Viaje al centro de la Tierra, De la Tierra a la Luna, Veinte mil Lenguas de viaje submarino, La vuelta al mundo en 80 días, Barba Azul...>> canturrió en su mente sin tanto interés después de coger una obra de Julio Verne.

— The MAD man with the BOX— leyó en voz baja el lomo el título del libro de un estante llamado "Fantasía", donde descansaba solo ese cuento. Observó la portada y no dejo de mirar el dibujo animado de una caja de cartón, que tenía escrito "Time Machine" con letras blancas; y un hombre encorbado de cabello negro y nariz aguileña con los pies metidos en la caja, llevaba debajo de su brazo derecho un sombrero negro y en su mano izquierda, desfundaba una barita negra de su chaleco, mientras que un público de niños miraba con delirio y fanatismo. 

La chica frunció el ceño, curiosa por la historia. 

<< by Melody Malone.>> leyó en la esquina inferior derecha de la portada. Y agregó a la pequeña canasta que solo resguardaba el libro "De la Tierra a la Luna".

— ¿Has encontrado algo de tu agrado?— preguntó por detrás del Doctor.

Elly alzó la canasta de mimbre. Y el señor del Tiempo pagó por los 2 libros.

Antes de salir, se despidieron del autor de las maravillosas aventuras del intelectual Sherlock Holmes.

— Me gustaría invitarlos a comer— dijo antes Arthur. — ¿Gustarían acompañarme a la hora del te? Me encuentro hospedado en el hotel Real Links.

Elly espero la respuesta del Doctor, y golpeo su espalda para que hablara.

— Con mucho gusto— y le devolvieron la sonrisa. Y salieron de la biblioteca.

Eran las 5 en punto, de la tarde. El Doctor y Elly habían llegado al Hotel buscando su pequeño restaurante y al señor Conan Doyle.

— ¡Caray! — exclamó Sir Arthur al ver el periódico mientras que el Doctor y la chica tomaban asiento junto a él. — Han encontrado un cuerpo en Dartmoor. El señor Charles Cabell.

Y a Elly se le esfumaron las ganas de te y galletas.

— ¿Cabell? Me suena el apellido— replicó el Doctor, atento a las palabras de Sir Arthur. —¿Ha oído hablar de la Leyenda de Dartmoor?

— ¿Leyenda?— respondió el escritor.

— Si. Sobre Richard Cabell— inició hablando el Doctor con un tono de emoción en su voz. — Richard Cabell tenía una reputación muy conocida y era dueño de todo Buckfastleigh. Era apasionado por la caza y en aquellos días era descrito como un "hombre monstruosamente malvado". Ganó su reputación por su inmoralidad y por haber vendido su alma al diablo. E incluso habían rumores que decían que había matado a su esposa.

Elizabeth sintió como el te se atoraba en su garganta y dejo la taza sobre la mesa. ¿De donde sacabas esas historias el Doctor?

— Murió el 5 de Julio de 1677 y el día que fue enterrado, se dice que una jauría de sabuesos aullaba tristemente no tan lejos del lugar— continuó el Doctor. — Desde entonces, se le puede encontrar liderando a la jauría para cazar, usualmente en el aniversario de su muerte. En un intento de poner el alma a descansar, los habitantes del pueblo construyeron un edificio grande alrededor de la tumba, doblemente asegurado con una enorme losa en la parte superior de la tumba para evitar que el fantasma escape.

Sir Arthur se encontraba en la silla maravillado por cada una de las palabras de la historia, mientras que la compañera del señor de Tiempo trataba aún de terminar su taza de té. 

*<<Puede que no duerma durante un tiempo...>> se dijo a si misma mentalmente.

My Wonderful Adventure with the Doctor.Where stories live. Discover now